Regreso al futuro es una franquicia mítica y de culto que redefinió el género de la ciencia ficción y el cine familiar. El tándem que hacían Michael J. Fox y Christopher Lloyd fue todo un éxito, creación del maestro Robert Zemeckis y casi 40 años después, su trilogía sigue siendo historia del cine. Sin embargo, pocos saben que el rodaje de Regreso al futuro III pudo haber acabado en tragedia: Michael J. Fox casi muere en plenas grabaciones por culpa de un accidente que podría tener una explicación coherente.
No miento cuando digo que Regreso al futuro III es la película más floja de la trilogía. La primera entrega fue rompedora y se transformó en un icono de la cultura pop utilizando para ello viajes en el tiempo, un guion muy bien escrito y trama fabricada para gustar a espectadores de todas las edades. Regreso al futuro II mejoró gracias a una historia repleta de giros inesperados y personajes carismáticos. Pero Regreso al futuro III cerró la historia con un cambio de ambientación, desviándose bastante del sendero marcado hasta la fecha.
Es en Regreso al futuro III que su protagonista, Michael J. Fox, casi pierde la vida. Para ello, tengo que hablar de la escena en la que Marty McFly se topa con Buford Tannen en el Salvaje Oeste. Marty es capturado por Tannen y su equipo y está a punto de morir ahorcado. Lo más grave es que esa secuencia del ahorcamiento pudo haber acabado en tragedia: en las tomas lejanas, un especialista sustituía a Michael J. Fox, pero en los primeros planos, era el actor quien tenía que simular estar en la horca.
Para preservar su seguridad, bajo sus pies se encontraba una caja que no se podía mover mientras se grababa. Si se balanceaba sobre la caja, simularía perfectamente que se estaba ahogando en la horca, sin peligro alguno. Sin embargo, un error de cálculo provocó que la cuerda se enrollara demasiado en el cuello y casi le ahogara:
"No logro evitar pensar que, si hubiera esperado un poco más, habría terminado con una lesión cerebral grave", aseguró en su momento Michael J. Fox. Y es que esta escena y la cuerda en cuestión le bloquearon de forma temporal la arteria carótida, perdiendo el conocimiento y sufriendo de verdad un ahorcamiento como el que querían simular en el rodaje.
Si bien en una enfermedad como el Parkinson es difícil establecer una relación causal, el propio Michael J. Fox ha hecho referencia a este accidente como posible causa de su enfermedad de Parkinson. A raíz de la secuencia fatal, su dedo meñique se movía de forma involuntaria, siendo este uno de los primeros síntomas de sufrir Parkinson.
Los médicos no se atrevieron a relacionar el accidente de Regreso al futuro III con el Parkinson que padece ahora, pero la conexión es posible porque coincide en el tiempo. Desde entonces, Michael J. Fox no ha parado de luchar para visibilizar la enfermedad de Parkinson, de la que ha hablado mucho en entrevistas y en libros como Lucky Man.
CONTENIDO RELACIONADO
De joya medieval a estrella internacional del cine y la televisión
Una transformación que marcó la carrera internacional de Penélope
Unamuno cobra vida en la piel de Karra Elejalde, en un retrato vibrante de la España dividida
Cuando la rutina se quiebra: una actriz foránea despierta deseos dormidos en la España profunda
De Almería al infinito: la sierra que Kubrick convirtió en escenario de su odisea espacial
Cinco nominadas al Goya que puedes ver ya en Filmin: emoción, talento y cine español del bueno
Entre sátira y apocalipsis: las curiosidades que hicieron de El día de la bestia una cinta de culto
Erotismo, emociones y nuevos comienzos: el salto al estrellato de Paz Vega con Medem como guía
Corrupción, traición y sombras del franquismo en un thriller que retrata una España en transición
El pasado cobra vida en dos grandes estrenos históricos que marcarán el cine español en 2025
Aunque David Corenswet está encantado con el papel, hubo un detalle del traje que no le resultó nada cómodo en sus primeras veces
Un paraíso almeriense convertido en leyenda gracias a Spielberg y su icónica escena del tanque