Primeras impresiones de Donkey Kong Bananza - En serio: no estáis preparados para este juego

Vaya p**to juegazo. Eso es lo que he pensado justo después de ver el primer tráiler de Donkey Kong Bananza en el Nintendo Direct especial de Nintendo Switch 2 y eso es lo que he pensado también justo después de probarlo gracias a una demo exclusiva del juego. No hay dudas al respecto: si el juego se acaba correspondiendo con los 30 minutos del mismo que he podido disfrutar en este evento especial, ya tengo mi candidato a GOTY 2025 y a continuación os cuento por qué.

Como Super Mario, pero hasta las cejas de taurina

Si voy a comenzar a hacer una comparación directa con Donkey Kong Bananza y Super Mario es porque es evidente que este último se ha inspirado mucho en los títulos en tres dimensiones del fontanero; sobre todo, centrándose en los que han visto la luz de manera más reciente. Y, si digo esto, es porque la nueva entrega del personaje es una en la que se premia la curiosidad por encima de todo: en cada rincón, cada esquina y recoveco del escenario al que te enfrentas hay algo por descubrir. Incluso en aquellas situaciones en las que tu mente emite un ¨no creo que allí haya nada¨ el juego permia tus intenciones de demostrar que estabas equivocado.

El nivel que pude probar en la demo, el cual se conformaba como una amplia zona repleta de otras áreas a modo de bonus extra, coleccionables de todo tipo y personajes que conocer, deja claro que Bananza es un juego sobre descubrir los espacios que recorremos, pero también la forma en la que nos movemos a través de los mismos.

Y es que, si el repertorio de movimientos de Super Mario se encuadran dentro del típico set de salto, culatazo, salto triple, salto en pared y salto reverso, en Donkey Kong Bananza se sustituye el término ¨saltar¨ por el de ¨romper¨. De esta manera, prácticamente el 80% del terreno que ves dentro de un nivel es totalmente destructible, lo cual te conduce a falsas paredes que ocultan un secreto detrás o niveles subterráneos escondidos que solo serán descubiertos por aquellos dispuestos a aporrear el suelo machacando el botón B como si no hubiera un mañana.

Y es que todos y cada uno de los movimientos que tiene Donkey Kong en este juego se encuentran encaminados a ofrecer una experiencia que sucede a toda velocidad: desde ir rompiendo a puñetazos todo lo que se te cruza por tu camino hasta arrancar una roca del suelo y usarla como un simulacro de ¨skate¨ por el que moverte mucho más rápido por el nivel. Algo así como si fuera un Super Mario Odyssey, pero puesto hasta las cejas de Monster.

¿Posible GOTY 2025?

Quizás aún sea demasiado pronto como para lanzar unas conclusiones sobre la posibilidad de verlo en muchas listas de los GOTY 2025, pero es evidente que Donkey Kong Bananza es un juego encaminado a sorprender. Hacía tiempo que no jugaba a un juego que te recompensara tanto por volverte loco y convertirte en un avatar del caos; hacía mucho tiempo que no jugaba a un plataformas en 3D que reclamase su propio terreno con tanto desparpajo dentro de un género que muere y vuelve a la vida cada pocos años. Y, la verdad, con juegos así, cualquiera se poner a decirle algo a Nintendo con respecto al catálogo de títulos que tiene bajo la manga para Nintendo Switch 2 en este 2025.

Probablemente, estas impresiones hayan sido más breves de lo que cabría esperar de un juego de esta importancia para el futuro de la gran N, pero creo que esto es algo que habla muy bien de su propuesta. No hace falta que lo defienda en este momento; ya lo hará el solito cuando salga el 17 de julio para recordarte que aquel loco que te describía este juego como el próximo gran bombazo de Nintendo acabó teniendo razón.