Aquellos que se adentraron por vez primera en el universo de Demon's Souls se dieron de bruces con un título que reinventaba las bases de los videojuegos.FromSoftware ideó una una experiencia jugable que con el paso de los años ha evolucionado en un género propio cuya obra, que volvemos a disfrutar hoy en forma de remake, bautizó. Podríamos incluso ir más atrás en el tiempo y recordar el singular King's Field para comprender el tenebroso amor con el que FromSoftware siempre ha dotado a sus obras desde sus inicios, pero sería innecesario irse tan atrás e irrelevante para muchos jugadores que ni siquiera disfrutaron del título original.
Sin un mapa con el que orientarse, sin un camino marcado que seguir y una trama argumental bastante críptica que se descubría prestando atención a las conversaciones que podíamos mantener con diversos NPC, explorábamos el Reino de Boletaria con el corazón en un puño, conscientes de que en cualquier esquina, acecha una muerte segura en forma de un temible enemigo o una mortal trampa.
Aunque fue Dark Souls quien encumbró a la saga, al género y al los títulos de FromSoftware a la fama mundial, Demon's Souls fue la obra original que a todo dio forma, aunque su carácter exclusivo de PlayStation 3 y su elevada dificultad, le hicieron pasar bastante desapercibido en su día. Pero ahora, tras el perfeccionamiento de sus mecánicas en la saga Dark Souls, del espectacular sistema de combate más rápido y ágil visto en Bloodborne, y el giro a un combate mucho más técnico en Sekiro, regresamos a los orígenes con un remake que respeta la obra original hasta límites sorprendentes.
Boletaria, ¡Qué bien te veo!
Por suerte, con el paso de los años, cada vez somos más los jugadores que superamos el primer punto disuasorio de esta saga. Una creciente dificultad que quizás muestra su aspecto más cruel durante las primeras horas de juego, por obligarnos como siempre, a superar retos muy desafiantes hasta alcanzar el punto en el que poder desbloquear la progresión de nuestro personaje.
Y Bluepoint Games ha mantenido todo ello con un nivel de respeto que parece sagrado, por lo que no tenemos ninguna duda, de que ellos mismos han sentido el despertar de cientos de demonios de su largo letargo para regresar al Reino de Boletaria, y con la certeza de que el juego original era ya una obra de arte en forma de videojuego, el trabajo realizado por Bluepoint Games se ha basado en actualizar el título a los tiempos que corren, respetando y manteniendo tal y como funcionaban en el original hasta los detalles más insignificantes, e incluso los menos acertados.
Pero que nadie se lleve a equivoco, hay ciertos aspectos que se han mejorado más allá de lo visual, como algunos problemas con la cámara que ahora ya, no nos jugará tan malas pasadas. La cámara esta vez se coloca más cerca del personaje, y se adapta de mejor forma al entorno según avanzamos intentando escoger siempre el mejor ángulo, aunque eso no quita que de vez en cuando suframos por algún punto ciego que nos complique las cosas en el peor de los momentos.
Si en el ya lejano año 2009, Demon's Souls contaba con una ambientación oscura y perturbadora, la tecnología de PlayStation 5 ha permitido que ese aura desolador que inunda la obra a cada paso que damos alcance un nuevo nivel. Desde el personaje principal, que podremos editar con un sinfín de posibilidades, hasta los impresionantes escenarios por los que vagamos en esta especie de purgatorio mientras avanzamos temerosos de perder las almas recolectadas. Todo en este remake de Demon's Souls luce "incómodamente" bien, consiguiendo una ambientación opresiva con la que se sufre y disfruta a partes iguales, con esa dualidad tan característica de la serie. Sobre todo mientras paseamos por la prisión de la esperanza al son del estertor de nuestros enemigos. Será muy habitual sentir la tensión en nuestro paladar al cruzar cualquier esquina, o un gran alivio al derrotar ese jefe que tantos problemas nos ocasionaba, apresurándonos tras nuestra victoria raudos y veloces a tocar la archipiedra que nos traslade a la tranquilidad que se respira en el Nexo.
Gracias a los Monumentales por los 60fps
Bluepoint Games ofrece además la posibilidad de disfrutar de tan bella obra de dos formas diferentes. El modo rendimiento ofrece una resolución nativa de 1440p (2k) y 60 imágenes por segundo. Una auténtica delicia visual, pero también jugable que agradeceremos sobre todo en los combates. El modo cinemático por contra, prioriza la resolución y calidad gráfica en detrimento de la tasa de imágenes por segundo. Como siempre, una cuestión de gustos que cada jugador podrá escoger a su antojo. Aunque si se nos permite, nos vemos casi en la obligación de recomendaros que optéis por el modo rendimiento, ya que los combates serán mucho más gratificantes. Sin duda, Demon's Souls es el mayor exponente gráfico actualmente de esta nueva generación que acabamos de comenzar, gracias a un nivel artístico, el diseño de sus escenarios, y los efectos de luz tan bien implementados nos van a dejar escenas asombrosas.
Puede que Bluepoint Games se haya tomado algunas libertades creativas en lo referente al diseño artístico, algo por otra parte necesario. Sin embargo, todas las decisiones tomadas han sido estudiadas hasta límites insospechados, y aquellos que pudisteis disfrutar de la obra original sentiréis un viaje de regreso a los mismos parajes que ya atravesasteis, para con un puesta al día sublime y espectacular, volver a explorar "La torreo de Latria", luchar bajo la lluvia en el "Santuario de las tormentas" o evitar las muchas trampas que esconde el "Valle de la corrupción". Experiencias que muchos tendréis grabadas desde hace más de 11 años y que muestran ahora una versión espléndidamente mejorada.
Además, olvidaros de aquellos incómodos tiempos de carga tras morir o viajar de un lugar a otro. La resurrección y el traslado desde El Nexo al resto de localizaciones con el uso de la archipiedra, será prácticamente instantáneo gracias a SSD de PlayStation 5.
Perfeccionando lo que antes ya era bueno
Por su parte, la banda sonora ha sido nueva y enteramente orquestada, con un respeto una vez más inusitado, al que ni siquiera los más puristas de la obra original, deberían de poner muchas pegas. Además, el doblaje al castellano nos trae las voces de todos los personajes a nuestro idioma, con una muy acertada elección de voces del cast completo, que adornan y mejorar aún más si cabe, un aspecto ya de por si sobresaliente.
El resto de elementos siguen intactos, iniciar el juego, escoger una clase de personaje y avanzar en el denso universo que se abre ante nosotros es una religión que se ha trasladado perfectamente. No en vano y como cabría esperar, las posibilidades siguen siendo tan profundas como siempre. Optar por un arma u otra dependiendo de la clase de nuestro personaje, escoger que aptitudes mejorar y el equipo que mejor escale para reforzar nuestros atributos, o medir las consecuencias de nuestras decisiones para orientarnos hacia la tendencia de la luz o la oscuridad. Cientos de posibilidades para dar forma al guerrero, mago o hechicero que más nos pudiera interesar con un sistema de mejora tan extenso como adictivo.
El mayor desafío de Demon's Souls no son los temibles jefes, en total habrá como unos 3 o 4 en su totalidad que pueden hacernos pasarlo verdaderamente mal, el mayor reto consiste en llegar hasta ellos, atravesando los traidores escenarios infestados por demonios que emergen desde la niebla. Un baile de golpes que cuando dominemos se transformará en un auténtico placer jugable. Sin embargo, algunos enfrentamientos si que nos pondrán en serios problemas, y por suerte, podremos acceder a la ayuda de otros jugadores, que se unirán a nosotros para ayudarnos de forma cooperativa. ¿Quién decía que el poder que no consigamos por nosotros mismos no se nos sería reconocido como propio? Pobres diablos... Eso si, toda cara tiene su cruz, y podremos también ser victima de invasiones indeseadas por otros jugadores que llegarán a nuestro mundo para intentar darnos caza y muerte en su vertiente PVP. Una alternativa a la que seguramente sacaremos mayor provecho tras terminar la obra por primera vez y queramos ahondar en los muchos secretos que seguramente dejemos de la lado la primera vez que vagamos por el Reino de Boletaria.
Conclusión
Demon's Souls Remake es uno de los mejores títulos de lanzamiento de cuantos cambios generaciones podemos recordar. Nos hubiera gustado aún así una mayor implementación de las posibilidades del DualSense, que pasan bastante desapercibidas. Una obra inmensa por posibilidades y duración, prácticamente perfecta, nacida hace ya más de 10 años que regresa totalmente renovada gracias al hardware de PlayStation 5, demostrando además, que Bluepoint Games se establece como un estudio de desarrollo lleno de talento al que no hay perder de vista, sobre todo tras este inmenso regalo que nos ha dejado.
Si el título original era ya una obra de arte como videojuego, este remake va a un paso más allá, ofreciendo la misma experiencia y sensaciones pero mejorando de forma exponencial muchos de sus apartados. Su renovado aspecto audiovisual lo convierten además, en el mejor exponente de la nueva generación que acabamos de estrenar. Demon's Souls Remake cuenta con motivos de peso como para considerarlo aún mejor juego, que aquel que debutó en el ya lejano 2009.
Gráficos
Jugabilidad
Duración
Ambientación
Duración: 30-50 horas
Jugadores: 1 jugador con funciones cooperativas para hasta 4 jugadores
Alumno y prefecto de la casa Hufflepuff del colegio Hogwarts de magia y hechicería. Simpatizante de la casa Stark y tributo del distrito 4. Mi elemento es el agua, y por ello, formo parte de erudición.
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