Pasó semanas destripando psicológicamente a los personajes, viajó durante meses a Polonia para empaparse de la cultura del hombre que había creado la saga, y demostró en varias ocasiones tener más conocimiento sobre el brujo que los propios fans. Lauren Schmitd ha demostrado a lo largo de este último año estar a la altura de un proyecto como "The Witcher", y tiene muy claro qué es lo que quiere conseguir con él.
No trasladar la fama de los videojuegos de CD Projekt a televisión, ni crear historias paralelas en busca de paralelismos narrativos y visuales ambiguos. Durante el panel de la Comic-Con en el que Netflix terminaba revelando el primer tráiler de la adaptación, la showrunner ponía en claro el objetivo de su trabajo.
"En los libros hay toda clase de pistas y relatos sobre historias secundarias", explicaba sobre la ventaja del material original sobre la adaptación. Con un formato como el que propone la televisión, ella y su equipo fueron capaces de excavar en esa mina narrativa. "Tenemos que dar vida a esas historias", puntualizaba describiendo esta "The Witcher" como un "añadido" a los libros.
Habrá más espacio para explorar el universo de Sapkowski desde un punto de vista diferente al que ofrece el protagonista. Esa condición "geraltcentrista" fue a la que tuvo que adherirse el estudio polaco para sus títulos, y a la que precisamente no quiere aludir la directora.
"Leí 'El Último Deseo' y me enamoré perdidamente de los relatos", apuntalaba sobre su motivación para llevar a cabo un proyecto tan ambicioso. Pero aunque era una fanática del material fuente, inicialmente rechazó la oferta de Netflix de dirigir la serie, asegurando que no creía que fuera la adecuada para una serie de fantasía.
Sin embargo, después de pensarlo, decidió que era "mucho más que una fantasía". La mezcla de magia, sexo y violencia fue, en última instancia, secundaria a los temas centrales; esta era una historia sobre una familia y una heredera,. Algo que Schmitd sintió que eso era de su agrado. "Es todo lo una querría".
Henry Cavill se meterá en la piel de brujo liderando una ficción que promete romper la maldición del género, poniendo sobre la mesa las bases a seguir para futuras adaptaciones fantásticas. Sin fecha de estreno -rumoreada para el 20 de diciembre-, ni apenas datos de su formato, “The Witcher” prepara su carrera ya para marcar un antes y un después en la historia de la televisión.
“Geralt de Rivia, un solitario cazador de monstruos, lucha por encontrar su lugar en un mundo donde la gente a menudo se muestra más malvada que las propias bestias. Todo cambiará cuando el destino lo lance hacia una poderosa hechicera y una joven princesa con un peligroso secreto, los tres deben aprender a navegar juntos por el cada vez más volátil continente.”
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