Cuando Lego City Undercover apareció en Wii U como una exclusiva para la consola de la gran N, nadie se esperaba el resultado que finalmente logró obtener. El recuento de una gran aceptación por parte de prensa especializada y jugadores, llevó al videojuego a ser catalogado como uno de los mejores juegos de Lego, y no es para menos.
Dicha apuesta de llevar un juego de mundo abierto al universo Lego, parecía de por sí un riesgo, pero que, sin lugar a dudas, merecía la pena correr. Todo su planteamiento resultó ser atractivo y, finalmente, ha acabado llegando a otras plataformas; PS4, PC, Xbox One y Nintendo Switch nos vuelven a poner el mono de trabajo para dar caza al delincuente Rex Fury a través de Chase McCain.
La apuesta a nivel guion que plantea Lego City Undercover no es una historia rebuscada y, más bien, nos pone simplemente en unas situaciones variadas, con el sello de calidad humorístico que define a la saga Lego. Nos ponemos en la piel de Chase McCain, un policía que vuelve a Lego City tras un exilio, y que lleva consigo una misión clara: encerrar a un malvado criminal llamado Rex Fury.
Bajo un guion que no pretende ser innovador ni romper moldes, viviremos una aventura en la que acción, diversión y clichés que, aunque ya pecan de ser repetitivos, no dejan de ser símbolo de alguna que otra carcajada. Las referencias a otros títulos siempre están vigentes en los juegos de Lego, y, aprovechando la oportunidad de estar en un ambiente policiaco, el juego se permite introducir guiños a Sherlock Holmes, Harry el Sucio o Cadena Perpetua en el momento de ir a una cárcel sita en una isla.
Como comentábamos anteriormente, uno de los principales atractivos que presenta el juego es la libertad que ofrece para movernos por un entorno amplio y un mapa que cumple en cuanto a extensión. Si es cierto que se echa en falta más vida dentro del mapa, más situaciones que acreciente la diversidad en un mapa que, aunque muy detallado, se encuentra vacío de un pilar esencial dentro de los juegos de este tipo. Si bien tenemos varias cosas que descubrir una vez completadas sus doce misiones principales—muy entretenidas cada una de ellas—es un juego que posee limitaciones para los que estamos acostumbrados a las diversas opciones que ofrecen mundos como los de Grand Theft Auto, Red Dead Redemption o cualquier juego del estilo. Aun así, cuando moverse por los entornos se torna como una tarea obligada, el juego muestra la exquisita manera de implementar pequeños detalles en su propuesta; coches que se desmontan si nos chocamos con ellos, figuras que interactúan entre ellas, un mapa construido con mimo, y una sensación de estar viendo un mundo de Lego en todo su esplendor a pesar de los peros.
Si bien alguien piensa que Lego City Undercover puede ser un título infantil, se ha de comentar que esas sospechas poseen parte de razón. Bien es cierto que es un videojuego de lo más disfrutable para todas las edades y que, pequeños guiños a ciertas películas o algún que otro tramo del juego están destinados para un público más crecido, pero la dificultad no supone ningún reto y se antoja como un juego fácil, sencillo de completar, pero aun con todo muy disfrutable por su apuesta y por su puesta en escena. En esta nueva versión, incluso se plantea la posibilidad de jugar en modo cooperativo para ser más disfrutable, o al menos eso es lo que a priori parece. Cuando nos ponemos manos a la obra con su modo cooperativo, ya pensamos de por sí que un juego de mundo abierto en cooperativo suena bastante extraño y, por desgracia, no nos confundimos al hacerlo. El título en este aspecto resulta un añadido falto de consistencia y que no tiene ningún sentido más allá de tener un acompañante sin ningún fin. Uno echa en falta un modo cooperativo mejor implementado; tal vez añadir misiones exclusivas para este modo hubiera sido un elemento interesante de comprobar, pero más allá de eso se queda en una técnica que no termina de convencer.
En los demás aspectos, el videojuego sigue luciendo tan bien como siempre, dejando en el jugador un ansia de intentar hacerse con todos los coleccionables posibles y, como intuiréis, no son pocos. Vehículos, disfraces, superconstrucciones y demás desbloqueables hacen que el jugador pueda invertir una gran cantidad de tiempo hasta hacerse con todo el arsenal que se ofrece, pues este es inmenso. Esto sumado a la posibilidad de repetir las misiones principales, hacen que el videojuego tenga una buena vida en cuanto a jugabilidad que podía haberse visto aumentada de forma sencilla, añadiendo pequeñas misiones que fueran más secundarias.
No se puede negar que repite clichés ya aparecidos en otros juegos de la franquicia Lego; coleccionar piezas ya empieza a ser algo que resulta repetitivo, y se echaría en falta una nueva apuesta por la interfaz y la jugabilidad. Si bien es cierto que en este título se nos ofrecen algunos patrones nuevos en la misma, son de obligada ejecución por la variación de género, algo que, de salirse de un mundo abierto, se hubiera quedado en la misma cantinela de siempre. El lavado de cara podría ser favorable para una franquicia que tiene mucho que ofrecer y lo puede hacer de manera altamente distinta.
En su ambientación, por otra parte, Lego City Undercover mezcla perfectamente, y de forma bastante curiosa, el estilo de varias ciudades americanas mezclado con todo el encanto del mundo rural. La combinación de mezclar granjas en las montañas con una ciudad que va a trote caballo entre San Francisco, Nueva York y Chicago, resulta cuanto menos interesante y es bastante atractivo de visitar al 100%.
Lego City Undercover en Nintendo Switch presenta pocas diferencias respecto a lo visto en el resto de versiones que acaban de ser lanzadas, pero sí adolece de ciertos problemas de rendimiento que pueden afectar a la jugabilidad en algunos ámbitos como las zonas exteriores de la ciudad, donde la tasa de frames baja de los 30 hasta los 20-25, provocando ralentizaciones abruptas sobre todo cuando se está conduciendo. En cambio, en los niveles cerrados típicos de la saga, el juego funciona como un roble, y los efectos gráficos en la consola de Nintendo son muy parecidos a los vistos en PlayStation 4. La portabilidad es un aspecto a tener en cuenta para aquellos que antepongan la comodidad de jugar en cualquier lugar.
Esta versión de Lego City Undercover no es una panacea que solucione pequeños problemas que ya estaban presentes en WiiU, y, es más, añade un modo multijugador que no termina de ser nada práctico, pero aun con todo es un juego muy disfrutable. Su mundo abierto no tiene toda la extensión jugable que debería más allá de los coleccionables y misiones principales, pero se disfruta por su humor, su puesta en escena y por unas misiones principales que cumplen con creces en su cometido. Puede que no sea el título soñado, pero es un título que nos invita a soñar con una segunda parte que tenga una mejor concepción como título y sepa ofrecernos horas y horas de diversión; sin lugar a dudas se puede conseguir.