Exacto, como ya sabéis, hablo de Hi-Fi Rush, lo nuevo de Bethesda y Tango Gameworks, el estudio fundado por Shinji Mikami, el padre de Resident Evil. Si ya su propio lanzamiento "exprés" fue una auténtica sorpresa, imaginaos ver que un estudio que es reconocido por sus juegos de terror, como The Evil Within o el más reciente Ghostwire: Tokyo, ha desarrollado una propuesta tan refrescante y desenfadada como lo es este título. Porque sí, un buen juego de miedo entra solo, pero desde luego un título como este que viene de un estudio como del que viene, ya tiene el doble de impacto, y aunque no lo veáis como un triple A, es evidente que estamos ante uno de los grandes estrenos de este 2023.
Una aventura ya vista, pero que funciona a las mil maravillas
A estas alturas ya habréis oído hablar de Hi-Fi Rush hasta en la sopa, pero es que no es para menos. Si bien no será el primer juego de acción con ritmo, pero es que en este caso estamos ante uno que implementa las dos ideas prácticamente a la perfección (que sí, que lo perfecto no existe, pero es que no hay otra forma de decirlo). Puede que en un principio pienses que se te va a hacer bola cuando lleves cierto rato jugando, pero nada más lejos de la realidad, ya que a medida que avanzamos y vamos incorporando nuevas habilidades a nuestro set de movimiento, el juego se empeña en ser más carismático y divertido.
Antes de indagar un poco más en lo que nos propone esta aventura en lo jugable y en lo mecánico, toca hablar de su premisa argumental. Seguramente ya tendréis los detalles más importantes sobre su historia más o menos en la cabeza, pero del tema hay que hablar igualmente. Entonces, dejando claro que Hi-Fi Rush no hace unos esfuerzos descomunales en contarnos nada nuevo ni lo necesita, nos lleva a ponernos en la piel de Chai, un joven que sueña con ser una estrella del rock, el cual se presta a una especie de intervención de mejoras robóticas, denominada el proyecto Armstrong, que finalmente sale mal.
Tras esa intervención, nuestro joven protagonista acaba con un brazo robótico con poderes magnéticos y un reproductor de música incrustado en el pecho, lo que, a juicio de la mega corporación que hace el papel de gran adversaria en el título, hace que Chai sea una "anomalía". A partir de este punto, nos daremos cuenta del que parece ser el malévolo plan de la corporación Vandelay, una que en su día siempre había tenido buenas intenciones, y con la ayuda de nuestros grandes compañeros y amigos tendremos que salvar la situación, pero siempre siguiendo el ritmo.
Una propuesta muy divertida con personajes muy top
Como decía antes, Hi-Fi Rush no inventa la rueda y a nivel argumental no es nada que no hayamos visto anteriormente, pero es el cómo lo cuenta y como usa todos sus puntos fuertes para que su historia gane más peso con el paso de las horas. Quiero decir, no es que utilice elementos narrativos complejos, para nada, pero sí que implementa un muy buen ritmo en el devenir de los acontecimientos importantes, aunque es verdad que algunas partes jugables le restan algún que otro minipunto al título y a su ritmo.
Vaya, podemos decir que sus personajes, tanto los acompañantes que iremos haciendo por el camino como los enemigos principales; y sus características y comportamientos, aunque estos están repletos de tópicos, pero funcionan de maravilla; como su implementación del argumento en su propuesta jugable es lo que hacen que este apartado funcione de forma excepcional. Además de lo ya mencionado, también cabe recalcar su humor, que consigue sacarnos una sonrisa en cualquier momento, aunque sea soltando un chiste malo (Chai es un crack en ese subgénero de gracietas); y sus múltiples referencias al mundo del videojuego.
Sin duda alguna, merece la pena destacar más aún lo desenfadado que es este juego, no se toma para nada en serio y eso es lo que lo hace más especial aún. En ciertos momentos, me recuerda a ese tipo de animes en el que un grupo de jóvenes tienen que hacer las veces de héroes y salvar los muebles mientras no paran de ocurrirles cosas absurdas, lo que siempre les permite explotar su lado más "gracioso", por decirlo así. Sea como fuere, creo que todos esos elementos que ya he comentado son los que hacen que Hi-Fi Rush sea un juego tan brillante en su planteamiento, uno que no da volteretas sobre sí mismo y le gusta ir al grano en favor del jugador.
Ritmo y tortas en unos combates de lo más espectaculares
Como decía, Hi-Fi Rush es un juego de acción y ritmo en el que sistema de combate consiste en el hack and slash, aunque aquí no se aconseja machacar botones y que pase lo que tenga que pasar. Exacto, en el título, desde el momento en el que Chai se convierte en la mencionada "anomalía", todo a nuestro alrededor seguirá el ritmo de la música que esté sonando en ese momento. Por lo tanto, los escenarios y todos sus elementos, cada paso que damos y todo lo demás van al compás, incluso los enemigos nos atacarán siguiendo el ritmo. Esto puede considerarse una ventaja, al menos si tienes un oído medio decente, a la hora de afrontar las batallas, puesto que mientras más marquemos el tempo con nuestros golpes, más alargaremos los combos y, por lo tanto, mejores puntuaciones obtendremos al final de cada nivel, además de infligir más daño a nuestras adversarios.
Antes de seguir con otros aspectos del juego, evidentemente toca hablar más de su combate y todas las opciones que este nos ofrece, puesto que este es uno de los elementos que hacen que Hi-Fi Rush sea tan disfrutable. Como decía, mientras más sigamos el tempo de la música, más daño haremos a los distintos enemigos que nos encontramos a lo largo de los niveles, siempre lucharemos en secciones concretas que sirven como arenas dispersadas por los niveles, antes de llegar al jefe que nos toque; y más puntos sumaremos para conseguir una valoración mayor al final de la batalla, pero al final no es obligatorio hacerlo.
Es decir, seguir el ritmo en los combates, a menos que sea sumamente necesario (esto tiene una explicación realmente simple, la verdad), es algo totalmente complementario y que sirve para picarnos con las puntuaciones, lo que también ayuda a su rejugabilidad. Ahora bien, el gustito que da clavar los golpes al compás de la canción que esté sonando en ese momento es otro rollo totalmente. También toca decir que, aquellos que como yo no contéis con un oído muy preciso en estos temas, siempre podréis guiaros por sus ayudas visuales, ya que estas están por todo nuestro alrededor. Pero bueno, otra cosa que toca mencionar sobre el combate de Hi-Fi Rush es que este está compuesto por tres elementos esenciales: un ataque básico, un ataque fuerte y uno especial que podemos usar al cargar una barra de energía (algo que también se carga siendo un crack enlazando y sumando combos).
Antes ya comentaba que la ayuda de los amigos de Chai será crucial, tanto como conversar con ellos cuando se pueda en una especie de guarida improvisada por este carismático grupo de protagonistas, todos y cada uno de ellos con sus respectivas motivaciones para salvar la situación; pero es que si aún no lo habéis jugado no os podéis hacer ni una ligera idea de lo cruciales que son. Concretamente, estos nos serán más que útiles en los combates, ya que podremos reclamar su presencia cada vez que la necesitemos, y solo tendremos que esperar unos segundos para volver a usarlos, para aprovechar sus habilidades contra los enemigos, sean jefes o no.
¿Repetitivo? Bueno, cuando te enfrentes a todos los jefes me respondes
Todo esto, en su conjunto, nos ofrece una gran experiencia de combate, muy refrescante y que al final consigue que no le prestemos tanta atención a clavar el ritmo con cada golpe, aunque todo ayuda y si lo haces todo se vuelve más espectacular. Quizás, el único aspecto negativo de este apartado podría ser lo que parece ser una escasa variedad de enemigos y sus diseños, aunque siendo justos no son tan pocos y lo bien que lucen las distintas variantes de las tropas de Vandelay hacen que esto no sea demasiado grave. De verdad, como en todo el juego, el diseño de los rivales es más que destacable y sabe hacer lo suficiente para diferenciar bastante los tipos de enemigos y sus tipos de ataque.
De hecho, hablando todavía del combate de Hi-Fi Rush, si hay algo que quieres hacer cuando estás recorriendo alguno de sus niveles es llegar al jefe de turno, y ya no solo por avanzar, sino porque estos son otro punto destacable de la propuesta. Tanto en su propio diseño como en el desarrollo y puesta en escena de los combates contra ellos, ya podemos ver ese aura especial que han querido proporcionarles a cada uno de ellos. Aunque ese jefe solo aparezca momentos antes de enfrentarnos a él, con muy poco ya se nos deja claro el tipo de motivación y personalidad que tiene, algo que se refleja luego en su propia arena de combate y en su manera de actual en él. Vaya, que cada paso que das en los distintos niveles tienes más ganas de descubrir el tipo de combate que te espera contra el mandamás de turno de Vandelay.
Como bien ya he dicho, estamos ante una aventura de acción y ritmo, y como tal este último aspecto es bastante importante contra ciertos enemigos, entre los que pueden estar algunos jefes. Es decir, en ciertos momentos, en el fragor de la batalla y cuando conseguimos romper la postura de nuestros adversarios más duros (esto sobre todo se aplica a los enemigos que nos vamos encontrando por el camino, pero que son algo más fuertes que los demás), hay alguna que otra parte en la que tenemos que seguir varios patrones mientras estos intentar hacernos daño.
Esta parte me lleva a hablaros sobre el bloqueo, una de las habilidades que se nos facilita durante la aventura. Por supuesto, este es crucial en los combates, ya que clavar un buen parry al ritmo de la música siempre nos ayudará a que nuestros combos sean más duraderos. Pero este gana mucho más peso en esos momentos concretos en los que hay que estar atento a los patrones sonoros y visuales de algunos de nuestros enemigos, donde a veces también tendremos que esquivar ataques más especiales, puesto que para ganar la posibilidad de acabar con ellos de un golpe tendremos que ser muy precisos.
También hay plataformas y puzles, aunque no son partes tan redondas
En definitiva, el combate del juego tiene sus capas de dificultad y, aunque no es imprescindible ser un crack siguiendo el ritmo la mayor parte del tiempo, tiene sus momentos en los que la precisión es clave; pero más allá de eso, tenemos un sistema hack and slash que funciona de maravilla con su propuesta rítmica y con el tipo de enemigos que nos encontramos. Ahora bien, no todo es luchar y luchar, también tenemos un poco de plataformeo y puzles.
Si bien no son elementos tan brillantes, cumplen con su función. Quizás el plataformeo, aunque ofrece cierta variedad en el avance por cada uno de los niveles, es un punto más flojo incluso, puesto que este es algo impreciso en ciertos momentos. Por suerte, al menos esa ha sido mi percepción, conforme avanzas en el juego estas zonas van mejorando notablemente, y eso que también nos exigirán a veces estar concentrados para poder saltar a la siguiente plataforma o zona siguiendo el ritmo (y, además, tiene momentos en los que solo tendremos que preocuparnos por esquivar ciertos objetos mientras nos deslizamos con un gancho entre raíles colgantes).
Por otro lado, para poder acceder a ciertas zonas o completar algunas secciones, tendremos que solucionar algunos rompecabezas, como ya he mencionado, y para ello sí que tendremos que hacer caso de los patrones visuales y sonoros que nos plantea el título. En general, aunque pueden hacerse algo tediosas estas partes, creo que estas breves secciones están bien implementadas y quieras que no ya nos sirve para entrenar nuestra atención y precisión siguiendo el tempo de la música. En cualquier caso, los elementos comentados en estos dos párrafos forman parte de uno más amplio, como es la exploración de Hi-Fi Rush, lo que nos servirá también para descubrir más personajes de lo más curiosos y más situaciones absurdas. De hecho, esto nos permitirá realizar algunos recados sueltos que pueden verse como misiones secundarias o desafíos extra, mejor dicho. No son gran cosa, la verdad, pero al no esperarlo se convierten en algo que le aporta algo más de importancia a lo de prestar más atención a todos los detalles posibles.
En un sentido más general, el título de Xbox Game Studios no es un mundo abierto, ni mucho menos, pero sus niveles tienen la amplitud suficiente para poder explorarlos y conseguir distintas recompensas, como coleccionables, ítems que nos servirán para mejorar aspectos de nuestro protagonista y más cosas, como pueden ser engranajes. Esto último es crucial y nos lo encontraremos tanto repartido por los escenarios como a la hora de romper cajas y otros objetos. Básicamente, estos engranajes nos sirven como moneda de cambio y podremos canjearlos en una suerte de tienda en la que podemos adquirir nuevos ataques, ataques especiales, objetos que nos ayudarán en nuestro progreso y mejorarán ciertas características, y unos chips que básicamente son mejoras que podremos ir equipando, siempre teniendo en cuenta los espacios habilitados que tengamos, a modo de ventajas pasivas.
A nivel sonoro y visual es, simplemente, espectacular
Como veis, no todo va a ser machacar a nuestros enemigos y Hi-Fi Rush nos presenta una propuesta completa que ha llegado con mucha fuerza, aunque tenga sus puntos algo más flojos (que son muy pocos, la verdad); algo que también ha logrado con un aspecto visual brutal y que, incluso, me recuerda al estilo de animación visto en Spider-Man: Into the Spider-Verse, que se mezcla con un estilo artístico cel-shading. Su apartado gráfico brilla con luz propia en personajes y escenarios, lo que hace que lo que puedan tener de repetitivos todos estos elementos sea algo menor y al final no se tenga tan en cuenta porque todo lo demás lo compensa con creces.
Volviendo a la dificultad del título, si bien a veces puede ser algo más exigente, estamos ante un juego muy accesible para todo tipo de públicos y este nos ofrece varias opciones para hacerlo incluso más accesible. Antes ya he mencionado sus patrones visuales que nos ayudarán a poder seguir el ritmo con más soltura, por lo que al final la experiencia es muy personalizable para cada uno. Según lo fácil que te quieras poner la aventura, el juego te durará más o menos, y en mi caso, que me fui parando más de la cuenta para prestar atención a los detalles y obtener mejores puntuaciones en los combates (no me escondo), he tardado en completarlo unas 15 horas aproximadamente. Por otro lado, algunos compañeros ya indicaban que este duraba unas 10 horas, por lo que esto refuerza la idea de que la duración, en todos los juegos prácticamente, es algo muy subjetivo.
Ahora sí, antes de acabar, es imposible no hablar del que es uno de los apartados más importantes del juego: el sonido y la música. ¿Qué decir de él a estas alturas? Pues lo que ya habréis oído, todo esto funciona de forma magistral durante la aventura, y más teniendo en cuenta que estamos ante el que es el hilo conductor principal de la propuesta. En este caso, podemos meter tanto a los efectos de sonido como a su banda sonora en un solo saco y ponerle un sello de "espectacular", porque es una gozada repartir golpes e ir pegando saltos por ahí al ritmo de la canción de turno, una que también marca nuestros pasos y todo lo que nos rodea. Hablando de su banda sonora, esta está compuesta por temas licenciados de The Prodigy, The Black Keys, Nine Inch Nails o Wolfgang Gartner, por ejemplo; pero también contamos con temas creados para la ocasión y que no desentonan en ningún momento.
Antes de terminar, una breve mención a lo que considero que es una gran muestra de atención al detalle y mimo que se le ha dado a Hi-Fi Rush. Estoy hablando de su doblaje al castellano, que es excepcional y cuenta con actores de la talla de Mario García, quien le da voz al propio Chai y es más que conocido por ser quien le da su voz al Spider-Man de Tom Holland en el UCM, entre otros.
Conclusión: Hi-Fi Rush entremezcla la acción y el ritmo de forma brutal y casi todo en él sorprende para bien
Dicho todo esto, creo que queda claro que Hi-Fi Rush me ha parecido un juego espectacular en prácticamente todo lo que hace. El juego de Tango Gameworks y Bethesda para Xbox Game Studios es una de las propuestas más frescas y divertidas que te puedes echar a la cara ahora mismo, gracias a su combate y el uso que le da a su banda sonora, siendo esta el principal hilo conductor de nuestra aventura. No, este no inventa la rueda, pero la usa que da gusto y jugarlo es una experiencia que realmente es más que satisfactoria, aunque no sea un juego perfecto y tenga sus pequeños "problemas".
En definitiva, y gracias también a su apartado visual excepcional y un doblaje perfectamente llevado, tenemos entre nosotros lo que es uno de los grandes juegos de este 2023. Seguro que hace dos semanas nadie esperaba ver un juego que mezcla acción y ritmo con unas valoraciones tan altas, pero Hi-Fi Rush he llegado apuntando a lo más alto, tanto en PC como en Xbox Series X|S.
Hi-Fi Rush es una propuesta que ha llegado sin esperarla y ha conseguido conquistar el corazón de gran parte del público, entre los que me incluyo. Estamos ante un juego de acción y ritmo, con zonas de plataformeo, que hace casi todo bien, lo que nos permite pasar mayormente por alto sus pequeños problemas, que ya de por sí son muy pequeños. En definitiva, lo nuevo de Tango Gameworks es un juego muy fresco que nos lleva a una aventura divertida y repleta de acción, la cual está protagonizada por unos personajes que, sin duda, están preparados para saltar al estrellato.
Es una de las propuestas más frescas que he jugado en mucho tiempo
Mezcla la acción y el ritmo de forma sublime
Ser precisos se recompensa siempre y no se penaliza no serlo
La trama no es gran cosa, pero su narrativa simple funciona de maravilla
Luce un sentido del humor muy tontorrón que pega totalmente con el juego
El elenco de personajes es brillante
Los combates contra enemigos y jefes son lo que cabe esperar y más de un juego así
La exploración siempre se premia y de formas variadas
Su banda sonora es un acompañante perfecto para la aventura
Su aspecto visual es muy, pero que muy, bueno
Su doblaje al castellano está muy cuidado
Peca de ser algo repetitivo en sus escenarios y algunos enemigos
Una trama más que vista en otros productos audiovisuales
El plataformeo y los puzles, aunque cumplen, no son lo mejor de este juego
Jak and Daxter siempre ha sido una de mis sagas favoritas, luego llegó NieR: Automata y me rompió por dentro. Por suerte, ya estoy recuperado e intento jugar y escribir siempre que puedo.
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