The Tomorrow Children - Avance

Gracias a Sony hemos tenido en nuestras manos la Alpha de The Tomorrow Children, y desde Areajugones estamos ansiosos por contaros cuales han sido nuestras primeras impresiones sobre el título.

Como ya sabéis, The Tomorrow Children se trata de un exclusivo para PlayStation 4 que fue mostrado por primera vez durante la Gamescom de Alemania. Desde su primer anuncio ya se presentaba un juego bastante peculiar ambientado en una sociedad comunista, en la que se combate, se construye y se trabaja juntos por la gloria de todos.

Esta ideología comunista está más que presente durante todo el juego, ya que nuestra partida se verá altamente beneficiada o perjudicada por la colaboración de nuestros compañeros online. Al comienzo del juego podremos elegir entre distintas clases de trabajadores: ciudadano, minero, comandante ingeniero, oficial de radio y combatiente. Una vez elegido nuestro personaje, nos aparecerá una pantalla de carga en la que se expondrán varios carteles de propaganda en los que se nos anima a votar a distintos alcaldes para la ciudad. El alcalde elegido influirá en varias características de nuestra ciudad, como la duración de la noche, la cantidad de recursos recogidos, nuestra velocidad de movimiento u otros aspectos.

¿De qué trata realmente The Tomorrow Children?

Cuando nos dan los controles de nuestro personaje aparecemos en una pequeña ciudad con un fondo blanco. Parece que estuviésemos en la mismísima nada. Todas las ciudades en las que aparezcamos dispondrán de unos edificios y estructuras fijas. Sin embargo, podremos construir nuevas edificaciones con herramientas como taladros, bloques y escaleras. La ciudad se compondrá de un Ministerio de Trabajo, al que acudiremos para ganar tickets que se utilizarán como moneda de cambio para comprar objetos. Además de tickets, podremos utilizar dinero (que encontraremos por el suelo de vez en cuando) para comprar en el mercado negro. Los tickets serán utilizados en distintos puestos de venta asignados a cada clase de trabajador, aunque podremos comprar en puestos que no correspondan con nuestra clase. Todos estos objetos van desde herramientas útiles en nuestras excavaciones hasta armas como dinamita, lanzacohetes e incluso jetpacks o gafas de visión nocturna.

El juego gira en torno a nuestra ciudad, por lo que deberemos acudir a ella para depositar los recursos que hayamos obtenido minando, deberemos realizar minijuegos como el de la máquina de correr para aportar energía a la ciudad y, por supuesto, deberemos defenderla de los ataques enemigos. Estos enemigos se materializan en tres tipos de monstruos: arañas mecánicas, unos monstruos enormes con aspecto de dinosaurio y monstruos voladores que lanzan explosivos. También dispondremos de una máquina en la que podremos construir objetos como los ya mencionados, además de otros como vehículos aerodeslizadores o cañones para eliminar a los monstruos que acechan nuestra ciudad. Para construir estos objetos, además de utilizar recursos, deberemos completar un pequeño rompecabezas dentro de un tiempo determinado.

¿Cuál es nuestro trabajo?

Realmente podremos ayudar a la ciudad de la manera que queramos, aunque la clase que hayamos elegido nos ayudará a realizar unas tareas determinadas. El ciudadano es el trabajador más equilibrado, sin ninguna fortaleza ni debilidad concreta. El minero tendrá una mayor velocidad de trabajo y será capaz de transportar más objetos al mismo tiempo. El comandante ingeniero está más capacitado en excavación y combate. El oficial de radio tendrá mayor velocidad de movimiento y estará especializado en la exploración. Por último, el combatiente tendrá más vida y se encargará de defender la ciudad de los ataques enemigos. De todas formas, si nos interesamos por una habilidad sobre la cual flojeamos debido a nuestra clase, podremos mejorarla al subir de nivel.

La ciudad dispone de una población, la cual puede aumentar al depositar una especie de vasijas en unas plataformas de la ciudad. Al depositar estos "jarrones", estos se convertirán en personas (NPCs) que deambularán por la ciudad. Nuestra población disminuirá si los monstruos enemigos se acercan a nuestra ciudad, por lo que evitar que esto suceda es de máxima prioridad, ya que si perdemos a toda la población, nuestra ciudad quedará destruida y deberemos empezar una nueva ciudad desde cero.

El ambiente de la ciudad

Nuestra ciudad estará repleta de carteles y vídeos alentándonos a trabajar más para las "vacas flacas" y a cooperar con nuestros compañeros para cumplir todos nuestros objetivos. Hay elementos muy curiosos en la ciudad que ayudan a crear una ambientación más creíble, aunque a veces (muy pocas) se pueden convertir en desesperantes. Entre estos elementos están las colas que deberemos realizar si otro jugador está comprando en el mismo puesto al que queremos ir nosotros, los autobuses con sus horarios que nos llevarán desde la ciudad hasta las minas para trabajar o las campanas que podremos tocar para animar a nuestros compañeros.

La ciudad dispone de un perímetro determinado. Si traspasamos ese perímetro nos hundiremos como si de arenas movedizas se tratase y moriremos. Para solucionar esto, se pueden construir puentes para llevarnos a las minas o a los monstruos caídos donde podremos encontrar recursos. La muerte es otro elemento que aporta más implicación por parte del jugador, ya que si morimos, deberá reanimarnos un compañero (cosa que rara vez ocurre) o tendremos una penalización de tickets si queremos revivir por nuestra cuenta.

Para desplazarnos a largas distancias dispondremos de los vehículos aerodeslizadores, mientras que en las minas podremos utilizar los jetpacks para acceder a zonas más altas rápidamente. La oscuridad también es un elemento importante en el juego, ya que nos debilita rápidamente. Para evitar esto deberemos acercarnos a una fuente de luz, cosa fácil en la ciudad, pero si se nos hace de noche en una mina deberemos haber traído con nosotros una linterna o tener la suerte de encontrarnos con una seta luminosa.

Impresiones finales

The Tomorrow Children nos ofrece un juego de mundo abierto ambientado en una sociedad comunista, por lo que la cooperación será la clave de nuestro éxito. Es una experiencia única y con cierto tono humorístico que nos puede divertir mucho, sobre todo si tenemos unos cuantos amigos con los que construir una ciudad a nuestro gusto. Al igual que muchos otros títulos recientes, se apuesta por una experiencia basada en lo social, por lo que si te gusta jugar en solitario quizás este no sea el mejor juego para ti (a menos que quieras conocer a otros jugadores).

Todavía faltan por pulir unas cuantas cosas (como el sistema de excavación o que de repente aparezca otro jugador de la nada y te quite los recursos que acabas de minar), pero se nota que es un título que engancha, del que quieres saber cada vez más para construir nuevos artefactos o conseguir mejores armas. En definitiva, es una gran apuesta por parte de Sony, que da un aire fresco uno de los géneros más explotados recientemente.