Debo reconocer que todavía no he jugado a Leyendas Pokémon: Arceus porque, sinceramente, no me atrae demasiado. Sin embargo, y a pesar de lo feo que me parece artística y técnicamente (por supuesto, gusto personal), todo el mundo que lo ha jugado me ha dicho que es un auténtico vicio, hablando por la parte de la jugabilidad y de que a partir de ahora la saga debería de ir más en ese camino, con mayor libertad dentro del título.
Como digo, insisto en que no lo he jugado y todo esto es opinión de la gente de mi alrededor. En cualquier caso, estoy seguro de que sí, será muy divertido de jugar, y gracias a ello se ha conseguido agenciar un buen número de fans del juego de Leyendas Pokémon: Arceus. Y claro, siempre digo que la comunidad me sorprende por las cosas que son capaces de hacer, y si este juego se ha ganado tantos fans, habrá alguno que sepa hacer cosas muy chulas. ¡Y eso es lo que os traigo hoy!
Como sabéis, el juego de Leyendas Pokémon: Arceus está ambientado en una época del pasado, por lo que las Pokéball se ven diferentes, hechas de madera y menos tecnológicas, por describirlas de alguna manera. Sin embargo, me parecen muy bonitas, y hay alguien que las ha hecho en la vida real con, además, una utilidad muy chula:
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