Los retrasos por la Covid-19 son incontables, y es que la pandemia de coronavirus ha trastocado todos los planes de la industria cinematográfica durante el último año y medio y todo lo que queda de 2021. Una de las películas más afectadas ha sido Sin tiempo para morir, lo nuevo del agente 007, película que se iba a estrenar en abril de 2020, pero que no verá la luz finalmente hasta el próximo 8 de octubre.
La pregunta que muchos se hacen es si MGM, el equipo que está detrás de la última aventura de James Bond, puede retrasar una vez más el proyecto debido a unos números en taquilla que podrían no hacer rentable su distribución. The Hollywood Reporter ha hablado con varias fuentes, y todas coinciden en que cambiar de nuevo la fecha de Sin tiempo para morir conllevaría unos costes inasumibles por el marketing realizado hasta el momento.
Los especialistas en este tema tan complejo que es la distribución de una película no se ponen de acuerdo, pero sí que coinciden en que los resultados en taquilla de las películas están algo por debajo de lo esperado. Solo Fast and Furious 9 ha salvado los muebles de las grandes superproducciones, mientras que Viuda Negra difícilmente habrá recuperado los costes solo con su estreno en cines (menos mal que se vio también en Disney Plus...).
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