Durante estas últimas semanas hemos podido ver cómo cada vez más miembros de la industria de los videojuegos alzaban su voz para denunciar casos de acoso, abuso sexual y similares. A estas alturas son 'pocos' los campos que quedan ya intactos antes estas situaciones, llegando todo ello a derivar en, por ejemplo, la cancelación de EVO Online 2020. Ahora, conocemos los escalofriantes testimonios de miembros de la comunidad de Super Smash Bros.
Destacaremos, antes de entrar en detalle, que esta información procede del trabajo de investigación realizado por los compañeros de DualShockers, quienes han dado con una gran variedad de casos distintos. Así pues, señalaremos que una de las figuras más habladas es la de Cinnpie, una comentarista de Super Smash Bros. Ultimate que, aparentemente, mantuvo relaciones sexuales con menores hace aproximadamente unos 4 o 5 años, y con varios de estos además. Según los testimonios de los implicados, Cinnpie los manipulaba para hacerles creer que cuando fueran adultos - estos tenían entre 14 y 15 años, ella 24 - tendrían una relación estable, algo que nunca llegó a ocurrir.
Otro caso de la misma índole es el expresado por 'Captain Zack', un conocido jugador de la comunidad de Super Smash Bros. que denunció haber tenido sexo con Nairoby 'Nairo' Quezada cuando solo tenía 15 años. En aquel entonces Nairo tenía 20 años, y después de que concluyeran las relaciones Nairo y su hermano comenzaron a enviar dinero regularmente a 'Captain Zack' para que este guardara silencio respecto a lo ocurrido entonces. De nuevo en cuanto a sexo con menores tenemos el caso de Keitaro, otro conocido jugador de Super Smash Bros. que mantuvo relaciones sexuales con una menor de 16 años.
El caso posiblemente de más peso en cuanto a la comunidad de Super Smash Bros. llegó de la mano del comentarista D1, quien en 2016 fue acusado por violar a una mujer de nombre Kaitlyn - en aquel entonces Kaitlyn era menor mientras que D1 tenía 30 años -. La mujer declaró que en aquella situación estaba totalmente alcoholizada, perdiendo la conciencia y recuperándola - entre vómitos - para cuando D1 se estaba aprovechando ya de ella. Pese a lo antiguo del caso no ha sido hasta hace un par de días que D1 ha emitido un comunicado sobre ello, asegurando 'que no soy ese tipo de persona' y que 'nunca debí emborracharme tanto como para no recordar estos sucesos'. No obstante, una captura de una conversación posterior muestra a este desestimando una disculpa directa a la afectada.
En definitiva, parece bastante claro que todavía hay mucho que desconocemos de todo cuanto ha estado ocurriendo en la industria de los videojuegos 'detrás de las cámaras' durante estos últimos años. Esperemos, pues, que todos aquellos que tengan una historia que contar cuenten con la valentía de dar el necesario paso adelante.
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