Con Halloween a la vuelta de la esquina, he pensado de inmediato en Archivo 81 y lo mucho que me gustó esta serie de Netflix de terror e intriga. También he recordado lo mal que la ha tratado la plataforma de streaming, olvidándose de ella al poco de su estreno por no ser un triunfo, y dejándonos a todos con la miel en los labios: en efecto, no habrá temporada 2 de Archivo 81 y su final es abierto.
Pese a todo, si dispones este fin de semana de 8 horas (o menos), lo mejor que puedes hacer es ponerte Archivo 81 y disfrutar de una serie de terror producida por James Wan que se merecía un mejor trato, y que sorprende capítulo tras capítulo.
Archivo 81 nos cuenta la historia de un especialista en restaurar cintas analógicas de vídeo; él es contratado por una empresa que parece esconder mucho más de lo que parece en un primer momento. Es entonces cuando el archivista descubre algo siniestro en unas grabaciones protagonizadas por una mujer con la que se siente conectado más allá de su trabajo.
En una época en la que el terror parece imposible de innovar, Archivo 81 se convierte en la serie de Halloween perfecta porque consigue sorprender con cada giro, a pesar de que su tratamiento del género no resulte sorprendente ni novedoso. Sin duda alguna, lo que provocó que mi particular droga de Netflix a principios de año fuese Archivo 81, fueron esos cliffhanger finales de cada capítulo que desencajaban mi mandíbula.
Por otro lado, se siente como el principio de algo mucho más grande, algo que se constata con su último capítulo. Una auténtica pena que Archivo 81 no tenga temporada 2, y Netflix no haya cambiado su parecer.
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Esta magnífica serie de intriga y terror no tendrá más episodios... Y su final fue completamente abierto
