Nueva derrota del pirateo: AnimeFLV abandonará la distribución ilegal de anime

Publicado: 27 Mayo 2019, 16:57
Actualizado: 27 Mayo 2019, 22:26 0

Dicen que es imposible poner puertas al campo, pero durante los dos últimos años los aficionados al anime no han dejado de comprobar cómo la industria iba cercando el mercado negro de distribución. Primero fueron AnimeYT y Anime Móvil tras una denuncia de Crunchyroll, y ahora es AnimeFLV los últimos que ceden ante los controles de regulación de la industria.

Este pasado fin de semana la web de transmisión y descarga ilegal de series y películas de animación daba una desagradable sorpresa a sus seguidores en Facebook; en un comunicado anunciaba el respeto a la plataformas legales de anime tras el retraso en la emisión de "Ataque a los titanes", y ponían una deadline para cesar su actividad fuera del marco legal.

Sí, a partir de 2020 el sitio cesará su emisión de anime ilegal proveniente de los principales servidores de contenido. Por el momento se desconoce cuál será el siguiente paso de la web tras este punto de inflexión, pero las dudas no son escasas. ¿Se convertirá en una competidora legal de la industria? A diferencia de los casos sucedidos hace unos meses, AnimeFLV aboga abiertamente por apoyar a la industria.

Aún queda más de medio año para que entre en efecto la medida, pero el primer efecto de este cambio de política ya se ha dejado ver esta misma semana con la adaptación del universo de Hajime Ishayama. En España por lo pronto los aficionados a "Ataque a los titanes" se mantienen a la espera de noticias de la distribuidora para conocer la fecha de emisión de un episodio que ya ha dejado a todo Japón y Estados Unidos con la boca abierta.

¿Hacia donde camina la industria?

Con el enorme crecimiento de Crunchyroll, y la entrada cada vez más evidente de Netflix en el negocio, el campo de acción para las webs ilegales de anime tiene los días contados. Hulu mientras tanto ya prepara su desembarco internacional, aportando un granito de arena más a lo que parecen ser los últimos retazos de un negocio que hace menos de una década dejaba millones de dólares de beneficios.

Los aficionados ahora se verán empujados a abonar las cuotas mensuales de los servicios legales, o bien a esperar a que otra web se atreva a desafiar a las autoridades abriendo un nuevo sitio con fecha de caducidad.