La industria de los videojuegos es una de grandes historias de oportunidades y éxitos a gran escala. No obstante, también hay quienes cuentan con inmensas dificultades para trabajar en un sector que, desafortunadamente, no siempre ofrece las mejores condiciones. Esta cruda realidad ha sido descubierta de la peor forma posible por los miembros de Drakore Studios, una compañía inexistente que tuvo engañados a 25 profesionales distintos.
Rana Mahal, el rostro de tal compañía, logró engañar a un grupo de ansiosos profesionales para que trabajaran durante múltiples semanas a su cargo sin recibir compensación alguna, recogen los compañeros de Kotaku en un largo informe. Al parecer, el señor Mahal se dedicó desde el principio a realizar promesas de inversiones y pagos a sus trabajadores sobre los cuales nunca nadie llegó a ver absolutamente nada. Pese a ello, Mahal se compromete incluso ahora a cumplir con sus promesa para los que fueran sus empleados y niega que en ningún momento hubiera engaño alguno, pues él también estuvo invirtiendo horas de trabajo.
¿En qué estuvieron trabajando durante estas semanas de pura ilusión? Pues, sorprendentemente, en Zeal, una obra real para la cual, sin embargo, Drakore Studios jamás poseyó los derechos. El origen de este procedimiento se encuentra en conversaciones de Mahal con Lycanic Studios, desarrolladora que originalmente creó Zeal pero que se vio obligada a abandonar parcialmente el proyecto debido a la imposibilidad de sacar adelante el Kickstarter mediante el que verse financiados. En contactar con Mahal, este prometió un pago anticipado de 7 mil dólares así como posiciones y beneficios a largo plazo, aunque lógicamente en Lycanic jamás llegaron a ver nada de todo esto -motivo por el que los derechos de la IP se mantuvieron con ellos-.
Rana Mahal alardeó ante sus trabajadores de forma constante de haber obtenido posiciones de privilegio en empresas como Bioware o el estudio de videojuegos de Amazon, una vez más sin proporcionar prueba sobre ello e incluso contando con la negativa de Mike Laidlaw, destacado miembro de Bioware que no recuerda jamás haber tratado con alguien de un nombre similar al de Rana Mahal. En última instancia, un motín liderado por Brooke Holden, la joven gerente de Drakore Studios que también se había visto estafada, reveló la verdad a todo el mundo mediante el siguiente mensaje:
"Existen algunos hechos que han salido hace muy poco a la luz y de los cuales ninguno de nosotros era consciente. Primero, con lo que conocemos, Drakore Studios jamás ha existido. Varios de nosotros han preguntado por el número de registro de la empresa durante varios meses y no hemos recibido nada. No solo eso, sino que además Drakore, en ningún momento, llegó a poseer los derechos de la IP Zeal, la cual se mantiene con Mert y Tim -de Lycanic Studios-, algo sobre lo que se me había hecho creer al contrario y por lo que me disculpó si transmití información equívoca. Estos dos hechos se combinan para hacer que sea imposible invertir en nosotros. Ninguna distribuidora o posible inversor estaría bien de la cabeza si decidiera invertir en una compañía que técnicamente ni existe, ni cuenta con los derechos de la IP que está intentando vender".
CONTENIDO RELACIONADO
En las últimas horas el código fuente de GTA San Andreas ha salido a la luz
Para celebrar el inicio de la versión 5.3 y la llegada de Mavuika, HoYoverse ha regalado 60 protogemas
Sora, la IA que crea vídeos, se basa en Shenmue para hacer un clip de un videojuego hiperrealista
El mensaje sigue aclarando que 2025 es el año de salida de GTA VI
Es probable que Hollow Knight: Silksong sea uno de los juegos más esperados de los últimos años. Algo que no solo se debe a la calidad del primer título de la franquicia, sino a que esta secuela se anunció hace ya un buen puñado de años y, desde entonces, sus responsables han mantenido un intenso […]
Las informaciones proceden de uno de esos leakers que han demostrado ser infalibles