La curiosa historia de cómo una abeja casi impidió la mítica intro de The Elder Scrolls V: Skyrim

La escena del carro con la que Bethesda nos introduce a The Elder Scrolls V: Skyrim es una maravilla. Desde el monólogo de Ralof, el súper-mega-recontra-inmersivo intento de escape de Lokir y la impactante llegada de Alduin, no existe nada de tal epílogo que no haya disfrutado absolutamente cada segundo tras las decenas de veces que lo he vivido. A día de hoy, no puedo imaginarme el título sin su legendaria fracción inicial, aunque hubo un tiempo en que casi fue así... por culpa de una abeja.

Nate Purkeypile, quien fuese artista de Bethesda durante el desarrollo de la quinta entrega de The Elder Scrolls, compartió a través de su cuenta de Twitter una curiosa anécdota sobre cómo una abeja supuso el máximo quebradero de cabeza para la desarrolladora. "Verán, el problema con el paseo en el carro es que no es solo un carro en rieles. Ese carro tiene su simulación física. Esto significa que toda clase de cosas podían causar que el carro se descontrolase y volase fuera de la ruta", anticipó.

Resumiendo la amplia retahíla de tweets compartida por Purkeypile, la situación de ahí en adelante siguió el siguiente giro de acontecimientos:

• En una de las pruebas para el trayecto del carro, este comenzó a moverse violentamente hasta "terminar en el cielo como una nave espacial". ✈️
• Al principio, nadie sabía qué estaba causando que el carro se saliese de la ruta, y lo que mantenía a todos en agonía es que no sucedía siempre: era aleatorio. ❓
• Posteriormente, descubrieron otro bug en el que una abeja en el juego no podía ser cogida, de forma que algunas pociones no podían hacerse. Corrigieron el bug, pues resultaba ser que el tipo de colisión de la abeja no permitía que fuese cogida. En realidad, causó que colisionase con las demás cosas. ☠️

Como resultado, esa abeja era una fuerza inamovible de la naturaleza cada vez que se interponía en el trayecto del carro. El carro quería bajar por la ruta. La abeja no quería moverse. Así que, ¡hacia arriba va el carro!

Nate Purkeypile, artista de Bethesda en The Elder Scrolls V: Skyrim

Por fortuna, la compañía fue capaz de solventar la situación y obsequiarnos una de las secuencias de introducción más memorables de las últimas décadas dentro de la industria del videojuego. Incluso con sus innumerables bugs y posibles mejoras, el asedio de Helgen seguirá siendo de mis momentos favoritos de The Elder Scrolls V: Skyrim, y espero que no me tome mucho tiempo más hasta poder sumar memorias con motivo de la sexta iteración de la franquicia.