Los productores de Juego de Tronos se habrían negado a hacer más temporadas, cuando George R.R. Martin sí quería

Está claro que el final de Juego de Tronos fue apresurado: George R.R. Martin escribió (y seguirá haciéndolo) mucho más de lo que vimos en la última temporada de la serie de HBO, y ahora descubrimos quiénes han sido los culpables de esta situación. No fue el autor de las novelas; tampoco HBO, sino los productores y 'showrunners' del proyecto desde el principio, D. B. Weiss y David Benioff, que aunque tuvieron en sus manos la posibilidad de hacer más temporadas, decidieron acabar en la octava.

Según revela George R.R. Martin y recoge el perfil especializado @thronesfacts, "podríamos haber tenido 11, 12 y hasta 13 temporadas", pero tanto Weiss como Benioff se negaron pese a tener luz verde de HBO. Parecía claro que la cadena de pago norteamericana no quería deshacerse tan pronto de su producto estrella, pero la disyuntiva de sus productores hicieron el resto. Ahora habrá que esperar a que el escritor termine la saga (todavía queda bastante, por lo visto) para saber cómo acaba su propia visión.

Son muchas las veces que se ha contado que Juego de Tronos falla en su octava y última temporada; como espectáculo, cumple con creces, pero el final de muchos personajes es apresurado y no cierra del todo sus arcos argumentales. Además, hay decisiones que se toman en el último momento que no convencieron a los seguidores más fervientes. ¿Extender la serie hasta la duodécima tanda de capítulos hubiera solucionado estos errores?