Hace unos cuantos días la comunidad de dataminers de Fortnite Battle Royale filtró la llegada de una nueva arma al juego. Esta tenía la aparencia de una pistola pirata y ahora, hace unos minutos, Epic Games la ha confirmado a través de la ventana de anuncios del título.
Como podéis ver en la imagen, la desarrolladora la ha presentado con el siguiente nombre "Un arma secundaria fiable" y la siguiente descripción "¡Cuidado! ¡Pega fuerte! . En principio se espera que esté disponible a partir de la actualización de contenido 8.10 que llegará el próximo martes 19 de marzo, por lo que en tan solo unos días la tendremos en el juego.
Por el momento se desconoce cual será su daño exacto y en que versiones estará, pero Dexterto ha recogido una filtración que nos sirve para hacernos a la idea. El arma secundaria fiable se podrá encontrar en rareza común y poco común, haciendo un daño de 86 y 90 de cerca y 34,4 y 36 a larga distancia respectivamente. Además el arma tendría un tiempo de recarga de 3,19 segundos y 3,045, usando la munición pesada.
Si estos datos son ciertos, esta arma pasaría a ser una de las pistolas más poderosas del juego ya que a corta distancia podrían eliminar a cualquier enemigo de un tiro en la cabeza o dos en el cuerpo. Es decir que podría plantar cara a algunas escopetas. Veremos como finalmente es incluida en Fortnite ya que desde que Epic Games nerfeo la pistola pesada, no hay ninguna que convenza a la comunidad.
CONTENIDO RELACIONADO
El esperado action RPG de Nexon y Neople llegará a las tiendas el 27 de marzo con una duración estimada de 80 horas para su final verdadero
No es la primera vez que ocurre algo similar, pero esta situación sería algo diferente
Aquí encontrarás los primeros detalles iniciales de su próxima edición, incluyendo en qué fecha se celebrará
¿Cómo llegó al gran éxito una de las celebridades femeninas más famosas (y polémicas) de internet? Te lo contamos aquí
Muchos fans esperan un remake desde hace años, aunque no se sabe si eso es lo que Square Enix realmente está preparando
Podría marcar un antes y un después en el mundo de los controladores de videojuegos