Evidentemente, los protagonistas absolutos de la saga Harry Potter son el propio Harry Potter, Ron Weasley y Hermione Granger. Esto era algo que sabían los actores incluso antes de rodar, porque J.K. Rowling centró la historia en estos tres personajes. Sin embargo, Bonnie Wright, la actriz que interpretó a Ginny Weasley a lo largo de toda la saga, recuerda la frustración y ansiedad que esto le produjo. Hablando con el podcast Inside of You, la intérprete describe algunas crisis que afectaron de lleno a su ánimo.
Si recuerdas el desarrollo de Harry Potter como franquicia, Ginny Weasley fue interpretada por Bonnie Wright hasta la última entrega. Seguro que te sorprende saber que la actriz tenía tan solo 9 años cuando empezó a rodar en Harry Potter y la Piedra Filosofal, pero debe ser complicado ir creciendo y ver a tus compañeros tener todo el protagonismo, mientras que tú te quedas como la 'eterna' secundaria.
"Sí, definitivamente siento que tenía ansiedad por actuar y hacerlo lo mejor posible para construir mi personaje. Como pensar: 'oh, Dios, ¿le haré justicia a este personaje que la gente adora?'. Eso siempre fue difícil, especialmente cuando, de forma inevitable, muchas de las escenas de varios protagonistas fueron eliminadas en la adaptación del libro a la película. Así, no tenías mucho más con lo que trabajar". Bonnie Wright recuerda que algunas secuencias de las novelas en las que ella sí tenía protagonismo, simplemente desaparecieron en las películas.
Eso sí, Bonnie Wright nunca emitió queja alguna a los productores de Harry Potter por reducir la presencia de Ginny Weasley en pantalla, asumiendo que las películas no pueden reproducir de forma tan fiel el contenido tan extenso de los libros. No obstante, La Orden del Fénix se acerca a las 1.000 páginas, mientras que otros tomos superan fácilmente las 500 páginas.,
"A veces era un poco decepcionante porque había partes del personaje que no se materializaban porque no había escenas para intentarlo", continúa explicando Bonnie Wright. La joven actriz cree que "no había lugar para muchos cambios en guiones tan cerrados, por lo que sentí ansiedad y frustración a partes iguales". Además, recuerda que muchos ejecutivos revisaban los libretos, y se sentía temerosa de no convencer con su interpretación, pero rápidamente se dio cuenta "de que en realidad no tuve la oportunidad de hacer eso, así que no era culpa mía". También cree que los fans querían verla más en pantalla con el resto de personajes.
Es por eso que agradece que HBO Max haya confirmado la serie de Harry Potter, la cual adaptará un libro por temporada. Así, pasaremos de películas de 2 horas y media de duración, a temporadas de 8-10 horas en los que habrá más espacio para entrar con detalle al personaje de Ginny Weasley que ella interpretase hace dos décadas.
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