El éxito siempre suele ser un arma de doble filo, algo que más que nunca están experimentando desde Bluehole. Dadas las recientes contradicciones que se han realizado en relación al rendimiento de PUBG en Xbox One X, la compañía ha recibido una importante cantidad de críticas, y Brendan Greene, uno de sus máximos representantes, ha salido en su defensa tratando una importante variedad de tópicos mediante una entrevista con gamesTM (vía Gamepur).
Para comenzar, destacar que el señor Greene se ha mostrado muy ofendido por las últimas reacciones de muchos jugadores. Señala que después de haber intentado ofrecer el máximo de sus capacidades durante el último medio año, a causa de estos últimos problemas, están comenzando a surgir las quejas en forma de que a ellos solo les importa el dinero que ingresan, algo que bajo ningún concepto pretende aceptar.
Brendan Greene destaca que desarrollar videojuegos es un trabajo tremendamente duro, más todavía para una compañía tan pequeña como eran ellos en su momento. Explica que aunque todo el mundo puede empezar el proyecto con una ilusión inicial desorbitante, ciertos problemas pueden suponer golpes difíciles de superar, en especial cuando surgen las dificultades económicas. Indica que todo ello acaba siendo un proceso que puede provocar una increíble presión en los miembros del equipo, motivo por el que más que nunca defiende su trabajo.
Una vez ya expuestas sus opiniones acerca de los conflictos más actuales, se muestra tremendamente firme en la postura de querer llevar PUBG al terreno de los eSports. Si bien anteriormente habíamos recibido ciertos indicativos que situaban al título en esa misma línea, nunca antes se nos ofreció una idea tan detallada de lo que tenían en mente a la hora de intentar llevar su obra al escenario competitivo.
El señor Greene expone que su deseo es el de ver a la comunidad de PUBG desarrollarse sin parar, hasta el punto en el que se organicen impresionantes eventos en torno a lo que será su primer gran torneo. Acorde con sus palabras, hasta que PUBG no logre alcanzar ese mismo nivel mediático que otros títulos ya presentan, no podrá pensar en el juego como un éxito rotundo, razón por la cual seguirá trabajando humildemente hasta ver su objetivo cumplido.
Parece claro, pues, que aunque la llegada al ámbito competitivo de PUBG era algo que se podía esperar, las intenciones no son las de entrar poco a poco en el mismo, sino de realizar un gran salto con el que llegar con fuerza y reclamar su parcela en el mundo. PUBG se encuentra a día de hoy solo disponible en PC, pero con su llegada a Xbox One cada vez más cerca, no deberíamos descartar que el añadido extra de adeptos facilitara el cumplir los sueños de Brendan Greene.
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