El director de Starfield y TES VI cree que los mundos abiertos deben ser más reactivos, no más grandes

Las últimas generaciones de consolas han estado enmarcadas en el crecimiento de los mundos abiertos. Sagas como The Witcher, The Elder Scrolls, Grand Theft Auto, Just Cause, Assassin's Creed, entre múltiples otras, han apostado cada vez más por mundos de mayor dimensión y de mayor densidad, ofreciendo aventuras cuyas propuestas rebasan con suma facilidad el umbral de los cientos de horas. Sin embargo, más no siempre quiere decir más y, en los años recientes, ha habido un creciente cambio de apreciación por parte de la comunidad, quienes no siempre se muestran afines a la idea de seguir aumentando las dimensiones de los universos. Y Todd Howard, director de Starfield y TES VI, está de acuerdo con esa visión.

En tal sentido, mediante una entrevista concedida a The Guardian, el referente de Bethesda ha compartido su óptica sobre el futuro del medio y, específicamente, del género en el que su compañía es especialista. Así, pues, señaló: "Me gustaría ver más reactividad [en los mundos de los videojuegos], más sistemas combinados entre sí a través de los que los jugadores se puedan expresar. Creo que perseguir escala por el simple hecho de hacerlo no es siempre el mejor objetivo".

Esa argumentación, como mencionábamos con anterioridad, está sumamente alineada con la impresión general que la industria ha mostrado respecto a la creciente inclusión, en ocasiones forzada, de variables como misiones secundarias, mapas kilométricos, cientos de NPCs y demás. Por lo tanto, la percepción de Howard podría indicarnos que Starfield y The Elder Scrolls VI no buscarán ser colosales por la simple idea de ser colosales, aunque tal inferencia solo podrá ser confirmada dentro de mucho, mucho tiempo.