Como una estrella fugaz, la pasada generación de consolas se va disipando poco a poco a causa del gran protagonismo que está cosechando la actual generación. El aluvión de juegazos recientes de PlayStation 4 y Xbox One, así como la cancelación de proyectos destinados a PlayStation 3 y Xbox 360 deja entrever el fin de estas dos grandes consolas, sin olvidarnos, claro está, de las respectivas ediciones especiales tan abundantes anteriormente.
Una de las últimas ediciones especiales más impresionantes es la referente al colosal Metal Gear Solid V que acicala la PlayStation 4 con los colores representativos del juego, una auténtica preciosidad. No obstante, un fan Surcoreano ha decidido homenajear la anterior consola de Sony y ha calcado a la perfección la edición especial de PlayStation 4 en PlayStation 3 quedando un resultado realmente llamativo y encomiable. Os adjuntamos unas fotos para que valoréis el gran trabajo realizado.
CONTENIDO RELACIONADO
Se trata de una estrella que ya ha repetido presencia en anteriores portadas de la franquicia de Electronic Arts
La compañía japonesa deberá afrontar una demanda judicial que llega directamente desde Holanda
La división de videojuegos de Xbox se verá afectada por los despidos preparados por Microsoft
Se trata del juego que hará especial uso de las nuevas funciones delos Joy-Con 2
La nueva colaboración entre Meta y Xbox da como resultado el primer modelo personalizado de Quest, con estética Xbox y acceso instantáneo al juego en la nube
Incluso sin haber mostrado demasiado, Resident Evil Requiem está sabiendo convencer a los jugadores.
Corre para hacerte con este juegazo gratis y con su secuela al 94% de descuento.
En aproximadamente una semana, los títulos gratis de junio serán sustituidos por los de julio
En agosto saldrá otro título exclusivo para la consola de PlayStation, pero también llegará a PC
Con ella, esta es la única forma que existe de iniciar Concord y jugarlo
Se trata de uno de esos juegos que todo amante del género debería jugar en algún momento de su vida
Nunca hay que alegrarse con los despidos, pero es que se vea venir de lejos