Me flipa cuando Game Freak se suelta la melena y no se conforma con hacer que un Pokémon evolucione en una nueva entrega de la saga de una forma común. Pero me gusta aún más cuando uno de estos bichos trae a dicho juego una mecánica que funciona por sí misma. Y, precisamente, hoy vengo a hablaros de uno de los que hacen exactamente eso mismo en Pokémon Escarlata y Púrpura: Gimmighoul.
La cosa es que, después de haberos contados cómo evolucionan otros Pokémon como Pawmi o los adorables Lechonk y Smoliv, en este artículo voy a centrarme con ese bicho que tiene forma de cofre y con el que, seguramente, muchos habréis interactuado ya. A continuación, os cuento en qué consiste exactamente el proceso.
Estaré atento a cualquier otra evolución rara que haya en Escarlata y Púrpura para contaros cómo es el proceso y facilitaros un poco el trabajo a la hora de ser el mejor que habrá jamás.
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