Hablar del género de los videojuegos con una cierta profundidad es, queramos o no, meternos de cabeza en un debate. Y no son pocos los que han entrado a discutir en los últimos años si la saga Dark Souls ha marcado el inicio de un nuevo género, dado que tendemos a comparar multitud de videojuegos de todo tipo con estas obras. Mi compañero Juanma García ya entraba a hablar del tema hace un tiempo, explicando qué hace a un género tener tal categoría y discutiendo si el llamado Souls-like podría ser considerado tal.
Pero, más allá de si es un género o no, está claro que Dark Souls ha inspirado a multitud de obras (como ya afirmaba mi compañero Ronald en otro gran artículo) que han tomado las propuestas de FromSoftware para darle una vuelta de tuerca. La propia FromSoftware ha seguido este esquema con obras como Bloodborne o Sekiro: Shadows Die Twice. Y hoy tenemos otra de estas obras que perfectamente podríamos enmarcar dentro del Souls-like: Mortal Shell. Pero, ¿es Mortal Shell un digno heredero de Dark Souls? Acompañadnos en nuestro análisis para descubrirlo.
Un spin-off de Dark Souls
Como bien comentaba en la introducción, durante los últimos años hemos visto obras como Nioh, The Surge o Remnant: From the Ashes, las cuales adoptan como suya la fórmula Souls para incluir algunos cambios en su jugabilidad o estructura. Mientras que Nioh da más importancia a la espada (y toma un camino posteriormente explorado por Sekiro), Remnant apuesta por cambiar las armas cuerpo a cuerpo por armas de fuego como rifles, pistolas o escopetas. Todo ello sirve para crear una experiencia que, enmarcada dentro del llamado Souls-like, se diferencie de manera estructural con Dark Souls. Pero Mortal Shell toma un camino distinto.
Mortal Shell es una obra que perfectamente podría ser un spin-off de la franquicia Dark Souls. En lugar de modificar o dar una vuelta de tuerca a las mecánicas básicas, lo que hace este nuevo videojuego es cambiar precisamente todo lo que rodea a las mecánicas básicas. De esta forma, Mortal Shell se convierte en un homenaje a la franquicia Souls que, siendo en esencia realmente similar a los juegos de FromSoftware, consigue diferenciarse y tener su propia alma.
El combate, el movimiento, el inventario, la disposición del mundo... Todo está prácticamente sacado de Dark Souls y todo funciona, por suerte, de una manera sorprendentemente buena. El combate es lento y difícil pero justo y satisfactorio; las armas son suficientemente variadas; los objetos que encontramos nos ayudan realmente en nuestro camino... Mortal Shell es toda una copia de Dark Souls en lo que a su núcleo jugable se refiere; y no digo esto como algo despectivo, sino todo lo contrario. El videojuego es capaz de tener esa esencia de reto asequible pero difícil, ese misterio que rodea a todos los enemigos y recovecos del mapa; esa sensación de Dark Souls que a tantos millones de jugadores ha enamorado a lo largo de los años.
Mortal Shell, como bien decía anteriormente, apuesta por modificar no el núcleo jugable, sino aquello que lo rodea, las capas extra que en las obras de FromSoftware aportan la profundidad y marcan la diferencia. Y lo hace con un cariño y cuidado sorprendentes. Mortal Shell incluye algunas mecánicas como los recipientes (una especie de armaduras vivas que nos dan ciertas características) o los objetos infinitos (objetos que encontramos en el mapa y que reaparecen tras un cierto tiempo) que sirven para convertir la esencia de Dark Souls en algo más accesible. No lo hace tanto bajando la dificultad del reto sino siendo más amistoso con el jugador, permitiendo más fallos y dando segundas oportunidades de forma más habitual.
Pese al buen hacer de Mortal Shell en la mayoría de sus apartados, hay algunos detalles en los que se nota que no se trata de un juego de FromSoftware sino de una obra hecha por apenas 15 personas. La cámara es el principal pero que le podemos poner al videojuego, ya que el fijado de los enemigos no funciona especialmente bien pero no resulta nada cómodo combatir sin dicho fijado. Por otro lado, el mapa, aunque es bastante abierto, realmente simplemente pone un camino a nuestro alcance, pues la mayoría de rutas secundarias no son más que zonas a las que volver más tarde cuando hayamos adquirido nuevas habilidades.
Todo ello hace que, si bien Mortal Shell cuente con una gran calidad, el apartado jugable se vea lastrado en ciertos momentos y, aunque el juego ofrezca numerosas segundas oportunidades y un trato mucho menos agresivo que la saga Dark Souls, la frustración pueda aparecer sin demasiadas complicaciones.
Una nueva historia
El mundo de Mortal Shell es uno de los principales atractivos de la obra. Pese a que usualmente se entra a los Souls-like por su jugabilidad, lo cierto es que Mortal Shell es capaz de poner sobre la mesa un universo y una narrativa que sobresalen por encima de sus competidores (y en algunos aspectos por encima incluso del propio Dark Souls). Mortal Shell apuesta, en lo narrativo, por una simplificación frente a las obras de FromSoftware.
Si bien la obra sigue teniendo una historia bastante críptica, el discurso subyacente en Mortal Shell se revela a sí mismo con mayor facilidad que en Dark Souls. Mortal Shell llega para hablar de la futilidad de la vida, para ser una suerte de ensayo estoico en el que la vida carece de sentido y simplemente estamos como parte del videojuego para seguir adelante sin ira, envidia, celos o frustración.
Este discurso, unido a un universo oscuro y cargado de lore, consigue que Mortal Shell se convierta en un referente narrativo dentro de los llamados Souls-like. Una obra que, pese a que su historia sigue siendo críptica, es capaz de revelar mucho más allá de la superficie y dejarnos con un discurso marcado y de calidad.
A medio camino entre el indie y el triple A
En cuanto a lo más técnico, Mortal Shell es una obra que podríamos definir como un doble A. No tanto porque sea una producción de presupuesto medio sino porque mezcla elementos del panorama independiente y de la industria AAA. Técnicamente el videojuego echa en falta mayores valores de producción y tanto los modelados como las animaciones desvelan que, pese a sus similitudes con la franquicia Souls, no hay el mismo dinero detrás.
Sin embargo, el apartado artístico es capaz de suplir cualquier carencia técnica. Desde los detallados entornos hasta el diseño de personajes, todo está cuidado al milímetro para, por un lado, hacer que el videojuego entre por los ojos; y por otro lado hacer que todo case excepcionalmente bien. Como las piezas de un puzle, todos los apartados de Mortal Shell encajan entre sí para que el videojuego se constituya como un todo, con una temática y estética propia.
En cuanto a la duración del videojuego, nos encontramos con una obra de un calibre muy inferior a Dark Souls. Pero no es no es necesariamente malo. Y es que Mortal Shell no se hace largo, pero tampoco corto. El videojuego explora sus propuestas a lo largo de algo más de una decena de horas en las que se lucen diferentes entornos y enemigos. No llega a causar sensación de repetición ni tampoco dejarnos con la sensación de que el desarrollo se ha cortado a medias por falta de presupuesto. Mortal Shell tiene una duración que encaja a la perfección con su propuesta y nos deja con un gran sabor de boca.
Conclusiones
Mortal Shell es una carta de amor a Dark Souls. Un videojuego que rinde todo un homenaje a la franquicia de FromSoftware aceptando que la esencia de Dark Souls, constituya o no un género, es insuperable en lo suyo. A partir de ahí, y adoptando el núcleo de las obras de FromSoftware, construye a su alrededor una experiencia que es capaz de adaptar la esencia de los Souls con algunos cambios que hacen del videojuego un producto más accesible, que ofrece más segundas oportunidades y que permitirá entrar a todos aquellos a los que Dark Souls se les hace demasiado cuesta arriba.
Es cierto que tiene fallos, sobre todo en el apartado técnico, que evidencian una falta de presupuesto y valores de producción respecto a otros Souls-like. Pero Mortal Shell parece ser el que mejor ha entendido este supuesto género. El único que ha dado un auténtico salto adelante en lo narrativo y el único que ha entendido que no es necesario cambiar el núcleo jugable de Dark Souls para ser diferente de este.
Mortal Shell es una carta de amor a Dark Souls. Un videojuego que adopta el núcleo jugable de las obras de FromSoftware y, en lugar de cambiarlo, construye a su alrededor para mantener la esencia. Pese a algunos fallos técnicos, Mortal Shell consigue sobradamente su objetivo y se convierte en uno de los 'Souls-like' mejor construidos.
Jugabilidad
Narrativa
Apartado artístico
Apartado técnico
Adapta a la perfección la esencia de Dark Souls
El combate es exigente pero satisfactorio
Da segundas oportunidades y resulta más accesible que Dark Souls
Narrativa interesante y con algo que contar más allá de su historia
Artísticamente sobresaliente
Técnicamente deja bastante que desear en algunos puntos
La cámara hace que el combate sea más complicado de lo que debería
El mapa, aparentemente abierto, resulta bastante lineal
Videojuerguista, lector y cinéfilo desde que tengo uso de razón. Hablo de videojuegos, cine, series o lo que me dejen. Incondicional del RPG clásico, lo indie y el wéstern. Me gustan los números y puedes encontrarme con una raqueta en la mano.
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