Liam Robertson es una de las personas más relevantes de la industria actualmente que actualmente trabaja en Unseen64. En esta ocasión ha revelado nueva información sobre un nuevo juego que no llegó a ver la luz en su planeada plataforma: Game Boy Color.
Banjo-Kazooie: Grunty’s Curse finalmente no salió al mercado pero, tal y como afirma Liam Robertson, el trabajo y el fruto del esfuerzo cosechado en el anterior proyecto no fue en vano y el título adquirió un nuevo nombre: Banjo-Kazooie: Grunty’s Revenge, para la consola Game Boy Advance en el año 2003.
El primer prototipo del videojuego contenía una historia inédita y totalmente distinta a la vista en su versión posterior y renovada y niveles nunca vistos. En el vídeo a continuación se aprecian más detalles de estos datos mencionados.
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