En ocasiones, desde el panorama indie surgen propuestas que pueden complementar a otras sagas ya consagradas en el mercado. Si os hablamos de Immortal Redneck quizás no os suene, pero si le dais una oportunidad os recordará a otros grandes juegos como, por ejemplo, Serious Sam al mismo tiempo que presenta originalidad y una identidad propia.
La premisa del juego es simple: Somos un turista que visita Egipto y termina momificado tras un accidente. Para conocer por qué nos ha sucedido eso, debemos explorar tres pirámides, matar a todos los enemigos, y conocer la verdad que se esconde tras el misterio de nuestro accidente. El argumento puede parecer poco innovador, pero el juego no necesita más. La jugabilidad frenética se encarga del resto. Y creednos cuando os decimos que el juego es frenético. Es su punto más destacable y por lo que nos ha enamorado.
Otro de los puntos destacables es que los niveles se generan aleatoriamente, por lo que si mueres y tienes que repetir la zona, te encontrarás con algo totalmente distinto. Por ejemplo si entras en una pirámide y mueres, al entrar nuevamente todas las zonas de la pirámide habrán cambiado por completo. Y no nos referimos a que cambien de lugar algunos elementos, sino a que TODO cambia: Enemigos nuevos, habitaciones distintas, puertas que antes no estaban… Con esto se consigue que perdamos la cabeza por momentos, lo cual nos encanta.
Además en cada planta que vayamos subiendo de la pirámide obtendremos recompensas al azar que pueden ir desde un aumento del porcentaje de munición a mayor salud, pero los enemigos también recibirán recompensas. Pero eso no es todo, ya que por el mapa podremos ir recogiendo pergaminos que de forma aleatoria podrán darnos una ventaja tanto a nosotros como al enemigo. Podemos recoger un pergamino que nos aumente la velocidad de movimiento, como podemos encontrar un pergamino que nos haga ir más lentos para dar ventaja a los enemigos. Todo esto se traduce en que durante todo el juego el combate se mantiene igualado con los enemigos y en ningún momento tenemos la sensación de ser un ser “intocable” como sucede en otros títulos similares.
Para evolucionar a nuestro personaje tenemos un árbol de habilidades típico al de cualquier RPG. Podremos gastar oro para mejorar nuestro poder de ataque, nuestra defensa o aumentar nuestra salud, además de visitar al mercader para comprar armas y objetos. En este aspecto no hay mucha historia, es idéntico al resto de juegos del género.
No obstante, uno de los puntos fuertes del juego es las altas dosis de humor que contiene. Nuestro personaje irá realizando comentarios irónicos sobre las zonas del mapa o los distintos eventos que se sucedan. Aunque los comentarios son realmente divertidos, con el tiempo se vuelven cansinos debido a la poca variedad que hay. Básicamente repite los cinco o seis mismos chistes durante toda la aventura. Algunos mensajes más le hubieran venido bien.
Afortunadamente, en cuanto a armas y enemigos no se han andado cortos los desarrolladores. El juego cuenta con más de 50 armas distintas, entre pistolas, escopetas, granadas, ametralladoras, armas futuristas, mitológicas y… un lanzapatatas. En cuanto a enemigos cuenta con más de 35 tipos distintos de enemigos, a contar entre momias, serpientes, guerreros, etc.
Gráficamente el juego es una delicia. Aunque no sea lo más puntero del panorama actual, cuenta con unos gráficos más que decentes que se complementan con una paleta de colores vivos y bellos que encajan perfectamente con el juego.
A nivel sonoro el juego cuenta con una banda sonora bastante buena de música típica de Egipto y unos efectos de sonido potentes que nos meten de lleno en el papel. Es un gustazo repartir escopetazos en una sala y oír cómo retumba la potencia del arma en nuestros altavoces. Además, cuando estamos escasos de salud, el sonido se acopla con motivo de nuestras heridas. No obstante, aunque los creadores del juego son españoles, el título únicamente cuenta con voces en inglés. Pese a ello, está perfectamente traducido a nuestro idioma, además de a otras siete lenguas.
En conclusión, Immortal Redneck es un juego que te encantará si te gustaron otros juegos como Serious Sam, o si directamente te gustan los shooter de la vieja escuela con toques frenéticos. Es una aventura totalmente rejugable debido a sus mapas aleatorios que, además, tiene cromos en Steam y un montón de logros para que nos pasemos horas y horas reventando las cabezas de los enemigos. En pocas palabras: Le pedimos a Crema, los creadores, que continúen sacando juegos así. Los jugadores frenéticos los necesitamos.
El juego ha recibido un parche de Día Uno donde ha corregido buena parte de sus errores, entre ellos el que hemos mencionado sobre los comentarios repetitivos del personaje (en la actualidad hay más de 180 comentarios distintos). Además se han añadido cinco nuevas piezas musicales y algunos ajustes en el rendimiento del juego. Si quieres conocer el listado completo de novedades, haz click aquí.