No existe una única forma de amar. Hay miles, millones, infinidad de ellas. Porque el amor, no entiende de géneros, de orientaciones ni identidades sexuales. Porque el amor, por fortuna, es un sentimiento tan positivo que no podemos dejar de compartirlo con aquellas personas que queremos. Eso sí, todavía queda mucho camino por recorrer, porque la igualdad, por mucho que les pese a algunos, no está aún sobre la mesa, y el odio al colectivo LGBTIQ+ es cada vez más fuerte gracias a las redes sociales, a los partidos homófobos y tránsfobos, a los debates en televisión carentes de profesionalidad...
Al menos, la industria audiovisual ha cambiado su enfoque en torno a sus series y películas más queer, y estas 5 series LGBTIQ+ de Netflix son un buen ejemplo. Atrás quedan los estereotipos más manidos, apostando ahora por personajes naturales, con personalidad y que actúan por impulsos. ¿Quieres disfrutar de producciones televisivas que se olvidan del odio al colectivo, y prefieren lanzar al aire un discurso de tolerancia y respeto?
Ryan O'Connell solo necesitó episodios de 15 minutos para contar una historia enternecedora en Special. Por desgracia, una de las series LGBTIQ+ de Netflix más infravaloradas, y a su vez, la más necesaria. Hablo de un proyecto centrado en un joven gay con parálisis cerebral que lucha por conseguir esa vida con la que sueña desde que era pequeño. ¿Cómo avanzar en esa transición hacia la adultez si tienes a todo el mundo en tu contra?
Por supuesto, en esta lista no podía faltar Heartstopper, el último éxito televisivo de Netflix en el campo de las series LGBTIQ+. Una adaptación magnífica de las novelas gráficas publicadas por Alice Oseman y que nos presenta la historia de dos chicos que se enamoran en un instituto. ¿El problema? Nick es un joven popular que hasta ahora creía ser heterosexual. ¿Y si su castillo de naipes se derrumba en cuanto conoce a Charlie Spring?
Sex Education es la serie más mainstream de esta lista, en parte por no ser un proyecto televisivo exclusivo del colectivo LGBTIQ+. Pero sus creadores consiguen que personajes como Eric o Adam vivan una adolescencia descubriendo su orientación e identidad sexual sin tapujos. Porque al final, el sexo es una cuestión de educación, y cuando conoces todas las posibilidades, eres tú quién decide qué eres, y qué quieres.
Probablemente, de todas las series LGBTIQ+ de Netflix, esta sea la más injustamente valorada. Quién haya visto RuPaul's Drag Race, sabrá que su presentadora es una reina muy dura, a la que temer es solo la punta del iceberg. Pero con esta producción original de la plataforma, RuPaul demostró tener un corazón preparado para educar a la sociedad en el respeto y en la tolerancia. Finalmente, y tras no obtener el éxito esperado, la plataforma de streaming canceló AJ and the Queen tras una única temporada, pero sus historias estarán siempre guiándonos en la oscuridad.
Hablar de Bonding, es hablar de una forma diferente de vivir las relaciones sexuales. De nuevo, no es una serie LGBTIQ+ por si misma, pero sí un proyecto televisivo muy inteligente, con algunas tramas que giran en torno al colectivo, y cuyo epicentro es el BDSM. Esta práctica sexual, muy extendida por todo el mundo, está repleta de estereotipos que Bonding trata de desmontar con una historia muy divertida y liberadora.
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