Aunque el mundo del automovilismo es fascinante, reconozco ser más fan de la aviación y de cómo la ingeniería aeronáutica ha evolucionado tanto en poco más de un siglo. Si bien llevamos ya décadas viendo diseños de aviones muy similares y que ya no se diferencian tanto entre unos y otros (especialmente los comerciales), hubo una época donde, al igual que ocurre con los coches, había diseños de aviones muy diferentes.
Como digo, al igual que pasa con los coches, era fácil conocer al fabricante de un avión de un primer vistazo ya que a menudo las aeronaves eran muy características. Pero como digo, hace décadas que ya no se innova tanto en ello. Algo lógico, pues se ha dado con un diseño que es muy eficiente y aerodinámico. Pero en los años 70 y 80, esta industria volvió a sorprendernos con los que hasta el día de hoy siguen siendo los aviones (tripulados) más pequeños de la historia de la aviación.
Remarco la palabra "tripulado" ya que hay que destacar que se trata de un avión en el que alguien va montado, por lo que debe caber una persona. Por supuesto, hay aviones no tripulados aún más pequeños, que son los de radiocontrol. Pero aquí hablamos de los que deben ser pilotados por alguien in-situ.
El avión tripulado más pequeño de la historia pertenece a Stits. Y aunque sea un hito histórico, no, Stits no es una compañía. Don Stits fue un fanático de la aviación que quiso construir su propio avión en casa. Y efectivamente, el DS-1 Baby Bird es un avión que puede pilotar una persona y que funciona a la perfección, construido en el año 1984. De hecho, su ligereza y tamaño no casan con su gran potencia, haciéndolo bastante más veloz de lo que uno podría pensar. A continuación puedes leer sus dimensiones y prestaciones:
A pesar de ser el avión tripulado más pequeño de la historia, no es el más famoso. Se le reconoce porque en dimensiones y peso sí que es el más pequeño. Pero hay otro que es un poquito más grande pero es mucho más popular.
Este avión es ligeramente más grande que el DS-1, pero se hizo más popular. De hecho, también es de construcción casera, diseñado por Jim Bede, y se llegó a comercializar. Sin embargo, la empresa de Bede quebró antes de producirlo en masa, pero se convirtió en todo un icono de la historia de la aviación. Se hizo tan popular que incluso apareció en películas como "Octopussy", de James Bond.
El avión fue construido en el año 1971, y se llegaron a hacer un total de 150 unidades. Actualmente, hay alrededor de 30 todavía en vuelo. La primera versión era de turbohélice, pero Bede diseño rápidamente una versión a reacción que lo hizo extremadamente popular y muy, muy rápido, superando los 300 kilómetros por hora.
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