El tema de los live-action de animes siempre ha sido de lo más peliagudo. Las adaptaciones que podemos considerar como "decentes" apenas se pueden contar con una sola mano, por lo que los amantes de One Piece tienen muchas inquietudes con respecto a la serie de acción real que prepara Netflix.
El primer tráiler dividió a la comunidad por varios motivos diferentes (CGI, diálogos cringe, etc), pero tras la salida del segundo parece que ahora hay más optimismo que pesimismo. El live-action de One Piece puede salir bien o fracasar estrepitosamente, pero eso sí, sus responsables al menos nos están dando motivos para creer que están tratando la obra original con muchísimo cariño y respeto.
Sinceramente yo también estoy dejándome arrastrar por el optimismo general ante el estreno de esta serie. La adaptación de acción real de One Piece estará disponible desde el 31 de agosto en Netflix, y con todo lo que estoy viendo y leyendo sobre ella, cada vez tengo más razones para creer que podría escapar de la maldición de los live-action de anime y convertirse en una obra más que aceptable.
CONTENIDO RELACIONADO
Bartholomew Kuma empieza a coger peso en la trama principal de la serie
Desgraciadamente este episodio llegará más tarde de lo esperado
Comienza la huida desesperada de la isla de Egghead, ¿Qué sucederá con Vegapunk?
Eiichiro Oda se prepara para desvelarnos algo importantísimo
Esta obra estará incluida dentro del volumen 18 de la revista oficial de One Piece
Eiichiro Oda volvió a tirar de mitología para nombrar a este puñetazo colosal