Pokémon GO: ese juego para iOS y Android del que mi compañero Javier Reglero no para de escribir y del que todo me suena a chino. Pero tampoco os voy a engañar: fui de aquellos que se lanzaron a las calles cuando salió en 2016 dispuesto a dar un par de paseos cazando alguna cosa y no volver a jugarlo nunca más (porque solo uso el móvil para chatear y mirar Twitter, básicamente). Pero no vengo aquí a hablaros de mi experiencia con el juego, sino con una situación de lo más surrealista que se ha dado a raíz de su uso.
La cosa es que los compañeros dela Cadena SER se han hecho eco de unos documentos policiales que recogen un caso de lo más insólito: dos policías han perdido su trabajo por culpa de Pokémon GO. Pero dejadme que os dé un poco de contexto, porque la historia es de esas que no tienen ningún tipo de desperdicio.
No es la primera vez que ocurren este tipo de situaciones gracias a Pokémon GO y no creo que sean las últimas. Lo cierto es que no me entra en la cabeza ya no que un Snorlax sea más importante para alguien que acudir a una llamada de socorro, sino que pensasen en que no les iban a pillar. ¿Qué os ha parecido esta historia?
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