Antes de comenzar a jugar Fire Emblem Warriors: Three Hopes, casualmente, estaba terminando Dynasty Warriors 9: Empires. Y me ha ayudado a darme cuenta de lo necesario que es la fusión de licencias en un género como el musou. Porque si los Dynasty Warriors o los Samurai Warriors, por poner tan solo dos ejemplos, sufren de monotonía y nada de riesgo, con este nuevo spin-off de Fire Emblem es todo lo contrario. Y no lo digo por decir: tras decenas de horas de juego, y sin terminarlo al 100% todavía, puedo decir que Three Hopes es una entrega recomendadísima, ya seas fan de la IP de Nintendo o de la saga deKoei Tecmo.
Alma de Fire Emblem...
Fire Emblem Warriors: Three Hopes es un Fire Emblem en toda regla, aunque abandone el sistema por turnos y la vista isométrica y apueste por ser un ARPG con corazón de musou. Y lo es por la forma de presentar su historia: encarnas a Shez, mercenario que debe desentrañar qué le ocurrió en el pasado a la vez que se enfrenta a su gran enemigo, el Azote Sombrío. Por supuesto, como en el título principal, tendrás que elegir a qué casa apoyamos, consiguiendo que haya varias rutas posibles y multipliques muchísimo las horas de juego dependiendo de lo completista que seas.
Por otro lado, aquí también encontramos un sistema de amistades y relaciones, quizás no tan extenso como el de Fire Emblem: Three Houses, pero sí lo suficiente como para sentir estar jugando a un Fire Emblem clásico en el que tus decisiones en los diálogos tienen cierta influencia a la larga. Y si unes esto a la historia estrechamente relacionada con la entrega principal de Nintendo Switch, nos queda un spin-off muy interesante, e imprescindible te guste o no el musou.
Díalogos y más diálogos, aún más escenas de vídeo y una historia alternativa de Three Houses absorbente que no quiero destripar porque sería un pecado capital. Solo decir que puede enorgullecerse de estar a la altura del videojuego anterior, y por mucho que su interior tenga forma de musou, encantará a cualquier fan de Fire Emblem.
Three Hopes es un spin-off con alma de Fire Emblem
...Corazón de musou
Son casi 3 décadas las que llevamos jugando a títulos musou, y en cierta medida, poco ha cambiado desde entonces, más allá de lo gráfico: combates multitudinarios en arenas más o menos cerradas, con una preparación previa a cada batalla y una facilidad pasmosa de superar las miles de bajas. Y en el fondo, Fire Emblem Warriors: Three Hopes sigue esta estructura al dedillo, exceptuando la parte de exploración y conversaciones con nuestros compañeros que ya hemos detallado. No, no apuesta por un mundo abierto como Dynasty Warriors 9, quizás porque fue un relativo fracaso. Pero cuando llevas diez horas de juego, te das cuenta de lo importante que es mantener la esencia.
Soy un amante de los musou, y aún así, es muy difícil convencer a los jugadores que todavía no han probado ninguno que se embarquen en cualquier entrega, ya sea principal o spin-off. Quizás por culpa de su repetitividad (inherente al género) o por su escaso impacto en Occidente. En cualquier caso, Fire Emblem Warriors: Three Hopes está muy por encima de la media con un sistema de combate muy pulido (los combos, las clases herederas de Fire Emblem, las habilidades...) y con posibilidad de controlar 4 personajes jugables a la vez.
Fire Emblem Warriors: Three Hopes es por dentro un musou en toda regla
Será importantísimo saber cuándo utilizar ataques fuertes, débiles o habilidades definitivas para poder dar la vuelta al curso de la batalla: también mejorar nuestras estadísticas, algo que procede de Fire Emblem, y que le dota de un aspecto estratégico maravilloso a este musou. Y aunque ya te las he presentado, las múltiples clases te garantizan tener héroes, cada uno con su propio cometido. No es lo mismo un monje capaz de sanarte, que un soldado enfrascado en luchar y luchar. Crea un grupo (cuando puedas, por supuesto) equilibrado, y sal al campo de batalla.
El único pero, además de un apartado gráfico discreto, sería un sistema de misiones bastante clásico que innova más bien poco, con objetivos repetitivos a la larga y que terminan eternizando las batallas. Una característica que muchos musou de Koei Tecmo poseen, y que aquí no se ha sabido ocultar con inteligencia. En parte, porque el resto de elementos de Fire Emblem Warriors: Three Hopes casi alcanzan el sobresaliente.
Fire Emblem Warriors: Three Hopes, un spin-off sorprendente
En resumen, Fire Emblem Warriors: Three Hopes ha mejorado a su antecesor con una historia mucho más centrada (en parte, por sus personajes ya conocidos) y un sistema de combate pulido que se siente como un auténtico ARPG en las manos. Sigue siendo un musou, y como tal, quizás los mapas cerrados han podido convertirse en un rasgo un tanto conservador. Pero más allá de este problema de base, es también un Fire Emblem, y eso, en cierta parte, lo acaba compensando.
Fire Emblem Warriors: Three Hopes demuestra que el musou le sienta genial a la franquicia. Ya lo vivimos con su primera entrega, y ahora con esta secuela que mejora algunos aspectos narrativos y gráficos con efectividad
Historia
Gráficos
Jugabilidad
Sonido
La historia, que complementa muy bien a Three Houses
Netflix, HBO Max, Prime Video, Disney Plus y Filmin, mis plataformas de streaming favoritas. Harry Potter, Marvel, DC, James Bond y Fast & Furious, mis películas comerciales preferidas. La vida es bella, mi película favorita. Así soy yo, y así seguiré.
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