El estreno de "Puñales por la espalda", la nueva película de Rian Johnson está a la vuelta de la esquina. Una cinta que, según palabras del mismo director, tratará de mostrar una versión moderna y renovada de los históricos detectives que han protagonizado el género Whodunit a lo largo de la historia. Por ello, aquí os traemos una recopilación de 10 cintas imperdible dentro del género que son obligatorias si quieres conocer las influencias que han inspirado a Johnson a realizar su nueva película. ¿Descubrirás al culpable?
Es una de las películas más icónicas del género whodunit y la que inspiró directamente a Rian Johnson para su "Puñales por la espalda". En "El juego de la sospecha" un grupo de personajes pintorescos se reúnen en una mansión victoriana para un gran evento especial. Una selección de invitados muy curiosa, todos ellos reunidos por un excéntrico anfitrión con el que los asistentes han tenido sus más y sus menos.
Las luces se apagan y el organizador de la ceremonia aparece muerto. ¿Quién cometió el asesinato? algo difícil de resolver puesto que todos los personajes tenían motivos de peso para acabar con la víctima. Jonathan Lynn consigue lo imposible y recrea el popular juego de mesa "Cluedo" en la gran pantalla. Diferentes finales y una tensión constante por saber que el autor de crimen se está haciendo el tonto en una cinta inolvidable
El maestro Hitchcock aterriza en el género para dejarnos una de las obras más particulares de toda su filmografía. Un singular alarde técnico rodado en plano secuencia en el que un grupo de estudiantes se reúne para debatir si existe el crimen perfecto. Hitchcock crea un suspense agobiante posicionando en el centro de la trama un arcón con un cadáver que sirve de mesa para la cena. A esta tensión se le suma un invitado muy especial, un experto criminólogo que intentará demostrar que el crimen perfecto no existe.
Esta emblemática cinta del género cumple la difícil papeleta de ser inspiradora para películas posteriores como "El juego de la sospecha" siendo una parodia y moviéndose en el siempre complicado mundo de la comedia absurda. "Un cadáver a los postres" se ríe a su manera de la novela policíaca y a su vez sirve como homenaje de personajes tan históricos dentro del género como Miss Marple o Poirot. Todos ellos representados de forma idiotizada para descubrir un asesinato que se producirá a las 12 de la noche.
Robert Moore traza un hilo argumental que juega entre el suspense y la comedia para ofrecer una atmósfera en la que nada está justificado, y por tanto, todo es posible. Además de hacer una reflexión sobre por qué triunfa el arquetipo de detective que se hace el tonto para resolver un crimen, también es capaz de crear otros personajes icónicos como el mayordomo ciego. Una película que comienza como una comedia absurda y acaba presentándose como una guía imperdible para disfrutar el género Whodunit.
Sidney Lumet adapta al cine una de las obras más icónicas de Agatha Christie. Tal es su calado que Kenneth Branagh apostó fuerte por volverla a llevar a la gran pantalla en 2017. Una película que trata un asesinato en un ambiente tan claustrofóbico como es un tren en movimiento que induce la idea de que el asesino tiene que estar presenciando las conjeturas que tratan de capturarle. Una premisa inquietante a la que hay que sumarle el protagonismo del emblemático detective Hércules Poirot y la gran actuación de Ingrid Bergmn, que le valió el Oscar a mejor actriz de 1974.
Esta cinta tiene mucho en común con la anterior, "Asesinato en el Orient Express" por varios motivos. El primero, porque es una adaptación de otra de las célebres novelas de Agatha Christie, el segundo, porque vuelve a estar protagonizado por Hércules Poirot, el tercero, porque también transcurre en una viaje, esta vez en un barco gigante del que nadie puede escapar hasta arribar a puerto, y por último, porque volverá a la gran pantalla el año que viene de la mano, otra vez, de Kenneth Branagh, película que contará con actores de la talla de Armie Hammer, Gal Gadot o Tom Bateman. Sin duda, un gran aperitivo de lo que está por venir.
Cambiamos radicalmente de escenario para trasladarnos al siglo XIV, a una pequeña y apartada abadía benedictina situada en el norte de Italia para tratar de descubrir el misterio de un grupo de monjes que aparecen muertos en un corto periodo de tiempo. Sean Connery nos regala una de sus mejores actuaciones en, quizá, la película más reconocida que se ha producido en la Alemania Federal. Una película que en su forma es capaz de trasladar al espectador a ese remoto siglo en el que las religiones imperaban sobre los hombres. Todo esto sumado a un gran misterio que resolver la convierten en una de los títulos del género por antonomasia.
Un whodunit a la española en la que cuatro matemáticos, que no se conocen entre sí, son invitados para participar en un particular juego: resolver un gran enigma. Poco a poco descubren que la habitación es cada vez más pequeña, y que si no averiguan pronto la relación que existe entre ellos, acabarán asesinados por el misterioso anfitrión que les ha invitado a tan macabro juego. Una refrescante y frenética propuesta que trastoca los límites del género para llevarlos a un nivel de tensión propio de otro tipo de cine.
Guy Hamilton, uno de los directores británicos más reconocidos de la historia, se mete en las entrañas del género y lo alimenta añadiéndole una vuelta de tuerca más, el metacine. En esta ocasión la protagonista es Miss Marple, otro de los personajes más emblemáticos de las novelas de Agatha Christie. Como telón de fondo, Hamilton nos muestra una pequeña y apacible aldea donde irrumpe un equipo de Hollywood para rodar una película sobre María Estuardo.
Durante la producción, las rivalidades entre los protagonistas y la tensión constante del rodaje generan fricciones entre todas las personas involucradas en el proyecto hasta que se comete un asesinato. El sobrino de Miss Marple se encarga del caso, pero no es capaz de resolverlo... Menos mal que cuenta con la desinteresada ayuda de su tía preferida para resolver el misterio.
Tarantino se mete de lleno el género Whodunit en una de sus más recientes obras. Aquí nos muestra un híbrido entre el western y el misterio para presentarnos a un grupo de forajidos que acaban atrapados en una misma cabaña por diferentes motivos. Tarantino utiliza a la perfección sus mejores talentos como los diálogos y la escenografía, para contarnos una historia a pedazos que llega a su clímax con un tercer acto memorable, una concatenación de circunstancias y decisiones que derivan en un sobresaliente Whodunit ambientado y protagonizado por el salvaje oeste.
Drew Goddard se consagra como uno de los directores más atrevidos de su generación en este vistoso thriller con tintes de whodunit en el que siete desconocidos acuden a un misterioso hotel que esconde un oscuro pasado. Un reparto de lujo con nombres de la talla de Jeff Bridges, Chris Hemsworth o Dakota Johnson que protagonizan un impecable puzzle en el que nada es lo que parece. Esta divertida premisa sumada a una cinematografía plagada de contantes referencias tanto al género como a realizadores como Tarantino, nos deja una de las apuestas que más ha tratado de trastocar los cimientos que sostiene el género Whodunit.
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