La guerra entre Rusia y Ucrania podría afectar al stock de PS5 y Xbox Series X/S

Los expertos advierten de que el conflicto retrasará aún más el incremento en la producción de algunos de sus componentes

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Siempre encuentro mucho conflicto interno a la hora de hablar sobre la guerra entre Ucrania y Rusia desde la perspectiva de los videojuegos por una razón: sentir que es un tema con el que no se debe frivolizar. Sin embargo, es alentador ver cómo la industria del videojuego se ha ido volcando en apoyo al país que ha sido invadido y, sobre todo, observar cómo hay mucha vida y ganas de paz tras los juegos que tanto nos gustan. No obstante, este conflicto tendría efectos negativos más allá de lo obvio; concretamente, en el stock de PS5 y Xbox Series X/S.

La cosa es que, tal y como han recogido los compañeros del portal Reuters, los intentos de aumentar la producción de PS5 y Xbox Series X/S en los próximos años estaría en peligro por culpa de la guerra. A continuación, os explico por qué de forma rápida y sencilla en una lista de puntos clave.

  • Los fabricantes han alertado de la situación en relación a la producción de tarjetas gráficas o chips necesarios para crear PS5 y Xbox Series X/S
  • El problema es que la fabricación de dichos chips necesita de gas de neón
  • Ucrania exporta entre el 45 y el 54% de este material en todo el planeta
  • Si Rusia atenta contra los principales suministradores del país, el proceso de creación de chips quedará ralentizado en gran medida
  • Además, cabe destacar que la recuperación no será inmediata si los equipos de los suministradores quedan dañados por la guerra
  • Se estima que se tardaría dos años más en corregir la situación si esta llega a darse
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Parece que la nueva generación protagonizada por PS5 y Xbox Series X/S lo sigue teniendo terriblemente difícil para arrancar o, al menos, más de lo que sería deseable. Habrá que ver qué acaba ocurriendo y cómo termina la cosa a medio plazo.

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Crecí rodeado de naturaleza y campos de trigo, pero con la cabeza llena de historias sobre dragones y planetas lejanos. Después me hice psicólogo para poder fascinarme con las historias de los demás.

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