The Fate of the Furious es la octava entrega en la saga cinematográfica Fast & Furious, que llega en apenas unos días a los cines. Para celebrar este lanzamiento, los responsables se han aliado con Psyonix y de esta forma Rocket League recibirá un nuevo coche sacado de la película en forma de DLC.
El nuevo vehículo no será otro que el Ice Charger de Dom Toretto, que hará su aparición en Rocket League como un coche de batalla premium. Este DLC, además del coche, nos dará acceso a unas ruedas exclusivas y varias pegatinas con las que lucir nuestro amor por la nueva película de Fast & Furious.
El DLC correspondiente a The Fate of the Furious estará disponible de forma digital a partir del próximo día 4 de abril a un precio de 2 dólares. A continuación os dejamos con el tráiler que muestra cómo luce el coche de Dom Toretto en Rocket League.
CONTENIDO RELACIONADO
La gran N no ha revelado aún datos oficiales, pero todo apunta a que Switch 2 ha sido todo un éxito
Se ha compartido nuevas cifras de usuarios con la suscripción, pero no hay mucha diferencia frente al pasado año
El 12 de junio se realizará el 'Konami Press Start' donde se presentarán novedades de ambos juegos
La remasterización del Gears original calienta motores con enfrentamientos multijugador en seis mapas legendarios
Dos de los grandes spin-offs de la saga y más queridos están en una oferta casi irrepetible
El jugador tuvo que subir a Challenger de 6 formas distintas para conseguir este aspecto que solo se podía desbloquear en 2009 2009
Repasaremos un poco algunos de los comentarios de la comunidad sobre este lanzamiento inesperado
Morgana recibirá un skin de categoría exaltada mientras que Karma contará con una legendaria
El "Heraldo Mecánico" regresa a la Grieta del Invocador de la forma más nostálgica
La idea de Hideo Kojima es fusionar narrativa, IA y sonido con una propuesta musical que cambiará según tu forma de jugar
La nueva máquina tendrá compatibilidad con Steam, lo que permite jugar a todos los títulos que tengas en la tienda de Valve
La época dorada de la experimentación donde la innovación se confundía con la locura más absoluta
