Diluvion es la gran apuesta del estudio independiente Arachnid Games, el cual tiene a sus espaldas otro título lanzado en diciembre de 2013 llamado Ballpoint Universe. Ambos videojuegos se desenvuelven en una estética algo similar, y es que si Diluvion destaca por algo precisamente, es por su apartado artístico. Desde el principio consigue plasmar a la perfección la novela de Julio Verne ‘’Veinte mil leguas de viaje submarino’’. Los edificios, los submarinos y las diferentes criaturas que se encuentran a lo largo de la aventura en Diluvion se tratan de una clara referencia al ilustre escritor francés, tratándose como de un gran homenaje.
El mundo tal y como lo conocemos ha dejado de existir. A través de una historia narrada como si de una leyenda se tratase y con unas ilustraciones muy bien logradas, se le explica al jugador por qué el mundo ya no es igual. La humanidad, envuelta en continuas guerras y disputas por todo tipo de recursos y pretensiones, ha sido condenada a su fin. El mundo ha sido inundado por completo y la primera capa de agua se ha congelado, dejando encerrado todo lo que había en el fondo del océano. El manto grueso de hielo completamente inquebrantable ha dado lugar a un mundo submarino en el que los recursos escasean y la humanidad ha quedado relegada a sobrevivir en submarinos y demás plataformas autosuficientes.
Los submarinos son la única forma de moverse por el océano. Nada más comenzar nuestra aventura se nos pedirá realizar nuestra primera elección: nuestro propio submarino del que seremos el capitán. Hay tres opciones para elegir: la primera se trata del submarino más maniobrable, con el que podremos alcanzar un mayor rango de movilidad y manejo; el segundo se trata del submarino más balanceado, con un buen rango de ataque y defensa; y por último se encuentra el submarino que más ataque tiene y más defensa tiene, se trata del mejor submarino en el uno contra uno pero dejará algo que desear en aquellas batallas donde habrá que ganar distancia o huir para ganar espacio, ya que pierde en maniobrabilidad y velocidad.
Desde el primer momento en Diluvion notaremos el agobio que tiene el estar atrapado por arriba y por abajo, ya que no solo el hielo sobre nuestras cabezas es el único problema. Como es natural, nuestro submarino de serie no estará preparado para sumergirse a más de 200 metros de profundidad, ya que si superamos ese límite moriríamos. Para subsanar esto, a lo largo del juego se nos ofrecerá la posibilidad de mejorar nuestro submarino como también poder llegar a manejar otros 9 submarinos diferentes, aunque esto queda totalmente en segundo plano a lo largo del juego.
Uno de los aspectos más llamativos del título es la mezcolanza que sus desarrolladores han querido implementar con la introducción de un novedoso sistema que mezcla los gráficos 3D con los 2D. Si bien es cierto que Diluvion no impresiona con su apartado gráfico, sí que lo hace con sus gráficos en dos dimensiones. Este sistema permite que con un solo botón podamos pasar al interior del submarino, cambiando totalmente la manera en la que se ve el juego por una estética en 2D, donde mediante un gran trabajo artístico se logra ese cambio de perspectiva que tanto llama la atención. Este sistema también esta implementado a la hora de saquear submarinos y al entrar a distintos edificios, y que nos permite poder entablar conversaciones con los distintos personajes.
Diluvion tiene un fuerte marcado tono de rol ya que desde el primer momento se nos ordenará ir armando una buena flota con nuestros marineros, cada uno asignado a una tarea en un compartimento que tenga el submarino. Los personajes principales no los podremos mover porque tendrán un sitio asignado fijo, pero en cada compartimento podremos añadir tripulantes que decidamos contratar en los bares o en cualquier submarino que encontremos hundido a cambio de unas monedas. Cada tripulante de nuestro submarino dispondrá de unos atributos que harán que éste funcione mejor asignándole en un sitio que en otro diferente. Además, nuestro submarino consumirá oxígeno, cuyo tanque podrá ser ampliado, y también comida, que se llevará una buena parte de nuestro capital y que deberemos tener muy en cuenta a la hora de iniciar una nueva expedición, puesto que cuanta más tripulación tengamos, más rápido se gastará.
Llegamos a uno de los factores clave del título: la orientación. La orientación es algo muy importante en Diluvion y hace muy buen uso de ello, aunque para según qué tipo de jugador esto puede llegar a ser incluso algo frustrante. Desde el primer momento nos hallaremos en medio del océano sin ningún tipo de sitio donde ir, solo las palabras de uno de los tripulantes diciéndonos en definitiva que tenemos que ir a ‘’X’’ sitio pero que nos busquemos la vida. La posibilidad de abrir la funcionalidad del mapa estará activa pero no veremos ningún mapa hasta que encontremos la carta de navegación de dicho lugar. Una vez la encontremos, el siguiente desafío que tendremos por delante será encontrar la dirección para llegar a ese lugar ya que el océano de Diluvion es bastante complejo y tiene muchos recovecos, sumándole además de que a media distancia se empieza a ver con muchísima dificultad.
Una vez vayamos descubriendo lugares, estos se irán pintando en nuestro mapa, pero aun así no dispondremos de ningún tipo de ayuda para poder llegar a ellos de nuevo tras dejarlos atrás. Solo y únicamente con una brújula muy bien implementada en el submarino que nos indicará según giremos y conociendo el norte en el mapa, deberemos trazar nuestras propias rutas para poder llegar a nuestros destinos. Únicamente, estando en el núcleo de algún lugar específico, se nos mostrarán una línea de peces dorados que nos mostraran el rumbo a seguir durante unos metros, pero a partir de ahí queda a nuestro cargo seguir ese rumbo si lo hemos señalizado a tiempo y poder así seguirlo, ya que marca aproximadamente la dirección a tomar para llegar al siguiente objetivo de la misión.
Diluvion tiene un buen sistema de combate, a lo largo del océano nos encontraremos con piratas y demás criaturas temibles que solo nos querrán ver morir ahogados en el fondo del mar, para ello dispondremos de un cañón que se disparará con los objetos de metal que encontremos, ya que cada nave que destruyamos podrá ser asaltada mediante un sistema de anclaje en el que engancharemos nuestro submarino con el otro, pudiendo coger todos los objetos de su interior que posteriormente podremos vender para ganar monedas.
El manejo en Diluvion se hace bastante tosco al principio porque cuesta un tiempo de adaptación. Para manejar la nave con teclado y ratón dispondremos del propio mouse como selector de dirección. La W y la S servirán para determinar la velocidad que tendrá el submarino, habiendo 3 tipos de velocidades hacia delante y otras 3 hacia detrás, además de tener un extra de velocidad que podremos usar durante un periodo de unos segundos en el que la nave irá aún más rápido, pero una vez acaben ese tiempo solo podremos ir a media velocidad durante otro par de segundos. Con Q y E manejaremos algo muy importante en el submarino: el nivel de sumersión, con uno impulsaremos el submarino hacia arriba y con el otro hacia abajo.
La exploración es un tema también importante en Diluvion, y dispondremos también de un sónar con su respectivo oficial que nos irá detallando el terreno a medida que vayamos andando así como para prevenir minas y encontrar cosas de valor, pero con un inconveniente: cada exploración que demos con el sónar se emitirá un pitido que podrá ser escuchado por los diferentes piratas cercanos si los hubiera, lo cual atraería los problemas, ya que los piratas no serán el único problema en Diluvion, estos problemas existirán de manera más grande y más amenazadora. Además, el mapa consta de varios mapas distintos, entre los cuales podremos ir intercambiando según vayamos avanzando en la historia.
Ahondando en lo jugable, la dificultad en algunas misiones del título nos harán que tengamos que buscar alguna mejora para el submarino, siendo bastante difícil de encontrar las partes necesarias para ello, pero esta es una de las mecánicas que llega a quedar en segundo plano a medida que avanzamos en el título. Las misiones que nos irán mandando al cabo de un rato se vuelven algo repetitivas y se basarán en ir y volver desde un punto a otro del mapa.
Mención especial merece el sonido que dispone el juego y su gran banda sonora. Dotada de ligeras notas aportan un tono de misterio y descubrimiento. En el mapa, cada vez que pasamos por una ciudad se tocará una nota, y la música cambiará de tono según en qué momento estemos, si en peligro, explorando o simplemente en una ciudad sumergida hablando con los lugareños.
En definitiva, Diluvion es una magnífica idea de los chicos de Arachnid Games. Es un juego muy particular que decepcionará a unos y gustará a otros. El juego es agresivo desde el primer momento respecto su sistema de orientación y no está disponible en español aunque no tiene voces, solo texto, por lo que aquellos que encuentren un problema en ese aspecto tendrán algunos problemas. En algunas partes del juego se tornará algo repetitivo con algunas misiones que tratarán solo de ir de aquí para allá, coger algo y volver al punto de partida, pero finalmente la historia va quedando algo desaprovechada y apenas se nos ofrecerá información sobre los sitios que visitemos.
Diluvion, en la versión antes de lanzamiento, no ha tenido bugs jugables y goza de una muy buena optimización, los únicos bugs encontrados han sido en lo referente a textos que a veces están en varios idiomas, pero se trata de algo que aún está por paliar y que si no está arreglado en su fecha de lanzamiento estará pronto. Por otro lado, su aspecto artístico es muy bueno, tanto en los bocetos y diseño de mundo como en su música, aunque la ejecución sobre qué hacer en él flojea en algunos aspectos. Pese a ello, Diluvion logra una gran inmersión dentro de él y aquellos amantes de la ciencia ficción, la fantasía y de Julio Verne pueden disfrutar de un título genial por su diseño y por su concepción aunque por otro lado es muy correcto y nada extraordinario en su ejecución.