Fue en el año 1973 cuando Israel participó por primera vez en Eurovisión 2024. Desde entonces, siempre se ha puesto en tela de juicio que el país mediterráneo forme parte de este festival de la canción cuando no se trata de un país europeo. Y en 2024, la polémica está más presente que nunca después de que Israel se convirtiera en un estado que ha asesinado ya a más de 35.000 personas en Gaza, a punto de iniciar una incursión terrestre en Rafah.
Ya en el primer ensayo ante público de la representante israelí en Eurovisión 2024, la joven Eden Golan ha sido víctima de abucheos en el Malmö Arena. Seamos sinceros: la EBU no debería de haber permitido la participación de Israel después de estar cometiendo un genocidio en la Franja de Gaza. Y ahora es Eden Golan la persona que recibe todo el odio de unos eurofans que no comprenden la decisión de los organizadores.
Sin embargo, a Israel le viene muy bien participar en Eurovisión 2024 de la misma forma que participará en otras competiciones. Visibilidad y normalidad mientras cada día su ejército asesina a decenas de personas en un territorio tan frágil como Gaza, con la excusa de desarmar y destruir a Hamás. ¿Cuáles son las razones por las que Israel ha aceptado participar en Eurovisión 2024, los motivos por los que lleva formando parte del certamen más de 50 años?
Sabemos que Eurovisión es el festival encargado de seleccionar la mejor canción de todas las presentadas por los países europeos que participan en el certamen. Ahora bien, para formar parte de la cita, tienes que ser miembro activo de la Unión Europea de Radiodifusión (UER), un organismo internacional que engloba a las principales cadenas de televisión y emisoras de radio públicas europeas. Sin embargo, la razón que permite tanto a Israel como a Australia cantar en el festival se encuentra en las normas: la UER no está financiada por la UE y se trata de una organización con tres tipos de miembros. Estos son: miembros activos (aportan una tasa anual), miembros asociados (la ABC de Australia) y miembros participantes.
La UER está presente en 56 países de Europa, la cuenca del Mediterráneo y Asia occidental, y uno de estos territorios es Israel, gracias a la asociación con Corporación de Radiodifusión de Israel. Este es el principal motivo por el que Israel forma parte de Eurovisión 2024 como lo lleva haciendo más de 50 años. Pero más allá de la explicación teórica, existe un importante componente político.
Israel es un territorio que se encuentra en territorio árabe, rodeado por Palestina, Jordania, Líbano, Egipto o Siria. Muy cerca se encuentran Irak, Turquía, Arabia Saudí... Sin embargo, Israel recibe la ayuda estimable de muchos países occidentales, tales como Estados Unidos, Francia o Reino Unido. De ahí que siempre le haya interesado formar parte de la Unión Europea de Radiodifusión (UER) y participar en Eurovisión, en muchos casos a través de polémicas actuaciones con mensajes referentes a su situación política.
No hace falta analizar al completo la situación geopolítica de Israel para darse cuenta de que el conflicto con Palestina viene de lejos. No obstante, cuando Israel debutó en 1973, en la sede de Luxemburgo se reforzó la seguridad por miedo a un ataque terrorista después de que en 1972 se produjera uno en los Juegos Olímpicos de Múnich, cuyo objetivo fueron 11 miembros del equipo olímpico israelí.
Sin viajar tan atrás en el tiempo, Neta, la última ganadora de Israel, aseguró en su discurso como ganadora que la siguiente edición se celebraría en Jerusalén. Sin embargo, al ser una ciudad cuya legitimidad se mantiene en disputa con Palestina, se celebró en Tel Aviv. Volviendo a 2009, Noa interpretó un tema llamado There must be another way, una canción con un mensaje pacifista que fue muy polémico. Y en el año 2000, el grupo Ping-Pong apareció con banderas de Israel y Siria al grito de 'Paz, Paz'.
Evidentemente, el objetivo de Israel participando en un festival con la visibilidad de Eurovisión es lanzar su mensaje al mundo, un mensaje propagandístico que en 2024 ya no cuela.
*En este artículo se ha mencionado a Eden Golen, representante de Israel en Eurovisión 2024. Sin embargo, no se hablará de su participación ni de su actuación para no dar visibilidad a un estado que sigue asesinando a miles de personas, incluyendo niños y jóvenes, en la Franja de Gaza.
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