Estar en el ojo del huracán mediático es una posición de gran riesgo para cualquier compañía. Aunque bien es cierto que una controversia determinada provoque que el foco de atención se pose sobre alguna empresa, cualquier paso en falso puede convertirse en toda una avalancha de críticas y quejas. Así y con esa ironía que a veces nos deja la vida, existe una multinacional cuyo nombre es definitorio de su propia situación: es ni más ni menos que Blizzard la que se encuentra peleando por salir viva de la fuerte ventisca que se ha creado en torno a las polémicas de Hong Kong.
La cosa es que tras una serie de acciones por parte de uno de los jugadores y el caster de Hearthstone que protestaron en torno a la situación política que vive la región asiática, Blizzard decidió suspender a los mismos. Una decisión que a día de hoy la compañía no revocará y que defiende asegurando que no fue tomada desde la censura ni desde el deseo de cohartar la libertad de expresión, tal y como afirmaba el CEO de la compañía, J. allen Brack, a los compañeros del portal PC Gamer:
''Contamos con una larga trayectoria a la hora de defender la libertad de expresión como uno de los puntos claves de nuestra cultura empresarial. Si piensas en toda la gente que trabaja con nosotros, los jugadores profesionales que juegan en nuestras ligas o en cualquier otra persona que participe en nuestra área de eSports, verás que cuentan con total libertad para expresarse como quieran a través de sus redes sociales. Creo que tenemos una serie de políticas mucho más abiertas en ese sentido que aquellas otras compañías que dedican muchos esfuerzos a que su gente se adhiera a un mensaje concreto. Así es como queremos contextualizar y dar forma a nuestra visión con respecto a la libertad de expresión''.
Una vez más, la motivación principal a la que Blizzard achaca la decisión de suspender a dichos jugadores reside en la idea de que su mensaje desvirtuaba una de las máximas de sus competiciones: lograr que los torneos se encuentren centrados puramente en los juegos sobre los que se compite.
Sea como sea, estamos ante tiempos más que duros para Blizzard; sobre todo si tenemos en cuenta que la compañía realizó hace bien poco algunos de los anuncios más importantes de sus últimos años, entre los cuales destacan el desarrollo de los futuros Overwatch 2 y Diablo IV.
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