Desde Areajugones hemos tenido la oportunidad de jugar Sonic Racing CrossWorlds durante 40 minutos completos en el Summer Game Fest 2025, y podemos afirmar que este nuevo título representa la redención definitiva que necesitaba la franquicia tras el trago amargo de Sonic Team Racing. El juego funciona a 60 fps en PlayStation 5 con una fluidez que se siente inmediatamente en los controles, creando una experiencia de conducción que combina la precisión de Mario Kart con la velocidad característica del universo Sonic.
Durante nuestra sesión extendida hemos podido experimentar con el sistema de transformaciones que permite cambiar entre coche, avión y lancha dependiendo del terreno, activado a través de anillos especiales distribuidos estratégicamente por las pistas. El sistema de drift ha sido completamente renovado, ofreciendo power slides que requieren timing preciso para maximizar el boost, mientras que el sistema de trucos aéreos se ejecuta simplemente moviendo el stick analógico durante los saltos, otorgando velocidad adicional de manera intuitiva pero efectiva.
Las pistas dinámicas son el verdadero protagonista de la experiencia, ya que el jugador que va en primer lugar puede elegir el portal por el que todo el grupo avanzará, creando una estrategia de liderazgo que añade profundidad táctica. Hemos recorrido escenarios como Rainbow Garden, Water Palace, Casino y el estadio inicial, todos con múltiples rutas que se bifurcan según las decisiones del líder. Los anillos funcionan como moneda para mantener velocidad base y desbloquear habilidades especiales, creando un sistema de recursos más generoso que otros juegos de carreras pero igualmente estratégico.
El apartado de control de Sonic Racing CrossWorlds es una absoluta evolución significativa respecto a las entregas anteriores, eliminando la sensación "suelta" y poco precisa que caracterizó a Team Racing. Los bumpers permiten saltar y realizar trucos, mientras que el sistema de items incluye desde kunais ninja hasta imanes que ralentizan a los oponentes cercanos. Durante nuestras partidas hemos comprobado cómo el boost se carga tanto por recoger anillos como por ejecutar drifts perfectos y trucos aéreos, creando múltiples vías para mantener la velocidad máxima.
Las transformaciones vehiculares no son solo cosméticas sino que cambian completamente la física de conducción. En modo lancha, el bumper genera boost acuático, mientras que en modo avión se puede planear y realizar maniobras aéreas más complejas. El sistema de colisiones ha sido refinado para evitar que chocar contra paredes resulte en pérdidas de tiempo excesivas, implementando un sistema de recuperación que mantiene el ritmo frenético característico de la saga.
Los escenarios muestran un nivel de detalle impresionante, con referencias directas a Sonic Colors, Sonic Adventure, Sonic Heroes y otros clásicos de la franquicia. Cada pista incluye elementos interactivos como plataformas que se hunden, corrientes de aire que impulsan el vehículo y shortcuts secretos que requieren timing perfecto para ser ejecutados. La iluminación dinámica y los efectos de partículas crean una presentación visual que rivaliza con las mejores producciones del género.
Técnicamente, Sonic Racing CrossWorlds aprovecha al máximo las capacidades de PlayStation 5 para entregar una experiencia visual que combina la estética colorida característica de Sonic con un nivel de detalle que supera ampliamente a las entregas anteriores. Los efectos de velocidad incluyen motion blur dinámico que se adapta a la velocidad del vehículo, mientras que los reflejos en tiempo real en superficies acuáticas añaden una capa de realismo técnico impresionante.
El diseño de personajes mantiene la estética clásica pero con modelados de alta definición que lucen especialmente bien durante las animaciones de victoria y las secuencias de transformación. Los efectos sonoros crean una sinfonía de velocidad donde cada aceleración, drift y colisión tiene un peso auditivo distintivo. Durante nuestra sesión pudimos comprobar cómo el audio espacial permite identificar la posición de otros corredores incluso sin verlos en pantalla.
Las pistas temáticas incluyen elementos ambientales que van más allá de lo meramente estético, incorporando mecánicas de gameplay específicas como corrientes de lava que impulsan el vehículo, portales dimensionales que teletransportan entre secciones del circuito y plataformas móviles que requieren cálculo de timing para ser utilizadas efectivamente. La variedad visual abarca desde los colores neón de los casinos hasta los azules cristalinos de los escenarios acuáticos, creando una paleta cromática que mantiene la identidad visual de Sonic mientras empuja los límites técnicos de la presentación.
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