En un rincón tranquilo de Japón, donde la tradición milenaria del budismo zen se mezcla con la tecnología contemporánea, un monje budista ha encontrado una forma única de unir ambas esferas. Este monje ha fascinado a miles de personas en todo el mundo al grabarse en vídeo jugando al Super Mario Bros original mientras recita sutras cada vez que elimina a un enemigo.
Un monje budista japonés juega a Super Mario mientras recita sutras
El canal de YouTube del grupo de entretenimiento budista The Namazu es el escenario donde se pueden ver este tipo de videos.
The Namazu, conocido por su enfoque innovador para acercar el budismo a las nuevas generaciones, ha encontrado en este monje un aliado perfecto.
A través de estos vídeos, el monje no solo juega, sino que también educa a su audiencia sobre los principios del budismo y la importancia de los sutras.
Según Wikipedia, el hombre del vídeo proviene de una familia que regenta un templo budista zen, lo que subraya su profunda conexión con esta tradición espiritual.
Su condición de monje diplomado certifica que su conocimiento y práctica de los sutras no son superficiales, sino el resultado de años de estudio y meditación. A continuación os dejo con un fragmento, pero podéis encontrar el vídeo completo en su canal de YouTube.
Cada vez que el monje elimina a un enemigo en Super Mario, recita un sutra. Este acto puede parecer trivial a primera vista, pero tiene un profundo significado espiritual.
En el budismo, los sutras son escrituras sagradas que contienen las enseñanzas de Buda.
Recitarlas es una forma de meditación y devoción, que ayuda a cultivar la concentración y la paz interior.
Esta peculiar práctica no solo resalta la adaptabilidad del budismo a los tiempos modernos, sino que también ofrece una reflexión sobre la intersección entre el entretenimiento y la espiritualidad.
Tan solo un loco al que los videojuegos le han puesto los pelos como escarpias más veces de las que puede contar. Protegí a Ellie en The Last of Us, recorrí Arcadia Bay acompañando a Max y llegué a ser el mejor (el mejor que habrá jamás) junto a mi Vaporeon.