Mucho se ha hablado de Stellar Blade en los últimos meses, y lamentablemente en pocas ocasiones por lo que debería de importarnos. Se han escrito ríos de tinta a raíz del físico de su personaje protagonista, una mujer exuberante que llena la pantalla gracias a su sensualidad y por qué negarlo sería una tontería, por la evidente carga sexual que destila su diseño. A pesar de que llevamos ya años con personajes descaradamente sexualizados como Bayonetta o la protagonista de NieR: Automata en el sector de los videojuegos, la polémica está servida.
Con la llegada de EVE y Stellar Blade, sin embargo, se ha generado un debate dentro de una industria que parece sorprendida de sí misma por la existencia de este tipo de personajes que nunca han dejado de estar presentes en cualquier medio audiovisual. Sin embargo, las sensibilidades cambian, y por suerte también la conciencia social, que abre debates respecto a temas que antes no se generaban. A título personal, me parece bien, pero es innegable que el sexo vende, ayer, hoy y también lo hará mañana.
El problema y el error que se puede cometer en estos casos, es reducir toda una obra como Stellar Blade al físico de su protagonista, tanto en lo positivo como en lo negativo, ya que el título de Ship Up esconde mucho más que un fondo de armario tan variado como sensual para EVE. Así que, vamos a ello, a analizar a fondo lo que nos ofrece este título coreano más allá de la ya tan comentada polémica.
Más allá de la polémica
Me atrevería a decir que la demostración publicada en PlayStation Store hace unas semanas le hizo mucho bien al título, otorgando la posibilidad de mostrar algunas de las bondades jugables de Stellar Blade más allá de lo visto en diferentes trailers. Publicar una demo es un arma de doble filo, pues puede salir tan bien como mal si el equipo de desarrollo no escoge una parte jugable atractiva que deje al jugador con ganas de más. En este sentido Stellar Blade acertó, posibilitando disfrutar de los primeros compases de la aventura y terminando de forma sublime con el combate contra un espectacular jefe.
Ahora, con una idea completa ya de lo que ofrece realmente la obra de Shift Up, llega el momento de valorar el juego como merece para saber, hasta qué punto es destacable el nuevo título exclusivo de PlayStation 5.
Este es un análisis que se me antoja complicado, ya que Stellar Blade es un título que he disfrutado muchísimo, que me ha parecido variado, muy divertido y frenético, pero a su vez, también me ha parecido que está lejos de alcanzar la excelencia que se suele esperar de títulos triple A, pecando de genérico e intentando implementar muchas cosas ya vistas en otros títulos.
Por ejemplo, y aún sabiendo que son detalles que al final no lastran al título, no deja de sorprenderte las claras referencias que utiliza Stellar Blade sobre otras propiedades intelectuales muy conocidas. Durante mi partida he visto detalles reconocibles de obras como Tomb Raider, NieR: Automata, Assassíns Creed, Bayonetta o Sekiro, aunque, por suerte y sorpresa, he de reconocer que Stellar Blade consigue tener personalidad propia. No obstante, es cierto que muchas características que identificamos en él, ya están implementadas en otros muchos títulos, aunque quizás de forma más sutil. En ocasiones Stellar Blade se siente como una mezcla de muchas propuestas ya existentes, dejando claro que la originalidad no es un bien muy presente en el equipo de desarrollo de Shift Up.
¿Aspecto técnico triple AAA?
El título alcanza un buen nivel en todos sus apartados, y de hecho algunos de ellos podrían rozar la excelencia, sin embargo, Stellar Blade es un título de contrastes. Por ejemplo, a nivel visual y técnico el título cumple, con variedad es sus biomas, unos escenarios bastante atractivos, llenos de detalles y efectos, que tendremos que explorar a fondo si queremos hacernos con todos los secretos que estos esconden, un diseño artístico que en ocasiones incluso asombra, y un diseño de enemigos que me ha sorprendido gratamente y por el cual personalmente no daba un duro.
En cuanto al rendimiento, no hay problemas: los 3 modos gráficos disponibles nos otorgan la posibilidad de jugar a Stellar Blade a 30fps a resolución 4k, o a 60fps con diferentes resoluciones. En lo que a mí respecta, he disfrutado de la aventura en el modo equilibrado sin ningún tipo de problema en cuanto al rendimiento, disfrutando de una resolución mayor y con una estabilidad en las imágenes por segundo bastante rocosa.
El diseño de sus personajes principales es correcto, sin grandes alardes, pero con un trío protagonista que luce a un buen nivel, sobre todo en lo referente a Adam e EVE. Sin embargo, pese a sus bondades, su motor gráfico se siente añejo, el título cuenta con algunas de texturas de poca calidad, luce unos NPC dignos de hace dos generaciones y nada en él hubiera impedido su lanzamiento en consolas de la anterior generación. Nada, absolutamente nada. Ni siquiera en la tan mencionada rapidez de la que alardea el disco duro de PS5 al que este título no saca partido, con unos tiempos de carga que deberían de ser prácticamente inexistentes, y que no lo son. Si que es cierto que al menos Stellar Blade saca partido a las bondades que ofrece el Dualsense, aunque tampoco es algo que no hayamos visto ya en otras obras exclusivas implementado de forma más espectacular.
Así pues, que la propia Shif Up alardee de su carácter triple A, hace que me sienta especialmente obligado de avisar que Stellar Blade no alcanza la calidad de un triple A como pueden ser Red Dead Redemption 2, Horizon Forbidden West, God of War Ragnarok, Elden Ring o The Last of Us 2, y no solo en apartado técnico, si no en todos en general. Algo que por otra parte estoy seguro que muchos pudisteis constatar al disfrutar de su demostración jugable.
Pero, ¿entonces, qué?
¿Significa esto que es malo? Nada más lejos de la realidad, pero hay que ser conscientes de donde partimos y ser justos, sobre todo, si alardeas de que los recursos invertidos en su desarrollo y marketing están al nivel de algunas de las mayores obras de la industria.
Siguiendo con el resto de apartados, el sonoro y el jugable son quizás los más destacables, con algunas partituras especialmente buenas y con una banda sonora que hace acto de presencia en todo momento. La variedad de esta, sin embargo, sí que me ha parecido más escasa de lo que esperaba, y algunas partituras son demasiado parecidas entre sí. Por otra parte, el doblaje al castellano sigue el mismo patrón, es bueno, sin llegar a la excelencia a la que nos acostumbran los exclusivos de PlayStation.
Donde si voy a defender el título a capa y espada es en su sistema de combate, que resulta muy desafiante, pero a su vez también, muy disfrutable. Este es su eje principal y donde se nota que el equipo de desarrollo sí que ha invertido mucho mimo y cariño, con aspectos muy cuidados y con tempos muy acertados que hacen que la técnica del jugador tenga verdadero peso en la experiencia, sin dejar demasiado margen a la suerte. El parry es verdaderamente disfrutable y en ocasiones es sencillo que nos venga a la memoria Sekiro, salvando por supuesto, las distancias. Este es sin duda el apartado que le confiere de mayor personalidad al título y que lo diferencia del resto de alternativas del mismo estilo.
Durante mi partida, ha habido varios enfrentamientos contra jefes que he tenido que repetir en numerosas ocasiones antes de poder derrotarlos, sacándome de mis casillas varias veces. Por suerte, el sistema de combate está tan bien diseñado, que como ya he comentado antes, no es un juego que se pueda sentir injusto. Stellar Blade premia la habilidad del jugador, que, por otra parte, será fundamental durante sus batallas más complicadas.
Esto resultará muy atractivo para aquellos que sepan disfrutar de esa dificultad añadida, pero también hará que algunos puedan sentir cierto rechazo ante una obra que puedan temer no completar. Los frenéticos combates no nos dejarán demasiado margen para esquivar, bloquear o utilizar habilidades concretas según el ataque del enemigo. Nuestra respuesta tendrá que ser rápida si queremos salir con vida de las contiendas y un solo error puede llevarnos a tener que repetir dichas disputas desde el comienzo.
El aspecto souls sin embargo se disipa en la obra final casi por completo salvo algunos pequeños detalles, como que los enemigos reaparezcan cuando descansamos en un campamento, y como no, por lo desafiante que resulta enfrentarse a ellos.
Más allá de eso, el juego no te penaliza por morir, no hay barra de stamina, y podemos escoger la dificultad del título, pudiendo optar por un modo más sencillo que nos dará pistas en pleno combate. Os aseguro, aun así, que el modo normal ya hará que los jugadores más virtuosos en este tipo de juegos puedan regocijarse de sobremanera con los desafiantes enfrentamientos contra los jefes.
Y eso que EVE podrá prepararse a conciencia para los combates con diferente equipo que mejorará nuestras habilidades y stats. De entre los 12 huecos de equipo con los que contamos, 6 de ellos mejoran los atributos de EVE y 3 de ellos modificarán la apariencia de nuestro personaje, además de otros 3 que tendrán efectos estéticos sobre personajes que nos acompañan durante la aventura. La cantidad de equipo disponible se irá desbloqueando a medida que vayamos avanzando en la aventura, así como los diferentes árboles de habilidades, que, de un total de 5 disponibles, en un primer momento tan solo tendremos acceso a 2 de ellos. Por lo demás, el juego no reinventa nada, y tampoco lo pretende, el viaje resulta gratificante, entretenido y por momentos sumamente divertido, a pesar de que en ocasiones nos veremos envueltos en puzles más típicos de juegos de hace demasiados años que chirrían un poco al verlos en juegos actuales.
Un MUY buen videojuego
Para completar la obra necesitaremos unas 20 horas, pero cuenta con contenido secundario que puede aumentar de forma considerable esa cifra. No obstante, llegado a cierta parte de la aventura, las misiones secundarias que se desbloquearán para EVE, algunas de ellas son bastante interesantes, mientras que otras son las típicas misiones de recadero tan manidas y vistas en otros juegos. Lo que es admirable en Stellar Blade es que el juego ha llenado su universo de puntos de interés, objetos y secretos que encontrar, haciendo que explorar las diferentes ubicaciones siempre resulte atractivo y entretenido para el jugador.
Más allá de los coleccionables, podemos decir que están presentados de forma muy atractiva, como latas de diferentes bebidas que podremos encontrar, o los tan espectaculares trajes de EVE. Estos, además de estar repartidos por los escenarios, los podremos desbloquear en las diferentes tiendas existentes según vayamos aumentando la afinidad con los vendedores, que irán exponiendo nuevos productos a medida que nos vayamos ganando la simpatía de estos. También habrá ciertos objetos que en caso de obtener nos aumentarán por ejemplo la vitalidad máxima de EVE o la barra de energía beta.
A nivel argumental, volvemos a tener un apartado que alcanza un buen nivel pero que no destaca, con una historia que, pese a ello, cuenta con un par de giros que hacen que se siga con interés en todo momento. Nuestra misión será proteger la ciudad de Xion, ultima cuna de la humanidad de los Naytibos, unas criaturas que parecen buscar la extinción de la raza humana.
Conclusiones
Que nadie se lleve a equivoco, sé que quizás el texto del análisis pueda resultar algo negativo o algo pesimista en términos generales, y la sensación que os traslade no sea la de un juego merecedor de la nota que le he puesto, quizás, por mis altas expectativas puestas en un título que ha resultado ser MUY BUENO, pero no excepcional, un imprescindible que es, por otra parte, lo que yo esperaba encontrar en el título de Shift Up.
Stellar Blade vuelvo a repetir, es un muy buen videojuego que pese a ello, no consigue brillar con fuerza suficiente más allá de un apartado jugable, que por lo desafiante que resulta, además, no será disfrutable por todo el mundo. A pesar de sus aspectos positivos, como exclusivo de terceros de PlayStation 5, queda por debajo de la calidad habitual de las obras de los estudios principales de SonyPlayStation. Sin embargo, no negaré que es una experiencia que he gozado enormemente pese a las sombras que ya he ido comentando durante el análisis. Lo que más me anima de Stellar Blade, es que es una propiedad intelectual que tiene muchísimo potencial. Una futura entrega corrigiendo sus errores y puliendo sus diferentes apartados podrían dar lugar con un poco de más esfuerzo con un verdadero triple A que justifique esa categoría, algo que a Stellar Blade, a mi parecer le falta un poco para poder alcanzar.
Stellar Blade nos deja una de las mejores experiencias de acción que se pueden disfrutar a día de hoy en PlayStation 5, con un título que alcanza un muy buen nivel en todos sus apartados. Pese a contar con suficiente personalidad propia, el juego incluye detalles que nos traen al recuerdo otras obras de forma demasiado recurrente. Eso unido a otros detalles como un apartado técnico que podría ser mejor, hacen que para mí, Stellar Blade no alcance por poco la categoría de sobresaliente.
Gráficos
Diversión
Duración
Historia
Es variado y muy divertido
La personalización de EVE
Técnicamente a veces sorprende
La estabilidad del juego
La variedad de escenarios y la amplitud de algunos de estos
El sistema de combate
La parte final de la aventura
El doblaje está bien...
....pero podría ser mejor
Técnicamente se siente añejo, con detalles como los NPC que son muy mejorables
Algunos puzzles y propuestas jugables son propias de juegos de hace años
No cuenta con nueva partida + (finalmente, tras la publicación de este análisis, el equipo de desarrollo ha confirmado que sí lo tendrá de lanzamiento)
Duración: 20 horas para la historia principal, unas 30 para completarlo al 100%
Alumno y prefecto de la casa Hufflepuff del colegio Hogwarts de magia y hechicería. Simpatizante de la casa Stark y tributo del distrito 4. Mi elemento es el agua, y por ello, formo parte de erudición.