Blizzard ha publicado hoy la beta cerrada de la versión 2.6.0 de Diablo III, donde entre varias novedades nos encontramos con la llegada del nigromante. Durante el tiempo que dure esta beta, quienes hayan tenido la suerte de acceder a la prueba podrán probar esta nueva clase, que la compañía define como "poderosos hechiceros que arrasan a sus enemigos mediante maldiciones y reanimaciones, así como con una obediente horda de mascotas. Esta nueva clase emplea un estilo de juego controlado que utiliza las materias primas de la vida: sangre y hueso".
En las notas del parche nos encontramos con más novedades, como las denominadas fallas de desafío, que son mazmorras estáticas cuyas configuraciones cambian semanalmente, utilizando las configuraciones creadas por la comunidad, siendo accesibles tanto desde el modo aventura como desde la campaña. Además, en el modo aventura están disponibles dos nuevas zonas, Las Ciénagas y El Templo de los Primogénitos, a las que podemos acceder utilizando un transportador en el mapa del Acto II.
Por último, en las mazmorras de conjunto se ha mejorado la interfaz para explicar mejor los requisitos necesarios para completar los niveles, y en el Acto IV se han añadido cuatro nuevos transportadores. Desde ellos podremos presenciar las consecuencias inesperadas de la batalla entre los nephalem y Diablo en los Altos Cielos, con nuevos contratos que completar.
CONTENIDO RELACIONADO
La comunidad está en duda pues aún no se ha hecho oficial el anuncio del supuesto 'Call of Duty Black Ops V'
Epic Games ha dado un golpetazo en la mesa para anunciar antes de tiempo todos los contenidos de la colaboración
La última entrega de los simuladores de fútbol de Electronic Arts se podrá obtener por la cara este mismo mes de mayo
La próxima gran actualización del título de Bethesda promete más de lo que parece
Se trata de una opción que nos pondrá la vida mucho más fácil en cuanto vea la luz
El juego desarrollado por Guerrilla abandonara el catálogo de suscripción de la plataforma pronto y los creadores mantienen el silencio