Este viernes 11 de febrero ha llegado a Netflix la temporada 2 de Toy Boy, uno de los mayores éxitos españoles de la plataforma de streaming. En Antena 3, cuando se estrenó hace dos años, nadie le hizo caso: una serie más de tíos buenorros y escenas eróticas. Pero cuando llegó al catálogo del servicio, se convirtió en un fenómeno que traspasó fronteras, muy cerca de lo logrado años atrás por La casa de papel.
Aún así, soy consciente de que muchos estáis reticentes a ver Toy Boy en Netflix (o en ATRESplayer Premium, dónde la segunda temporada lleva disponible desde septiembre), pero yo he venido hoy con un duro cometido: convenceros de que veáis esta serie por mucho que parezca la típica ficción española. Porque lo es, claro que lo es, pero a la vez, se trata de un guilty pleasure maravilloso que comentarás con tus amigos nada más terminarlo.
Si no he logrado convencerte todavía, no te preocupes: hay chicos guapos, chicas guapas, escenarios idílicos en la Costa del Sol y coches de lujo. ¿Qué más quieres? ¿Una sonata de Mozart? Toy Boy no busca eso, sino todo lo contrario: hacerte disfrutar durante la hora que dura cada capítulo. Sin más.
Puedes ver Toy Boy al completo en ATRESplayer Premium y en Netflix. Sin cortes, y sin esperas. Los 21 capítulos (13 de la primera temporada, y 8 de la segunda) ya están disponibles, y de momento, no hay noticias sobre una tercera temporada. Eso sí, huelo que la habrá.
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