Dragon Ball Daima - Análisis del episodio 19: Cuando los sueños de los fans se cumplen

Me encanta poder decir esto una vez más: "Dragon Ball Daima" lo ha vuelto a hacer. Después de un episodio 18 que hizo felices a millones de fans que disfrutamos de "Dragon Ball GT" siendo apenas unos críos, resulta que "Dragon Ball Daima" tenía planeado hacernos revivir las emociones de antaño pero de una forma completamente indescriptible. Porque en efecto, el episodio 19 de "Dragon Ball Daima" nos ha vuelto a mostrar el Super Saiyan 4 de Goku, pero es que en general ha habido muchísimo que rascar en esta ocasión.

El deseo de Glorio

El final del episodio 18 de "Dragon Ball Daima" nos dejó con un cliffhanger antológico: Glorio completaba su deseo al Porunga del Reino de los Demonios... ¡pero en un idioma namekiano que ni un solo espectador podía comprender! No obstante, los primeros segundos de "Dragon Ball Daima" nos dejan con el regreso de los cuerpos adultos de Goku y compañía, confirmándose así que Glorio ha optado por apoyar a los Guerreros Z en lugar de seguir con los planes de Arinsu. Al final este es el efecto que sabemos que tienen Goku y sus amigos: en muchas ocasiones aquellos que tenían intenciones malvadas se acaban viendo forzados al lado de la luz.

Vegeta vuelve a usar el Super Saiyan 3 y se pone modo épico

Por si había algunas dudas a consecuencias del modelo mini, en el episodio 19 de "Dragon Ball Daima" se ha acabado de confirmar: El Super Saiyan 3 de Vegeta definitivamente tiene el peinado que Akira Toriyama descartó como la idea original del propio Super Saiyan 3. Pero dejando a un lado la confirmación de la estética de dicha transformación en el Príncipe de los Saiyans, lo cierto es que la puesta en escena ha sido una completa locura.

La animación de todo el episodio 19 de "Dragon Ball Daima" ha sido de lo mejor que se ha visto estos últimos años en la franquicia, y Vegeta se ha aprovechado de ello de forma increíble: desde convertir a Gomah en una pelota de ping-pong para jugar con él como quisiera, a lanzar un Final Flash épico como pocos se le han visto al Saiyan. Lo cierto es que Vegeta ha hecho absolutamente todo para ganar la batalla, pero el poder del Tercer Ojo Malvado es absolutamente descomunal.

El momento de comedia del año

Vegeta empieza a desfallecer y Goku y Piccolo llegan a la conclusión de que es momento de cambiar de luchador, más todavía ahora que gracias a Arinsu saben cómo hacer que Gomah pierda el Tercer Ojo Malvado. Dicho esto, Vegeta se niega por activa y por pasiva a ceder su turno de batalla, pero con lo que no cuenta el Príncipe de los Saiyans es que Bulma tiene preparada una amenaza para la que ninguna transformación sería suficiente.

Cuando Vegeta se niega inicialmente a dejar que Goku pase a luchar, Bulma le dice algo que ningún hombre con pareja quiere escuchar: si no abandona no volverá a bañarse con él. No es ya solo el hecho de que sea este el argumento que convence a Vegeta, es que la forma en la que se representa es absolutamente tronchante: plano lila, cámara lenta, zoom al rostro de Vegeta, que ve pasar toda su vida por delante y finalmente un acelerón como pocos se le han visto para dejar que Goku siga la pelea. Está bien Vegeta, te entendemos.

El Super Saiyan 4 adulto, una realidad de Dragon Ball Daima

Que Goku se convirtiera en Super Saiyan 4 siendo un crío ya fue un regalo, pero que además se hayan tomado la molestia de volver a dejarnos con la transformación como ADULTO es ya 'peak' de cuanto pudiéramos reclamar como fans de "Dragon Ball". Creo que no exagero cuando digo que la escena de la transformación es de las mejores animadas que se han visto jamás en toda la historia de la franquicia. Pero para qué os lo voy a contar cuando lo puedo enseñar directamente:

Si como un servidor hay algún fan en la sala que juegue a Dragon Ball Dokkan, encima hay que tener en cuenta que esta brutalidad de momento la veremos a través de un personaje LR en el juego que rezaré a Akira Toriyama para conseguir. Dicho esto, es que realmente no puedo ponerle una sola pega al momento de la transformación; Toei Animation ha hecho todo lo que tenía que hacer con algo tan importante como es la canonización del Super Saiyan 4 y le ha salido a las mil maravillas (a falta de resolver dudas sobre por qué luego no aparece en 'Super').

Por lo general, no voy a ponerle una sola pega a este episodio. Me ha gustado también que Majin Kuu haya tenido su pequeño momento de gloria, ya que es un personaje tremendamente simpático que así lo merece. Ahora solo queda ver cómo será un episodio 20 que recibe el nombre de 'Zenkai' y para el que se ha confirmado la participación de Naotoshi Shida, uno de los animadores más legendarios de la franquicia (y que ya nos dejó el salvaje Kamehameha de Goku ante el Tamagami 3). Abróchense los cinturones, porque el episodio 20 y final de "Dragon Ball Daima" va a ser de infarto.