Muchas películas están teniendo problemas después de que la pandemia de coronavirus haya dejado al sector tiritando, y es que no son pocos los directores, productores y actores cuyos ingresos están directamente vinculados con el rendimiento del proyecto en el que han trabajado. Entre retrasos, estrenos en plataformas de streaming y un menor número de espectadores en las salas, largometrajes como Un lugar tranquilo 2 están en el centro de la polémica por lo que ocurre tras las cámaras, tal y como podemos saber gracias a un extenso artículo de Bloomberg.
John Krasinski y Emily Blunt, protagonistas de esta secuela (él también es director y guionista), están muy descontentos con Paramount Pictures debido a que su contrato tiene una cláusula que se relaciona directamente con la recaudación que hubiera obtenido Un lugar tranquilo 2 en cines. Está claro que debido a las restricciones, aforos y cines cerrados en gran parte del mundo, los dos actores creen que no van a poder ver de vuelta los ingresos de dicha cláusula, y su sueldo sería mucho menor al que hubieran alcanzado después de comprobar que la primera parte alcanzó los 341 millones de dólares en salas.
No sabemos exactamente la cifra a la que aluden Krasinski y Blunt, pero Bloomberg menciona "decenas de millones de dólares", y Paramount parece estar encerrada en sí misma y no va a revisar dichas cláusulas ni va a mejorar el sueldo inicial de los implicados. Además, como 45 días después de su estreno en cines Un lugar tranquilo 2 llegará a Paramount Plus, el temor sobre un fracaso económico para los intérpretes es incluso mayor.
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