Heráclito dijo una vez: “Todo cambia, nada permanece”. El tiempo es ese algo que no se ve ni se toca pero que sabemos que está ahí y que pasa sin que nos demos cuenta. Aunque para nuestro polluelo Toki Tori, el tiempo no es un problema pues con el transcurso de los años sigue estando igual de joven y entrañable que siempre. Y es que ya han pasado quince años del lanzamiento del primer Toki Tori para Game Boy Color en 2001.
Un título que ha ido evolucionando a lo largo de los años y cuya segunda entrega aparecida en 2013 tanto en PC como en Wii U supuso un gran cambio sobretodo en la jugabilidad. Ahora, tres años más tarde, Two Tribes Games lanza para PlayStation 4, la versión que vamos a analizar, la versión 2+ que incorpora algunas novedades respecto de la original.
Os presentamos a Toki Tori, un simpático y entrañable polluelo al que se le ha encomendado una importante misión: destruir el cristal causante de la aparición de una extraña sustancia oscura que surge del subsuelo y está provocando que su mundo se vaya al traste. Así, debemos salvar a nuestros semejantes de una muerte segura con el objetivo de restablecer la paz y el orden.
Con esta sencilla premisa, debemos acompañar a nuestro amigo Toki Tori por multitud de niveles interconectados de manera fabulosa y distribuidos por diferentes mundos en los que el agua, el fuego o las sombras serán algunos de los principales enemigos que nos encontremos. Pero podéis estar tranquilos, ya que Toki (ya podemos tratarle con confianza) cuenta con dos habilidades que harán de esta odisea un juego de niños…
Toki Tori 2+ es un título que si bien en los primeros compases puede parecer una fusión entre puzle y plataformas, cuando llevamos un buen rato a los mandos nos damos cuenta de que no es así. Nos encontramos ante un juego de puzles de la vieja escuela pero que adopta elementos de los juegos de plataformas más castizos, como la vista lateral en dos dimensiones o enemigos cuyos movimientos siguen un sencillo patrón de movimiento.
Con un tutorial que prácticamente brilla por su ausencia y solamente ayudados por los mensajes telepáticos provenientes de las llamadas ranas antiguas, debemos comenzar la aventura probando por nosotros mismos los controles del juego, y ahí es cuando nos damos cuenta de que sólo nos harán falta dos botones para resolver todos los rompecabezas que se nos presenten. Y es que a nuestro pollo no le hacen falta más habilidades que la de silbar y pisotear.
Comencemos con la habilidad pisotón, la cual la activamos pulsando el botón círculo y que si bien no tiene mucho misterio, nos resultará más que útil cuando queramos que un enemigo caiga del techo, alejarlo de nosotros como en el caso de los cangrejos, o también romper zonas inestables para abrir estancias nuevas o caer a niveles inferiores.
¿Y qué sería de un juego protagonizado por un pollo si no podemos disfrutar de su ‘pío pío’? Ahí es donde entra en acción la habilidad silbido, la más graciosa sin duda y que nos será de más utilidad durante toda la aventura. Los silbidos se activan pulsando el botón X y dependiendo de la fuerza que empleemos al presionar el botón, realizaremos un silbido agudo y corto, en el caso de que demos un simple toque de botón; o un silbido grave y largo, si lo pulsamos hasta el final. Combinando cortos y largos conseguiremos activar melodías de silbido más específicas destinadas a ser utilizadas cuando se den unas condiciones concretas. ¿Queréis saber cuáles son? Vamos allá.
Combinando con acierto silbido y pisotón podremos conseguir por ejemplo que una plataforma venga hacia nosotros, hacer que los enemigos retrocedan o atraerlos hacia nuestra posición. Todo con el objetivo de abrirnos paso y resolver el próximo rompecabezas. Aquí es dónde quizás se eche en falta un modo cooperativo local u online. Podría resultar más que divertido resolver los puzles junto a un amigo, donde las risas estarían aseguradas.
Por último, para cerrar el apartado de la jugabilidad, hemos querido probar el funcionamiento del juego a distancia mediante una PlayStation Vita y tenemos que deciros que es simplemente genial. Los sencillos controles se adaptan muy bien a este sistema y os podemos asegurar que las sesiones de juego son mucho más duraderas si lo hacemos desde la comodidad de un sofá o una cama.
Por lo que habéis deducido tras leer estas líneas, si por algo destaca Toki Tori 2+ es por mezclar de manera brillante sencillez y diversión, características que se trasladan de igual forma a su apartado gráfico y sonoro.
Y como es costumbre empezar por el principio, comencemos por comentar el aspecto que lucirá Toki, un polluelo amarillo con forma de huevo y con un gesto simpático en su rostro que nos cautivará desde un primer momento.
Toki se desplazará por unos escenarios llenos de color pero sin llegar a estar sobrecargados de elementos, lo que se agradece pues de lo contrario no entraría en sintonía con la esencia del juego. Estos entornos estarán infestados de animales dispuestos a ayudarnos o a derrotarnos, con un aspecto tan collejo que en ocasiones nos dará cargo de conciencia derribarlos. Hay que mencionar que la versión 2+ incluye mejoras que se reflejan sobretodo aquí, pues nos encontraremos con una resolución de 1080p y 60fps que mostrarán todo lo mencionado anteriormente de una manera visualmente preciosa.
Toki Tori 2+ es una experiencia que invita jugarla de manera tranquila y relajada, y culpa de todo ello lo tiene su banda sonora, compuesta por melodías alegres pero sin ser estridentes y que irán adaptándose según el entorno en el que nos encontremos. Es más, en muchas ocasiones la música llega a cesar por completo para que nuestros oídos centren su atención en los efectos de sonido emanados de elementos del entorno como el agua, la hierba o los sonidos de los animales.
Si tuviéramos que resumir Toki Tori 2+ en dos palabras serían: sencillamente divertido. Palabras no escogidas al azar, pues describen con perfección lo que hemos encontrado: controles simples y escasos pero suficientes, multitud de puzles desafiantes pero no desesperantes y un apartado técnico que hace que ponerse a los mandos sea un auténtico placer para nuestros sentidos. Sólo deseamos desde Areajugones ver a Toki crecer otros quince años más para salvarle las plumas de nuevo.