Estos últimos días he empezado a coger un poquito más mi ritmo habitual de juego. Mejor no preguntéis por qué en las últimas semanas apenas he tocado el PC o la PS4, porque es algo muy desagradable. Bueno, no tanto, pero digamos que me ha impedido jugar como siempre. Es más, he perdido ya un montón de skins de Overwatch por esto, y ahora mismo estoy muy triste.
Lo que más me fastidia es haber perdido las skins semanales, porque el resto quieras que no se puede conseguir con dinero del juego... un buen montón de dinero. Menos mal que la tercera parte llega este mismo verano, porque necesito ya la D.Va Gato Blanco en mi vida, por favor, y gracias. Pero no voy a contaros más mi vida, porque es momento de pasar al momento curioso del día.
Ojalá tener esa suerte en, al menos, un 10% de mis partidas. Muchas veces me ha pasado que me he salvado, lo he celebrado, y al segundo me han matado. Así os podéis hacer una idea de que me ha mirado alguien muy mal para tener tremenda mala suerte.
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