Valorant buscará nuevas maneras de luchar contra la toxicidad

Si paramos nuestros pies por un momento dentro de la acelerada circulación de información constante que se da en la industria del videojuego y afinamos un poco el oído, observamos que existe una palabra que ha ido intensificando su eco en las últimas semanas: Valorant. El nuevo shooter de Riot Games ha demostrado que la compañía también tiene mucho que decir más allá de los MOBA con una propuesta que cada vez es más grande.

Ya no solo hablamos de que la multinacional buscaría expandir la experiencia que ofrece el videojuego con nuevos contenidos, sino con ajustes que permitan que cada vez sean más los usuarios que puedan acceder al juego. Y, precisamente, uno de los focos en los que se centrará el trabajo que hará Riot Games con Valorant en los próximos meses tendrá que ver con esto último; concretamente con la búsqueda de nuevas maneras de luchar contra los comportamientos tóxicos entre los jugadores.

Así lo comentaba Anna Donlon, productora del juego, a través del blog oficial de Riot Games con una serie de apuntes realmente interesantes que dan a entender que la toxicidad de un juego no arruina únicamente la experiencia personal que tengamos con él, sino que perturbaría también el diseño mecánico de Valorant. Así es como empezaba el mensaje de la ejecutiva:

''El acoso y el bullying dentro de los videojuegos no es un status quo con el que me sienta cómoda. Hemos aprendido a silenciar a otros jugadores que nos estén acosando en una partida. Hemos aprendido a silenciarnos a nosotros mismos para mantener la paz. Y, como resultado, nos encontramos con una experiencia competitiva comprometida. Con frecuencia nos encontraremos en desventaja''.

El comunicado de Donlon servía para hacer visible la idea de que Valorant es un juego donde la comunicación con los compañeros será crucial y que, aunque la ejecutiva cree que el juego cuenta con sistemas que pueden conformarse como una alternativa a hablar directamente con otros, bien es cierto que considera que necesitan trabajar en otras opciones; algo que, según las palabras de la desarrolladora, es uno de los objetivos a largo plazo para Riot Games.

Por último y teniendo en cuenta el hecho de que cuánto más claro el mensaje, mejor quedará en la memoria de la comunidad, Anna Dolton dedicaba las siguientes palabras a rematar su comunicado con un mensaje tan cierto como necesario: ''Es normal que en un juego competitivo las cosas puedan ponerse tensas. No vamos a bannear a nadie por el hecho de que pierda momentáneamente los estribos al ganar o perder una partida. Pero tengo bien presente que algunas experiencias pueden ir más allá del entusiasmo para convertirse en acoso. Y es justo eso lo que no podemos permitir''.