El trabajo de adaptar un videojuego a la gran pantalla sigue siendo uno de los mayores retos que existen el audiovisual. Al final, son dos lenguajes totalmente distintos, por lo que es muy difícil conseguir despertar las mismas sensaciones cuando se presenta la historia a modo de película, que cuando se disfruta desde un punto de vista gamer. Una de esas grandes franquicias que tenían una deuda pendiente con los fans era "Mortal Kombat", que ya intentó en los 90 migrar a la gran pantalla, aunque con un resultado muy irregular, más que nada porque no sabe bien qué es lo que quiere contar.
En este caso, Simon McQuoid se atreve en su primera película a intentar superar este tremendo reto, el de trasladar a la gran pantalla el universo de "Mortal Kombat" en una producción muy grande que tiene nombres detrás tan importantes como los de Todd Garner o James Wan, uno de los mejores directores de terror de la actualidad. Ya hemos podido ver "Mortal Kombat", y a continuación te contamos que nos ha parecido este nuevo intento por revivir en el cine la magia del trabajo de Ed Boon y John Tobias.
Un nuevo protagonista
Cuando se empezaron a compartir los primeros avances de "Mortal Kombat", muchos fans se preguntaban quién era Cole Young. Este personaje sirve para poder explicar los orígenes de los poderes de los personajes en la película. Este creo que es uno de los aspectos más acertados de la película. Tanto si eres fan como si no, McQuoid se esfuerza para que el espectador entre en la película, con una historia simplificada, pero que para mí gusto consigue captar toda la esencia de "Mortal Kombat". Después de un espectacular prólogo que da el pistoletazo de salida a la película con el origen de la rivalidad entre Bi-Han (Joe Taslim) y Hanzo Hashasi (Saroyuki Kanada), que a la postre se convertirán en Sub-Zero y Scorpion.
Cole pertenece a un legado de luchadores de artes marciales que deriva del linaje de Hashasi, por lo que tiene una marca de dragón que significa que es uno de los elegidos para luchar, representando al reino de la Tierra, en un legendario torneo llamado Mortal Kombat. no obstante, el Reino del Mundo Exterior, comandado por el emperador Shang Tsung (Chin Han) intentarán ganar el torneo de una manera bastante sucia, eliminando a todos los elegidos que existen en la Tierra. Junto a Cole, tendremos algunos de los personajes más míticos de la mitología de Mortal Kombat, Sonya Blade, Jax, Kung Lao, Liu Kang y Kano, todos ellos comandados por Lord Raiden, el protector del Reino de la Tierra.
La historia va dando tumbos...
Pero da igual. El guion es bastante inconsistente, y hay momentos en el que no sabe bien que hacer, mientras que en otro se aceleran las cosas para poder aligerar sus ambiciosas pretensiones; que todo el mundo forme parte de Mortal Kombat. Pero da igual, y es que, la premisa es lo suficiente entretenida y vistosa para mantenerte pegado a la pantalla, seas fan o no, porque donde verdaderamente brilla la película es en sus escenas de acción. Así, "Mortal Kombat" consigue una historia bastante simple pero que se sostiene lo suficiente para que sus personajes brillen, sin tener que dejar de lado a los más fans de la saga.
Y es que hay ciertos guiños a lo largo de la película que demuestran que los involucrados en la producción son verdaderos fans de la franquicia. De hecho, pudimos hablar con Simon McQuoid y Todd Garner, y ambos se declararon enamorados absolutos del videojuego de Midway, algo que se refleja en este resultado final. Y es que tiene mucho mérito conseguir que un videojuego de luchar arcade consiga cimentar una historia, que aunque no es brillante, es lo suficientemente pegajosa para mantener la atención de todo el mundo.
¡Finish Him!
Y es que, la historia es el aliño suficiente para poder deleitarnos con peleas y coreografías alucinantes. Como recién salido del videojuego, la película no se corta ni un pelo a la hora de mostrar la violencia y el gore que se caracteriza, incluso se las ingenia, de manera un poco pobre a nivel argumental todo sea dicho, para dejarnos con buenos duelos entre personajes y diferentes escenarios, como si del videojuego se tratara.
En cuanto a los personajes, si que es cierto que quizá por no pertenecer al lore del universo Cole se me ha quedado un poco corto. Pero el Sub-Zero de Joe Taslim es muy potente, con una actuación tremenda que nos deja con un psicópata que da verdadero miedo. Otro punto destacable es la labor de Josh Lawley, que da vida a Kano, que es el alivio cómico de la película y que algunos de sus chistes funcionan muy bien. Todo eso unido a personajes muy bien caracterizados como es el caso del dúo Liu Kang y Kung Lao (interpretados por Ludi Lin y Max Huang) o Raiden (Tadanobu Asano) que infunde verdadero respeto, nos deja con unas escenas muy potentes a nivel visual y que harán las delicias de los fans.
Conclusión: Una gran adaptación
Creo que en muchas ocasiones se subestima lo que cuesta adaptar un videojuego a la gran pantalla y no tendría que ser así, pues es una tarea muy complicada. "Mortal Kombat" es el ejemplo de una buena adaptación, una historia simplificada para funcionar en el lenguaje audiovisual, pero que capta a la perfección la esencia del lore, con un reparto que siente el universo y que disfruta haciéndolo realidad.
Además, sabe lo que quiere, una película palomitera hecho por y para el disfrute. Y sí, hay fatalities por doquier y constantes referencias no solo al videojuego, sino también a las propias mecánicas del mismo. Como fan, me ha entusiasmado esta vuelta de tuerca del universo, vibrante, autoconsciente de sus posibilidades, y sobre todo, gore a la par que épica, ¡Get Over Here!
Mortal Kombat es una película palomitera hecho por y para el disfrute. Hay fatalities por doquier y constantes referencias no solo al videojuego, sino también a las propias mecánicas del mismo. Como fan, me ha entusiasmado esta vuelta de tuerca del universo, vibrante, autoconsciente de sus posibilidades, y sobre todo, gore a la par que épica, ¡Get Over Here!