Tras el notable Shadowgrounds, su secuela Survivor, y la trilogía Trine, una de las mejores en el terreno de las aventuras medievales independientes, el estudio finlandes Frozenbyte nos traen Shadwen, una nueva aventura que se ambienta en la época victoriana temprana y coge muchos aspectos de grandes sagas como Thief, Prince of Persia y el reciente Superhot. El resultado, como veremos en los siguientes párrafos, está lejos de ser tan llamativo como otros juegos del estudio pero puede ser una gran oportunidad para los que quieran un juego bastante diferente a lo habitual.
A diferencia de los dos últimos juegos de Frozenbyte, Shadwen es una aventura para un solo jugador aunque se centre en dos personajes bien diferentes. Por un lado está la protagonista, que da nombre al juego, una asesina despiadada que quiere acabar con el rey. En su cruzada encuentra a Lily, una pequeña niña huérfana que decide seguirla y recibir su ayuda a pesar de poder perder su inocencia por los actos de Shadwen.
Lily, además, protagoniza unas pocas misiones y una especie de tutorial de los controles, acciones y el rebobinado del tiempo que más adelante explicaremos. Cuenta con muy pocas acciones, al contrario que Shadwen, que es más diestra, puede saltar, lanzarse con cuerdas, asesinar, realizar pócimas venenosas, etc. El inventario es muy completo y la interfaz es bastante sencilla aunque para completar muchos objetos avanzados hay que ir recopilando otros objetos a lo largo y ancho de los escenarios, los cuales a veces son bastante repetitivos y es difícil orientarse.
La trama está bastante trabajada, con ciertas sorpresas aunque muchas de ellas sean algo tópicas en el género. De hecho aunque Frozenbyte ya haya trabajado en el campo de la fantasía medieval, se nota que este título es mucho más serio y personal. La mecánica de la aventura recuerda bastante a la saga Thief ya que debemos ir explorando los escenarios y evitando el encuentro con los guardias. Ante cualquier vistazo de ellos el juego habrá terminado y tendremos que rebobinar unos pocos segundos para poder realizar las acciones correctamente.
Para poder evitar a los guardias hay que ir por las sombras, subir a los tejados, ir de cuclillas, utilizar ganchos, realizar distracciones con barriles, botellas, etc. No obstante, si es necesario el asesinato contamos con muchas acciones posibles (aunque es posible superar el juego sin realizar ninguno), como envenenar ciertos objetos, empujar barriles explosivos, o incluso apuñalar aunque siempre hay que intentar recoger el cuerpo del enemigo para que no lo descubran.
Como punto destacable, la historia cambia si decidimos matar o no a ciertos enemigos, y la física de los objetos y enemigos está bien implementada, no así el propio movimientos de ambas protagonistas o de los guardias, que es algo mecánico y simple. Eso si, sorprenden ciertas acrobacias de Shadwen y sobre todo el hecho de que el tiempo avance en el juego cuando nosotros nos movemos (o bien pulsamos un botón para ello), para poder así pensar adecuadamente las acciones.
Este desarrollo bastante táctico recuerda al reciente Superhot ya que podemos rebobinar las acciones para poder realizarlas correctamente. No obstante, en el juego de Piotr Iwanicki, esta novedosa característica ha estado muy implementada pero en el juego que hoy analizamos hay ciertos fallos ya que muchas veces tenemos que rebobinar mucho tiempo, no sabemos de dónde vino la alarma por una cámara que nos juega muy malas pasadas (ya que es libre y controlable con el ratón o uno de los sticks de PlayStation 4) y un aspecto visual que hace que los enemigos y guardas se confundan con el propio escenario.
Además de la cámara, la cual podemos poner en primera o tercera persona, y escoger su distancia al personaje, hay ciertos fallos que esperamos se superen con próximos parches. Por ejemplo, la Inteligencia Artificial de los guardias deja bastante que desear: algunos están quietos en una posición, otros oyen un ruido desde un sitio y van a otro lugar, realizan patrullas totalmente repetitivas y muy básicas, y su comportamiento no varía aunque su compañero haya sido alertado.
Debido a ello muchas zonas se hacen repetitivas ya que constan de un simple pasillo en el que hay que ir evitando a los guardias con las mismas mecánicas, con escenarios muy simples, poca o nula interacción con los mismos, escasa población, y, para colmo, algunas esquinas en las que nuestro personaje se puede quedar atrapado sin saber porqué. Además como solo se puede rebobinar el tiempo al ser vistos, si ocurre estos últimos fallos hay que reiniciar la partida desde el último punto de control.
El juego dura bastante, cerca de siete u ocho horas en dificultad media y cuenta con muchos logros/trofeos, algunos más accesibles y otros bastante complicados aunque es posible conseguir casi todos entre la primera y segunda partida. Por desgracia una vez conseguidos todos ellos ya no es rejugable y por ello sus desarrolladores han incluido un completo editor de niveles en su versión para Steam cuyos escenarios podemos compartir fácilmente. Tiene muchas opciones aunque puede resultar un poco complejo al principio y esperamos que con el tiempo se pueda crear una gran comunidad de jugadores que otorguen muchas más duración al juego con nuevas historias.
Además, para los usuarios que estén interesados en Shadwen, el juego sale al mercado a un precio inferior al previsto originalmente gracias a los 3,5 millones de puntos conseguidos y 100.000 guardias asesinados en el periodo de su demo, la cual todavía se puede adquirir en Steam, GOG, y Humble Store. Gracias a esta demo el precio de lanzamiento del juego es solo 14,44 dólares/euros en PC (compatible con Windows, Linux y Mac) y 15,26 dólares/euros en PlayStation 4 para los suscriptores de PlayStation Plus, para los demás es de 16,99 dólares/euros temporalmente.
Gráficamente Shadwen no destaca demasiado, habiendo muchos juegos en el género con mejores gráficos, física de objetos, interacción etcétera, aunque su ambientación está muy lograda. Eso sí, como hemos comentado, la física de los objetos y enemigos deja bastante que desear, algunos movimientos son muy robóticos y los guardias no están muy bien diferenciados del escenario en ciertos lugares. La cámara además nos hace muy malas pasadas y la IA es muy mejorable por lo que solo destacan algunas acrobacias de la protagonista y las escenas que narran la historia, con un bello dibujado.
El sonido ambienta a la perfección y se oyen bastante bien las pisadas de los guardias. Las voces están en inglés mientras que los subtítulos han sido traducidos correctamente al español, inglés, francés, italiano y alemán, salvo algunos menús secundarios y ciertos momentos que esperamos se arreglen con el tiempo.
Al ser un juego independiente no requiere un equipo muy potente, necesitando solo un Intel Core i3 con 1,8 Ghz (2 Ghz como recomendado), 4 GB de RAM (8 recomendado), una tarjeta gráfica Nvidia GeForce 260 o Intel 4000 (Nvidia GTX 560 o Radeon 6850 como recomendadas), DirectX 10, 4 GB de espacio y Windows 7 con arquitectura de 32 bits, si bien los gráficos son más detallados en las arquitecturas de 64 bits.
En general Shadwen es una gran aventura que cumple su cometido dentro de los títulos independientes pero tiene rivales dentro del género de aventuras muy importantes y superiores como la saga Prince of Persia, Thief, etcétera. Cuenta con una idea muy original como es el rebobinado del tiempo pero no está tan bien implementada como debiera y tiene ciertos fallos en su desarrollo. Esperemos que con el tiempo se implanten ciertas mejoras o actualizaciones para que se solucionen sus actuales fallos.
