Cuando uno se enfrenta a una adaptación de un popular videojuego, seguro que se espera fidelidad máxima. Sin embargo, no es nada fácil adaptar una saga como Gran Turismo, la cual adolece de historia y simplemente se centra en repetir carrera tras carrera, pulverizando los tiempos récord y poniendo a prueba al jugador. Por esta razón, PlayStation Productions, Sony Pictures y Polyphony Digital han sido bastante inteligentes al poner a prueba nuestras expectativas, regalándonos una película que para nada es lo que esperábamos al pensar en Gran Turismo, pero al mismo tiempo, con personalidad y estilo.
La (verdadera) historia de Gran Turismo
¿Qué historia puede contar una adaptación de Gran Turismo? En lugar de crear un guion de la nada, Jason Hall, Will Dunn, Jon Hoeber, Erich Hoeber y Zach Baylin (sí, sé que son muchos guionistas) prepararon un borrador acerca de la historia de Jann Mardenborough, un joven que empezó jugando a Gran Turismo sin imaginarse que poco después sería piloto profesional de Nissan gracias a un programa desarrollado por los responsables de su saga de videojuegos preferida.
Después de ver Gran Turismo, en absoluto la llamaría adaptación de un videojuego; en todo caso, es un biopic que ha adoptado el nombre de Gran Turismo, como podría haberse llamado Jann Mardenborough o Nissan: la historia detrás del juego. Lo que quiero decir es que esto no es Uncharted o The Last of Us, película y serie que centra su guion en el que ya conocemos de PlayStation. Es una historia creada desde cero, basándose para ello sus guionistas en hechos reales. Y el resultado funciona, porque la narrativa, sin ser extremadamente innovadora, se sale de convencionalismos y nos presenta el auge de un joven que de la noche a la mañana, compite contra los más grandes. Lo único que hubiera borrado es esa historia de amor cargada de clichés, además de haber construido antagonistas mucho más complejos.
Gran Turismo saca músculo visual
Dudo mucho que haya algún fan de Gran Turismo en la sala que no se quede sorprendido con el apartado visual de la película. En realidad, el principal objetivo de esta 'adaptación' no era elaborar un guion complejo y repleto de matices, sino trasladar el poderío visual de la saga de videojuegos, a la gran pantalla. Según reveló el equipo técnico, las cámaras Sony Venice 2 permitieron imitar el estilo 35 mm, sin serlo propiamente, al mismo tiempo que colocarlas en diferentes partes del vehículo para evocar el espíritu de la franquicia.
Se nota que Neill Blomkamp es un maestro en este apartado, porque cuando brilla Gran Turismo es en las escenas de conducción. Tanto, que parece que estemos viendo alguna repetición de la última entrega de Gran Turismo.
Gran Turismo es un correcto biopic y una buena adaptación
Seguro que leeré estas semanas muchas quejas por la interpretación de Orlando Bloom, quien se ahoga en un papel realmente sencillo (está sobreactuado, es insoportable y no para de gesticular), pero que esto no empañe el hecho de que Gran Turismo es un correcto biopic y una buena adaptación de la saga de videojuegos desarrollada por Polyphony Digital. Quizás no satisface las expectativas de aquellos que solo querían ver carreras, pero en el cine se necesita una historia, y la de Jann Mardenborough es cuanto menos interesante.
Seguro que leeré estas semanas muchas quejas por la interpretación de Orlando Bloom, quien se ahoga en un papel realmente sencillo (está sobreactuado, es insoportable y no para de gesticular), pero que esto no empañe el hecho de que Gran Turismo es un correcto biopic y una buena adaptación de la saga de videojuegos desarrollada por Polyphony Digital. Quizás no satisface las expectativas de aquellos que solo querían ver carreras, pero en el cine se necesita una historia, y la de Jann Mardenborough es cuanto menos interesante.
Netflix, HBO Max, Prime Video, Disney Plus y Filmin, mis plataformas de streaming favoritas. Harry Potter, Marvel, DC, James Bond y Fast & Furious, mis películas comerciales preferidas. La vida es bella, mi película favorita. Así soy yo, y así seguiré.