En el mundo de los videojuegos, al igual que en el mundo del cine, no todo es bonito ni un camino de flores a seguir. Si seguimos el ejemplo de Mario Bros, después de matar cientos de bichos llegaba a un castillo en el que en el lugar de la princesa a la que andaba buscando, se encontraba un esbirro con un champiñón en la cabeza. Y vuelta a empezar. El mundo del cine y los videojuegos han ido siempre cogidos de la mano, y aunque en el tema de los juegos el sexo siempre ha sido motivo de tabú, y las escenas violentas hacen que se nos considere unos asesinos despiadados por parte de los medios de información generales, la verdad es que no es así, y queremos levantar el velo del tabú con este TOP 6 Jugón de escenas más polémicas del mundo de los videojuegos. ¿Empezamos?
Spec Ops The Line es un videojuego en tercera persona con sistema de coberturas muy bueno que nos mete directamente en Dubai, somos el capitán Martin Walker y a nuestras órdenes tenemos al equipo Delta Force y nuestra misión será la de rescatar al coronel John Konrad de las fuerzas armadas americanas. Hasta aquí parece un juego con un argumento simplista, pero es todo lo contrario. Spec Ops The Line es uno de los videojuegos más infravalorados de la pasada generación de consolas, y su historia y su narrativa son excelentes, ya que nos mete de lleno en la perturbada mente del capitán al que controlamos y nuestra misión tendrá que ser acabada cueste lo que cueste.
En las guerras siempre mueren civiles, gente que no tiene la culpa de los conflictos creados por los gobiernos, y es aquí donde Spec Ops The Line pone la piel de gallina, ya que por culpa de un fallo humano de nuestro capitán tiramos un mortero de fósforo blanco en una zona llena de civiles. Para quien no lo sepa, el fósforo blanco es un explosivo altamente corrosivo que no explota, sino que va quemando la carne lenta y dolorosamente hasta acabar con la vida de las personas afectadas por la onda expansiva. Una vez vamos a inspeccionar la zona, vemos la imagen que desató la polémica en este juego entre los que lo jugaron, y os la dejo aquí abajo:
Como podéis ver, por culpa de nuestro protagonista, murieron cientos de civiles, pero la imagen de una madre arropando a su hija mientras intentaba protegerla de la segura muerte que le aguardaba por culpa del fósforo blanco es una de las que a mi personalmente más me impactó. En el vídeo de abajo os dejo el momento en el que Martin Walker dispara el mortero y la posterior consecuencia:
https://youtu.be/O_yl9M1ME4Y?t=713
Es difícil encontrar a alguien que no conozca la saga Final Fantasy, y más aún alguien que no haya oído hablar de su séptima entrega, que muchos consideran ya uno de los mejores juegos que existen. Empezando con la historia de un soldado que parecía no albergar sentimientos hacia nada que no fuese el dinero, pasando por el grupo de defensa del planeta Avalancha y tantos otros personajes que encontrábamos en nuestro camino. La historia se desarrolla de un modo magistral, con giros que pocos podían esperar. Pero no vamos a hablar de la polémica relacionada con, por ejemplo, Avalancha y sus actos considerados terroristas, o los experimentos que Shinra tenía entre manos, no. La escena más polémica viene de la mano de una florista de los suburbios tras la que se esconde mucho más de lo que aparentaba la primera vez que nos encontramos con ellos.
Esta escena es ya mítica, tanto entre los fans de la saga Final Fantasy, como entre esa gente que nos tiene que aguantar a los que lo somos. El final del primer CD del juego nos traía una escena que hizo correr ríos de tinta y lágrimas entremezclados cuando vimos sin poder ponerle remedio de ningún modo la muerte de uno de los miembros de nuestro equipo, esa florista de los suburbios llamada Aeris. Esta muerte cobra sentido a medida que se desarrollan los acontecimientos del juego sí, pero en el momento que ocurre no podemos hacer otra cosa que sentirnos impotentes.
De hecho, esto no es lo único que provoca polémica, sino también el hecho de que, como hemos mencionado, perdemos a un miembro del equipo, un miembro en el que la primera vez que jugamos al juego invertimos tiempo y esfuerzo para hacerle subir de nivel, conseguirle el mejor equipo posible y desbloquear sus límites. ¿Y todo para qué? Para perderla y que no vuelva a unirse a nosotros en todo lo que queda de juego. Hoy día y con la llegada del juego a Steam una de las pocas razones que nos quedan para hacer este esfuerzo es conseguir todos los logros del juego, ya que uno implica conseguir el último límite de Aeris. Solo falta ver si las bromas que corrieron por internet sobre si podremos revivir a Aeris con un DLC en la remasterización del juego acaban siendo ciertas. Aquí tenéis el vídeo de la escena en cuestión, preparad los pañuelos una vez más:
Tras el éxito cosechado por la cuarta entrega de Call of Duty: Modern Warfare en 2007, Activision había encontrado la fórmula perfecta para atraer a sus fans: un multijugador revolucionario y un modo campaña que, aunque no muy extenso, suele estar muy trabajado. Es en este segundo aspecto donde a Infinity Ward y a Activision se les fue un poco de las manos con Call of Duty: Modern Warfare 2.
Todo transcurre en la cuarta misión del juego llamada “Nada de ruso”, en donde encarnamos a Joseph Allen, un agente encubierto de la CIA que se hace pasar por un terrorista ruso que obedece las órdenes de su líder, Vladimir Makarov.
La misión comienza en el aeropuerto de Moscú. Salimos con nuestro grupo de un ascensor armados hasta los dientes con ametralladoras ligeras, todo el mundo nos mira… Y comienza la masacre. Debemos matar a todos los civiles, personal del aeropuerto y de seguridad que nos encontremos a nuestro paso, ocasionando el más absoluto caos: gente huyendo despavorida, llorando, arrastrándose por el suelo suplicándonos clemencia…una situación verdaderamente dantesca que a juicio de una gran corriente de seguidores de la saga, se podría haber evitado.
Si bien es verdad que el título te daba la opción de suprimir la misión por su alto contenido violento, el hecho de ir pisando los cadáveres entre charcos de sangre no es plato de buen gusto ni siquiera para los que decidimos no censurar dichas escenas. Como podéis imaginar esta misión dio la vuelta al mundo y generó una gran polémica, llegando a prohibirse la venta del juego en países como Rusia.
Aquí podéis ver, a partir del minuto 1:20 uno de los momentos más impactantes en el mundo de los videojuegos y que quedarán grabados en nuestras retinas para siempre.
El sexo siempre es motivo de discordia en los videojuegos, sea cual fuere el género del que hablemos, y en el reboot de Tomb Raider nos encontramos de golpe con una escena que salpicó de llenó los estandartes de la pureza y la moralidad de los videojuegos. Pocas veces antes hemos llegado a ver una violación en un videojuego, pero jamás habíamos sido la víctima. En esa escena encarnábamos a una joven Lara Croft a punto de ser violada en un campamento. Debíamos seguir una serie de Quick Time Events para lograr zafarnos de nuestro agresor y proseguir con nuestra huída.
La escena fue objeto de críticas por parte de los sectores más conservadores de la política y la prensa, además de una gran cantidad de usuarios que consideraron que era una escena demasiado gratuita para un videojuego, por mucho que en la carátula llevase impreso un PEGI 18 tan grande como una catedral. A continuación te mostramos la escena para que puedas juzgar por ti mismo si fue o no para tanto.
Remontamos la vista muy atrás, hasta 1986. En el marco político real Gadafi, dirigente de Libia, era uno de los seres humanos más odiados por los norteamericanos (tiempo quedaría hasta que llegasen Saddam Hussein o Bin Laden) y tras los atentados terroristas de la Discoteca “La Belle” en Berlín se realizó un ataque aéreo a Libia en abril de ese año. Para hacer más cómica la contienda e incluso aumentar el odio por las milicias de Libia, un inspirado Rober Pfitzner creó un videojuego para Commodore 64 llamado Blizzard! Part I: Commando Libya. Lo de Part I se desconoce a que vino ya que nunca llegó a salir ninguna segunda parte, bien por las escasas ventas, por las polémicas escenas, o por denominarse a sí mismo como “el juego de sadismo del año”.
El desarrollo del juego era muy sencillo. Tomábamos el control de una ametralladora y había que acabar con un ejército de pequeños soldados enemigos que aparecían por ambos lados de la pantalla, a la par que aparecían bombas circulares que teníamos también que destruir. Nada del otro mundo. No obstante, al completar un nivel aparecían los momentos más polémicos del juego: la ejecución de diversos prisioneros en una especie de muro junto con algunas frases bien polémicas al describir a estos pixelados personajes “como los hijos de Gadafi”.
No era la única escena polémica del juego ya que si alcanzamos una puntuación suficiente de estar en la tabla de máxima puntuación, inscribíamos nuestras iniciales en las camisetas de tres personas que después eran degolladas en una guillotina. Sin duda unos niveles de sadismo que en esa época estaban permitidos por el escaso público al que llegaban los videojuegos pero que hoy en día estarían prohibidos en cualquier sistema o medio. Sin duda uno de los primeros videojuegos en el que la polémica era su principal –o único- baluarte de venta.
No podíamos acabar este Top 6 sin nombrar a uno de los juegos más polémicos de la historia. Viajamos hasta 2001 y Nintendo 64 estaba a punto de "descansar en paz" con uno de los últimos juegos que se sacaron para la consola y que pertenecía a las brillantes mentes de su second party más aclamada, Rare, antaño llamada Rareware.
Decidieron comercializar un juego de su aparentemente simpática ardilla, Conker, ya conocida en Diddy Kong Racing; un título que habían desarrollado con el propósito de que familiarizáramos con sus personajes ya que tendrían su propio videojuego. Pues bien, Conker tuvo el suyo y, a pesar de la dulce apariencia que se esforzaron en mostrarnos (intencionada o no, nunca lo sabremos) en Diddy Kong Racing con una voz muy afeminada, nuestra adorable ardilla se convirtió en un animal borracho, maleducado y desagradable. En un principio fue chocante, no sólo por la equivocada imagen que nos quisieron vender, sino también porque Conker's Bad Fur Day era un juego impensable en un inicio de salir en una consola como Nintendo 64 por dicha desarrolladora que se caracterizaba por crear los juegos más coloridos, para todos los públicos y humorísticos que habían salido para la consola. El título no abandonaba el estilo infantil muy propio de Rareware pero perdió toda la dulzura que sus antecedentes, convirtiéndose en un título +18 y en todo un acierto para los amantes de la desarrolladora, ya que nos demostraron que pueden crear un juego novedoso sin perder su esencia característica.
Se podría hacer un propio Top 6 con las escenas más polémicas y políticamente incorrectas de este juego, por
lo que me ha sido muy complicado elegir una pero espero haber cerrado de manera muy digna este Top y haber dejado "el pabellón bien alto". Sin desmerecer a la famosa escena del principio de Conker serrando la N de Nintendo que presentaba los juegos y mostrando orgulloso el logo de Rareware (¿Habría ya problemas entre las dos empresas?) o la canción de The Great Mighty Poo y su letra obscena para lo que estábamos acostumbrados, os presento a la Girasol de Grandes Pechos.
En esta escena, Conker debía ayudar a una vieja abeja cuya mujer la había abandonado por tener fantasías... Ejem... "Eróticas" con el Girasol de Grandes Pechos. No es que me de vergüenza decir a estas alturas palabras subidas de tono pero al ser una abeja, su único deseo era polinizar al girasol así que supongo que era lo más "erótico" que podía hacer una abeja. Para ello, Conker convencía a todas las abejas y por consiguiente, a la abeja Rey para que pudiera polinizar al atractivo girasol y en la cinemática se escucha a ambos teniendo relaciones sexuales y enfocando a la cara de Conker un tanto traumatizada. Como imagináis, esto trajo mucha polémica al estar publicado en una consola que estaba acostumbrada a ambientes infantiles y perfecta para niños, un público poco apto para este tipo de videojuegos y que cuya estética engañaría a más de un padre inocente que compraría el juego a pesar de ser una compra impensable para su hijo.
La escena no tiene desperdicio y con este sexy girasol, cerramos el Top 6 de las escenas más polémicas de videojuegos.
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