Todos podemos estar de acuerdo, en mayor o menor medida, que el final de El juego del Calamar es el aspecto más polémico de toda la serie: esa escena en la que Gi-hun decide no volar para ver a su hija y volver a la competición, es cuanto menos discutible. Y LeBron James es partidario de esta tesis tal y como él mismo contó: "no me gustó el final. Súbete al avión y ve a ver a tu hija, ¿qué narices estás haciendo?".
Imaginaros lo importante que es LeBron James, que su opinión ha cruzado todo el mundo y ha llegado a Corea del Sur, país en el que reside el creador de El juego del Calamar, Hwang Dong-hyuk, quien no ha dudado ni un segundo en responder con contundencia, pero, ¿desde el respeto?, a la estrella de la NBA.
Lo que podría haber sido una contestación respetuosa, se ha convertido en un mensaje un tanto frío y crítico sobre la opinión de un espectador más. A Hwang Dong-huyk se le ha ido la lengua, y lejos de aceptar las críticas constructivas, las golpea de regreso como si de un partido de béisbol se tratase.
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